Estamos estudiando un tiempo muy emocionante en la historia de los judíos. Después de pasar 70 años en el cautiverio en Babilonia, por fin consiguieron permiso de regresar y de establecer su cultura, su vida de nuevo, como antes. la historia estaba bastante triste como consecuencia de simplemente tomar por sentado las bendiciones de Dios aun cuando estaban alabando a los ídolos generación tras generación por fin todo se acabó y Dios quitó su protección y todo el pueblo fue llevado a la esclavitud y eso fue la segunda vez porque antes estaban en la esclavitud en Egipto esa parte es bastante triste, y por eso tenemos un libro entero para conmemorarlo. ¿Y cuál es el nombre de ese libro que está conmemorando esa tristeza? Lamentaciones. Lamentaciones. Está llorando por lo que pasó. Era realmente correcto lamentar todo lo que ellos han perdido. Pero ahora están empezando de nuevo. Versículo uno. Cuando llegó el mes séptimo, y estando los hijos de Israel ya establecidos en sus ciudades, se juntó el pueblo como un solo hombre en Jerusalén. El mes séptimo era muy importante para las celebraciones en su calendario. En poco tiempo estaban ya dispuestos a reunir, y de la manera en que parece que tenían unidad casi perfecta, dice ahí, como un solo hombre, como un solo hombre. En la obra de Dios es necesario tener esa unidad, unidad santa para cumplir cosas grandes. Versículo 2, Entonces se levantaron Jesúa, hijo de Josadak y sus hermanos, los sacerdotes, y Sorobabel, él es como el gobernador, hijo de Asadaltiel y sus hermanos, y edificaron el altar del Dios de Israel para ofrecer sobre el holocausto, como está escrito en la ley de Moisés, varón de Dios. una vez instalados ahí los líderes querían celebrar los ritos correctamente todo conforme a lo que Moisés dijo es que tenían un gran anhelo del corazón celebrar a su Dios y adorar juntos aunque ni tenían aún su templo pero estaban impacientes El templo se van a reconstruir más tarde, vamos a ver, pero era la prioridad regresar a la adoración y a la alabanza, como celebraron a Dios antes, y nadie estaba forzando a ellos, presionándolos. Querían celebrar a Dios, y querían hacerlo correctamente, conforme a la Santa Ley, y no mezclando nada de las costumbres del mundo. Y precisamente con el altar, con los sacrificios, celebraban la expiación de su pecado, el perdón. Versículo 3. Y colocaron el altar sobre su base porque tenían miedo de los pueblos de las tierras. Y ofrecieron sobre el holocaustos, Jehová, holocaustos por la mañana y por la tarde. Ellos van a tener oposición. van a tener persecución, y lo veremos en el próximo capítulo. Y por eso tenía un poco de miedo, tenía miedo de los pueblos alrededor. Pero tenía la sabiduría, hermanos, de saber la manera de eliminar el temor. Era simplemente acercándose más a Dios. Cuando estamos cerca de Dios, los enemigos son cada vez menos formidables. Así que querían disfrutar a su Dios por medio de las alabanzas y la adoración, olvidando de sus temores. Y claro, nosotros podemos hacer el mismo. Si alguien quiere leer, Primera de Juan 4, 18. En el amor va el temor, sino que el perfecto amor está fuera de Dios, porque el temor lleva a su margen, de donde el débil no ha sido seleccionado por la sangre de Cristo podemos eliminar todos nuestros temores y eso es una manera de disfrutar la comunión con nuestro Dios. Versículo cuatro celebraron asimismo la fiesta solemne de los tabernáculos como está escrito y alocaustos cada día por orden conforme al rito cada cosa en su día además de esto el y todas las fiestas solemnes de Jehová, y todo sacrificio espontáneo, toda ofrenda voluntaria a Jehová. Quieren hacer todo, porque esto fue la gran comunión que han perdido por 70 años. Por eso fue muy emocionante para ellos, las celebraciones no tenía nada de un de sentido de rutina o un rito seco, sino que estaban