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hoy vamos a seguir con la serie que comenzamos hace unas semanas lecciones en la vida comenzamos con lecciones en la vida de José les voy a dar un repaso rápidamente por si se lo perdieron el bosquejo del sermón pasado de lecciones en la vida de José vimos en la vida de José y lo que Dios hizo con él En primer lugar, que aunque Dios esté con nosotros, aunque seamos creyentes verdaderos, podremos pasar persecución en el trabajo y en la familia. Servir a Dios, amar a Dios, no nos exenta de estas cosas. Segundo, vimos la advertencia que debemos de guardarnos del favoritismo, tanto de darlo como de recibirlo. darlo perjudica al que lo recibe, recibirlo nos perjudica a nosotros. El tercer punto que vimos es que debemos recordar que quienes Dios usa deben pasar por adversidad en este mundo, en la peregrinación por esta vida. ¿Quieres ser usado por Dios? Habrá adversidad en tu vida. ¿Quieres servir a Dios? Habrá adversidad. Cuarto, vimos que aunque Dios esté con nosotros, eso no nos exenta de sufrir. Tal vez Dios nos dé grandes oportunidades de servir. pero permita que nuestros enemigos sean los de nuestra propia casa. Ser creyente no nos exenta de sufrir. Quinto, encontramos que si no somos responsables y fieles en las cosas pequeñas, Dios nunca nos confiará las cosas grandes. ¿Se acuerdan? Y por último, vimos que debemos estar dispuestos para representar a Dios, aunque eso signifique quedarnos solos, como le pasó a José. Ese es el repaso. Hoy nos toca ver un personaje muy diferente a José. En esta serie vamos a ver una variedad de personajes Dios mediante, desde creyentes ejemplares hasta creyentes débiles e incluso inconversos. El ejemplo de hoy es un creyente débil. Veremos las lecciones que hay para nosotros en la vida de Lot. Así que comenzamos leyendo en 2 Pedro, capítulo 2. Acompáñenme por favor a Pedro, 2 Pedro, capítulo 2. En este capítulo encontramos una lista histórica de algunos de los juicios llevados a cabo por Dios. Y aquí en medio de la lista encontramos el juicio de Sodoma y Gomorra. Yo supongo que la mayoría de ustedes están familiarizados con la historia, no me va a dar tiempo de leer todos los pasajes, es sólo un mensaje sobre cada personaje, pero recuerden que en síntesis lo que pasa Es que Sodoma y Gomorra es una ciudad tan pecaminosa, tan entregada al pecado, y con tan pocos creyentes en ella, que Dios decide que la va a destruir y la va a borrar de la faz de la tierra. Y el único... que es rescatado es Lot y una parte de su familia. Dios manda dos ángeles para ir, advertirle y sacarlo de ahí. Eso es el síntesis o el grueso de lo que recordamos todos acerca de Lot y de lo que pasó con Sodoma y Entonces leemos aquí, segundo de Pedro, capítulo 2, a partir del versículo 6, dice, y si Dios condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que habían de vivir impiamente, o sea, en pecado, y libró al justo Lot, abrumado por la nefanda, es decir, vergonzosa conducta de los malvados que le rodeaban, porque este justo que moraba entre ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos inícuos malvados de ellos. Entonces, sabe el Señor librar de tentación a los piadosos y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio. Vamos a orar. Padre, nuevamente te agradecemos lo que has registrado en tu palabra para nuestra instrucción. Te agradecemos, Señor, que aún estos cuentos y estos relatos factuales, históricos, que nos preservas en el Antiguo Testamento son para nuestra edificación, son para crecer en entendimiento, en fe, en fidelidad. Te pedimos, Señor, que nos ayudes a analizar el ejemplo de Lot, que nos maravilla, Señor, nos maravilla cómo Tú lo salvaste a pesar de todos los pecados, todos los errores que cometió, Pedimos Señor que nos ayudes a nosotros no a sentirnos superiores, sino a acercarnos con humildad al ejemplo de Lot y examinar nuestras propias vidas. Señor, te pedimos que tu espíritu aplique a cada corazón tu palabra, que nos muestres en qué áreas de nuestra vida estamos tal vez siguiendo el ejemplo, el mal ejemplo de Lot. Te rogamos Señor que no permitas que nadie, ninguno salga de este lugar sin ser afectados, impactados por Tu Palabra, sin escuchar lo que necesitamos escuchar. Dependemos de Ti de todo corazón, Señor. Yo no puedo convencer a nadie Te damos gracias por tu promesa que tu palabra no te volverá vacía. Dependemos de ti. En el nombre de Cristo Jesús. Amén. Contrario a toda apariencia externa, la Biblia nos dice que Lot era un hombre justo. Es decir, creyente, aquí la palabra justo se está usando como sinónimo de creyente. Lot no es llamado justo en virtud de sus obras, porque vemos que en sus obras tropezó mucho, sino es llamado justo en virtud de ser un hombre regenerado, en virtud de estar en una relación salvífica con el Mesías que vendría. Dos veces Pedro nos describe a Lot como un hombre salvo, un hombre creyente. En el versículo 7 acabamos de leer que es llamado un hombre justo. En el versículo 8 es llamado un alma justa. Esta descripción de Lot, esta garantía de que fue un hombre creyente es algo sorprendente. Si lo único que tuviéramos fuera el libro de Génesis, nos sería muy difícil determinar si Lot fue creyente o no. Tendríamos serias dudas. La mayoría probablemente llegaríamos a la conclusión de que no, de que no fue creyente. Pero Dios nos quita la duda, contesta la pregunta de una vez por todas. Por estos dos, por estos versículos en Segunda de Pedro, aprendemos en primer lugar que