bien gozosos estaban dando ofrendas y de alegría, no por obligación, no por presión alguna, sino que querían dar voluntariamente del corazón. Era gran parte de su gozo contribuir. Si alguien Amén. Dios ama al dador alegre. Si usted viene dando alguna, alguna ofrenda, algún diezmo, pero realmente se siente amarga por darlo, mejor no darlo. Dios no lo quiere. Tampoco lo necesite. Entonces, Dios quiere recibir amor con todo lo que hacemos. Nadie estaba presionando a la gente a participar. Todos estaban entusiasmados por la realidad de una vez más tener esta celebración que parecía perdida para siempre. Y ellos merecían perderlo por siempre. Sabían que no merecían esto. Ellos mismos sabían que han tomado la bendición de Dios por sentado antes, viviendo en sus tierras, como algo que ellos siempre iban a tener. aunque estaban antes apartando de su Dios, siguiendo a los ídolos. Es como en nuestros tiempos, como en este país. Hay pocos hermanos realmente que leen o meditan en las maldiciones del pacto. Por ejemplo, en el capítulo veintiocho de Deuteronomio. Ni el libro, ni el capítulo es el favorito de muchos. Pero había un que ese pueblo no quería realmente tomar en serio. Deuteronomio 28, 47 dice, por cuanto no serviste a Jehová tu Dios con alegría y con gozo de corazón por la abundancia de todas las cosas, servirás por tanto a tus enemigos que enviaré a Jehová contra ti, con, oh, hambre, y con sed, y con desnudez, y con falta de todas las cosas, y Él pondrá yugo de hierro sobre tu cuello, hasta destruirte Jehová traerá contra ti una nación lejos del extremo de la tierra, que huele como águila, nación cuya lengua no entiendas, gente fierra de rostro, que no tendrá respeto al anciano, ni perdonará al niño. Y como muchos en nuestro país ahora la gente dijeron, eso nunca puede pasar a nosotros. ¡Imposible! ¿De qué está hablando? Y aún viviendo en puras transgresiones, blasfemias, pecando sobre… pecados sobre pecados, piensan que tengo el derecho a las bendiciones. Pero eso es exactamente lo que pasó a ellos. Eso es lo que ellos acaban de sufrir por 70 años. Y el versículo 47, sumamente importante, dice, porque no serviste Jehová tu Dios con alegría y con gozo de corazón. Nuestra relación con Dios debe ser una alegría, un gozo, no simplemente un deber seco y rutinario. Si no estamos disfrutando el servicio a nuestro Dios, algo está mal. La alabanza, la adoración, la oración deben ser muy emocionantes. Y si no es así, tenemos que preguntar, ¿por qué? ¿Qué pasa conmigo? Versículo 6. Desde el primer día del mes séptimo comenzaron a ofrecer holocaustos a Jehová, pero los cimientos del templo de Jehová no se habían echado todavía. Era una prioridad. tenían prisa, querían pasar tiempo glorioso con su Dios, aunque ni tenían los cimientos del templo establecidos. Pero no importa, la gente querían disfrutar la santa comunión con su Salvador y Señor. Versículo siete. Y dieron dinero a los albañiles y carpinteros, asimismo comida, que trajesen madera de cedro desde el Líbano por mar a Jope, conforme a la voluntad de Ciro, rey de Persia, acerca de esto. Antes, Salomón tenía alianzas con estas personas, ya tienen permiso de reactivar todo ese comercio, y estaban empezando en serio la reconstrucción. Y claro, todo tenía su costo, pero la gente estaban dispuestos a contribuir. porque tenían gozo en tener otra vez acceso a la alabanza correcta. Nunca se sentían cómodos intentando cantar alabanza en Babilonia. ¿Cómo sabemos esto? Si alguien quiere leer en Salmo ciento treinta y siete uno a seis. Salmo ciento treinta y siete uno a seis. y los que nos habían llevado contigo, nos tenían cansados, y los que nos habían desorado, nos tenían nerviosos, sintiéndonos, cantando, al menos por el caso de Dios. ¿Cómo cantaremos para ti, por el caso de Dios? Gracias, Iris. Los sauces eran árboles. Dice, vamos a colgar el arpa en el árbol. Porque yo no puedo alabar a Dios así, aquí. No me siento nada porque estaban bajo un sufrimiento. Y también en las alabanzas Dios tenía ciertas reglas. Y estaban con gente que a lo mejor burlaba de su Dios. Si tu Dios es tan fuerte, ¿por qué estás aquí como esclavo? Y ellos sabían por qué. siempre estaban pensando en la esperanza de una vez más regresar a sus tierras, y ahora ese día ha llegado. Versículo ocho. En el año segundo de su venida a la casa de Dios en Jerusalén, en el mes segundo comenzaron Zorro Babel, hijo de Zaltiel, Jesúa, hijo de Josadak, Y los otros, sus hermanos, los sacerdotes y los levitas, y todos los que habían venido de la cautividad a Jerusalén, y pusieron a los levitas de veinte años arriba para que activasen la obra de la casa de Jehová. Ahora oficialmente estaban empezando. Era urgente para ellos levantar el templo. Pasa lo que pasa con los pueblos que vivían alrededor de ellos. Nueve, Jesúa también sus hijos y sus hermanos, y sus hijos, hijos de Judá, como un solo hombre. como un solo hombre. Asistían para activar a los que hacían la obra en la casa de Dios junto con los hijos de Enadad, sus hijos, y sus hermanos levitas. Una vez más, el Espíritu Santo está mencionando la unidad. Eran como un solo hombre. Esto siempre es necesario si el en el día de Pentecostés, preparando por la Pentecostés, dice, todos estos perseveraban unánimes, en Hechos 1, 14, unánimos en oración, y ruego con las mujeres, y María, la madre de Jesús, y con sus hermanos, como cuando la iglesia cristiana iba a empezar conquistando el mundo de su oscuridad, de su ignorancia, estaban unánimes, en unidad casi perfecta. Claro, cuando tenemos esa forma de unidad, si el mundo no entiende, es muy emocionante. Acabamos de sentir unidad con hermanos de otra iglesia, y eso es normal, pero bastante necesario. Eso quiere decir que el diablo quiere atacar esa unidad. Versículo 10, y cuando los Albaniles del Templo de Jehová echaban los cimientos, pusieron a los sacerdotes vestidos de sus ropas y con trompetas, y a los levitas hijos de Asaf con símbolos para que alevasen a Jehová, según la ordenanza de David, rey de Israel. Conforme a la ordenanza, no querían inventar nada nuevo, querían hacerlo correctamente. aún durante la construcción estaban alabando, glorificando a Dios. Estaban bien agradecidos de tener esa gran bendición de nuevo. La casa del Dios verdadero, la única casa así calificada en todo el mundo en aquel entonces. Ellos no tenían como nosotros, iglesias autorizadas de estar en todos lados. Había un centro en el gestamento antiguo once y cantaban alabando y dando gracias a Jehová y diciendo porque él es bueno porque para siempre su misericordia sobre Israel y todo el pueblo aclamaba con gran júbilo alabando a Jehová porque se echaban los cimientos de la casa de Jehová en cada paso cada etapa de oh aleluya la construcción era motivo de alabanza entendieron que ellos mismos no merecían nada de esto, que todo esto era por el puro amor de Dios, la misericordia, por eso cantaban, porque para siempre es su misericordia. Conociendo la magnitud de nuestras ofensas, la bajeza de nuestras transgresiones, es fácil celebrar el perdón que hemos recibido. Y por eso, aprender y meditar en la ley de Dios. Porque a veces, como si usted anda evangelizando a la gente, dice, pues yo, yo robo, mentiras y fornicación, pero no es para tanto. Pero la ley viene con la convicción de que realmente es algo tremendo. Y por eso es importante aprender, meditar, explicar la ley. Se conoce así el color negro del pecado. y podemos apreciar la magnitud de la deuda que Dios ha perdonado para nosotros también. En el siglo XII, estamos llegando casi al fin, en el siglo XII, y muchos de los sacerdotes, de los levitas y de los jefes de casas paternas, ancianos que habían visto la casa primera viendo Echar los cimientos gracias de esta casa, lloraban en alta voz, mientras muchos otros daban grandes gritos de alegría. Tiene gente llorando y gente de alegría. ¿Por qué los ancianos tenían, estaban llorando? ¿Alguien tiene alguna idea? Los hombres estaban celebrando, gritando de alegría, pero los que tenían edad estaban llorando. así es así es era era muy emocionante pero tenía una mezcla de emociones los jóvenes nacieron en el extranjero para ellos todo esto era muy nuevo muy glorioso pero para algunos viejos la experiencia un poco amarga también ellos recordaban la gloria del templo de Salomón eso es lo que dice y estaban La primera vez cuando venían ocupando esa tierra, la tierra estaba llena de riquezas, de recursos. Por eso se llamaba la tierra que fluye de leche y miel. Exactamente, Éxodo 3, 7, dice, dijo luego Jehová, bien he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he oído su clamor a causa de sus exactorias, pues he conocido sus angustias. y he descendido para librarlos de manos de los egipcios y sacarlos de aquella tierra, a una tierra buena y ancha, la tierra que fluye leche y miel, a los lugares del cananeo, del eteo, del amorreo, del fereceo, del ebeo y del ebuseo. Entonces, cuando salieron de Egipto la primera vez, salieron de algo terrible y llegaron a una riqueza, pero esta vez un poco diferente, Deuteronomio 8, 7, Dice, porque Jehová tu Dios te introduce en la buena tierra, tierra de arroyos, de aguas, de fuentes y de manantiales que brotan en vedas y montes. Tierra de trigo y de cebada, de vides, de higueras y granados, tierra de olivos, de aceite, de miel. Tierra en la cual no comerás el pan con escasez, ni faltará nada en ella. Tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes sacarás cobre. Y comerás, y te saciarás, y bendecirás a Jehová, tu Dios, por la buena tierra que te habrá dado." Entonces Dios tenía todo preparado en riqueza. Uno más en Deuteronomio 6.10 dice cuando Jehová tu Dios te haya introducido en la tierra que juró a tus padres, Abraham, Isaac y Jacob que te daría en ciudades grandes y buenas que tú no edificaste y casas llenas de todo bien que tú no llenaste entonces había edificios que Dios iba a presentar a ellos y cisternas cavadas que tú no cavaste, viñas y olivares que no plantaste, y luego que comas y sacías. ¡Cuídate de no olvidarte de Jehová que te sacó de la tierra de Egipto de la casa de servidumbre!" Entonces, la primera vez, la tierra estaba llena, llena de casas, cisternas, viñas, que Dios ha preparado para ellos. Y los hombres viejos estaban pensando en esto. Todo lo que tenía. Pero ahora entrando la segunda vez, la tierra estaba arruinada. En los escombros. Y tenía más riqueza en Babilonia. Estaba dejando atrás una riqueza para venir a un lugar que era un desastre. Y los ancianos pensaban en todo eso. Los jóvenes son llenos de emociones y a veces se disfrutan todo. Entonces nunca han visto lo que tenía antes, no estaban pensando solamente era algo nuevo, un nuevo templo, estaba lleno de alegría, pero había una mezcla de emociones para los que tenían edad. Versículo 13. Y no podía distinguir el pueblo el clamor de los gritos de alegría de la voz del lloro, porque clamaba el pueblo con gran júbilo, y se oía el ruido hasta de lejos. De todos modos, era muy emocionante. Hacían ruido en sus celebraciones, y esto era correcto. Sus corazones estaban llenos de gozo. Aun los que lloraban tenían un gozo, pero estaban reflexionando, ¿qué hicimos? ¿Qué hicimos con todo lo que Dios nos ha dado? Doctrina. Es correcto celebrar a nuestro Dios. con gran gozo. En todo lo que hacemos, hermano, debemos de cantar con gozo, trabajar con gozo, dar con alegría. Nuestra fuerza es nuestro gozo en el Señor. Si alguien quiere leer Nehemiah 8.10, es el libro que sigue, la misma temporada, Nehemiah 8.10. Amén, la última parte dice, porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza. Es algo que debemos de memorizar. A veces usted va a ver cristianos que andan con caras muy amargas, ¿y cómo van a ser una atracción? Ellos, entonces, si estamos así... Claro, vamos a pasar por tiempo de pérdida de un ser querido o algo, pero si eso es el sabor de nuestra vida, algo está desesperadamente mal. Debemos de tener gozo, debemos de esperar recibir algo cuando vengamos a Dios en oración, o una predicación, o el alabanza, debemos de esperar recibir. De otra manera se convierta en una rutina. El libro de Nehemiah también será un libro muy emocionante. ¿Cómo estás contigo en esta noche, hermano o hermana? ¿Es para ti un gozo venir a la casa de Dios? ¿Es una alegría para ti disfrutar la alabanza, sentir algo, recibir algo de Dios durante la alabanza? ¿Es para ti un deleite la oración, ir a Dios en comunión pidiendo, aún mejor, pidiendo con otros hermanos? ¿O es algo que simplemente tú no tienes tiempo para esto en tu vida, porque no se sientes nada? ¿Te recibes algo por la predicación? ¿O estás cada vez más fastidiado con todo esto? Si tu gozo está apartando poco a poco, entonces quiero orar por ti en esta noche, porque algo está mal. Estamos estudiando en domingo el libro de Apocalipsis y vamos a ir allá antes de cerrar Apocalipsis 2. En Apocalipsis 2, 2, Cristo estaba hablando de la primera de las iglesias, de la iglesia de Éfeso. Y dijo así, yo conozco tus obras y tu arduo trabajo y paciencia. Entonces es posible tener mucho trabajo y mucha paciencia, pero faltando algo. Faltando algo. Yo conozco tus obras y tu arduo trabajo y paciencia. Y que no puedes soportar a los malos. Tenías doctrina correcta. Y has probado a los que dicen ser apóstoles y no lo son. Y los has hallado mentirosos. Sabían analizar doctrinas profundas. Dice, ese hombre está mal. Esa doctrina no está correcta. Y Cristo estaba diciendo, yo reconozco todo esto. y has sufrido y has tenido paciencia y has trabajado arduamente por amor de mi nombre y no has desmayado pero tengo contra ti que has dejado tu primer amor recuerda por tanto de donde has caído y arrepiéntate y haz las primeras obras pues si no vendré pronto a ti y quitaré tu candalero de su lugar si no te hubieres arrepentido. Si estamos siguiendo con diligencia, pero no hay gozo, no hay amor. Hemos bajado mucho de ese primer amor que hemos tenido, algo está mal. Dios quiere darnos Su amor y nosotros debemos esperar recibir amor de Él y dar a Él. Si todo esto está convirtiendo en una rutina en un rito seco para ti, entonces, estás en gran peligro. Es tiempo de orar pensando en la promesa del Salmo de hoy. Si alguien quiere leer en Salmo treinta y siete cuatro, con ánimo. Amén. Eso es lo lo que Dios quiere, que en casa, en la iglesia, donde sea, que sea un deleite con Jehová. Y Él le está diciendo, pídamelo como que te quiere, te vas a recibir. Pero hay que tener esa relación, hay que tener esa fuerte de compasión, de pasión, la pasión de tu vida. Hemos estudiado muchas veces la idolatría en que otra cosa empieza a agarrar la pasión de tu corazón. Ese lugar principal, otra cosa entra y empieza a tomarlo. Tu tiempo con el Señor debe ser un gozo tremendo, y no una obligación rutinaria. Si tú has perdido ese gozo especial, es tiempo de buscarlo en oración ferviente. Vamos a orar. Oh Padre, ayúdanos, Señor, a aprender, sacar algo de provecho de este capítulo. gracias por el gozo de de de conocer otros hermanos, ver lo que tú estás haciendo en otras partes, señor, ayúdanos, señor, hoy domingo, entre semanas, señor, a tener ese gozo, señor, y si podemos reconocer que está faltando, ayúdanos a ver cómo, señor, echar leña en ese fuego, señor, de alguna manera, rogarte, señor, por ese primer amor. Pedimos todo esto en el Bueno, hermanos, estaremos aquí enfrente por cualquier petición que haya.