Lot era un creyente verdadero. Aprendemos en segundo lugar que aunque Lot se rebeló en contra de Dios y aunque no puso a Dios en primer lugar durante gran parte de su vida, Nunca logró estar cómodo con lo que estaba haciendo, con la forma en la que estaba viviendo, con sus acciones. Nunca logró estar cómodo, nunca logró estar a gusto en Sodoma, ni con el pecado de quienes lo rodeaban en esa ciudad. Por lo tanto, podemos afirmar que Lot no era un creyente carnal. Los grupos que enseñan la falsa doctrina del creyente carnal, y si quieren saber más acerca de esto, hay un librito ahí arriba que pone la pregunta retórica, ¿existe el creyente carnal? La respuesta es que no. Pero los grupos que enseñan esta falsa doctrina afirman que un creyente puede vivir entregado al pecado como cualquier otro inconverso y a un ser hijo de Dios destinado para el cielo. Eso es una mentira. Eso es falso. Lot sí cayó en muchos pecados. se equivocó gravemente en su vida cristiana y eso es una gran advertencia para nosotros. No debemos de pensar que porque somos creyentes verdaderos no podemos tomar decisiones que afecten gravemente nuestra vida espiritual, que nos lleven por un camino terrible de sufrimiento y de errores y de pecados que nos afecten a nosotros y a otros. Lot cayó en muchos pecados, se equivocó gravemente, pero nos dice la palabra que vivía atormentado. Su conciencia lo atormentaba, vivía atormentado por sus pecados y los pecados de los que le rodeaban. Era un creyente débil, muy débil. De los más débiles y desobedientes que encontramos en la Biblia, Pero aún así leemos que Lot vivía abrumado por la vergonzosa conducta de los malvados, y que afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos inícuos de ellos. Lot no era un creyente carnal. Sin embargo, Lot es el padre, vean, Lot es el padre de todos aquellos que siendo creyentes priorizan el mundo y las cosas del mundo, buscando prosperar terrenalmente en lugar de poner a Dios en el primer lugar. Es el padre de todos los que no obedecen el mandamiento que nos dio Cristo en Mateo 6. Vamos a leerlo todo. Yo espero que se lo sepan de memoria. Mateo 6. Uno de los versículos más críticos en toda la Biblia. Siempre hago la broma. Está la lista de los favoritos y los favoritísimos. Este califica en la lista de los favoritísimos. Mateo 6, 33. Mas buscad, primeramente, el reino de Dios y su justicia. Y todo lo demás, todo lo que necesites, todo lo que Dios tenga para ti, será añadido. Dios se va a encargar si tú cumples con esto. Como veremos, no aprender esto, no vivir este mandamiento, conlleva un gran costo, un gran costo. Quienes viven siguiendo el ejemplo de Lot, caerán bajo la disciplina correctiva de Dios como cayó Lot. A diferencia de un creyente falso, A diferencia del que se autoproclama creyente sin serlo, Dios no le permite a creyentes verdaderos vivir en paz, viviendo como el mundo, sin darle el lugar que le corresponde en sus vidas. Los disciplina. El creyente no puede continuar entregado al pecado. Dios lo detendrá con disciplina. Incluso, como hemos visto ejemplos, hay ejemplos en la palabra de muertes prematuras para creyentes verdaderos que persisten en pecado y persisten en su rebeldía. Así que vamos ahora a Génesis. Busquen en Génesis, por favor. Y no pierdan su lugar ahí porque vamos a estar aquí todo el día. Vamos a ver algunos otros textos, pero Génesis es donde vamos a pasar nuestro tiempo. Y vamos a comenzar a avanzar aquí con las lecciones en la vida de Lot. Recordarán que Lot era sobrino de Abraham. Cuando Abraham, por fe, dejó la tierra de su nacimiento, urde los caldeos en busca de la tierra que Dios le prometió. Lot, cuando Abraham hizo esto, dejó su tierra, Lot estaba con él, y Dios prosperó a Lot grandemente. Hasta donde podemos ver, todavía no les he dado el versículo, nada más les dije que vayan a Génesis, así que no se angustien, no estoy leyendo. Hasta donde podemos ver por el texto en Génesis, mientras Lot vivía con Abraham, Vivía una vida santa y recta. Vivía como buen creyente. Pero cuando llegó el momento de separarse de Abraham y vivir cada uno en su tierra, Lot se rehusó a poner a Dios en primer lugar. Se rehusó a buscar primero el reino de Dios en su vida. ¿El resultado? Fue que en su codicia se fue a vivir a Sodoma y terminó incluso como un dignatario de la ciudad. Y ahí perdió todo, perdió todo. Luego se fue de Sodoma sin nada, en quiebra, escapando solo con su vida. Y hasta donde sabemos, terminó sus días avergonzado y humillado bajo la poderosa disciplina de Dios. En todo esto encontramos cuatro lecciones. Puse aquí una fracción de cuál es la lección en los cuatro puntos. Ahorita los vamos a rellenar más. Cuatro lecciones que debemos aplicar a nuestras propias vidas y que siguen perfectamente vigentes en nuestros días. La primera lección es ésta. Es una gran bendición estar en un ambiente cristiano. Es una gran bendición estar en un ambiente cristiano. Es un gran privilegio poder vivir en cercanía y contacto frecuente con cristianos, creyentes. En los capítulos 11, 12 y 13 de Génesis, vemos que Lot gozó de esta bendición. Tuvo la bendición de vivir en un ambiente cristiano cerca de creyentes y después la menospreció y la desechó. Pero por un tiempo gozó de esto. Y fue una gran bendición. Vamos a ver dos maneras en las que esto fue una bendición para Lot. La primera es ésta. Lot llegó a ser salvo mediante la influencia de sus familiares cristianos. No fue su familia quien salvó a Lot. Dios lo salvó. Pero su familia fue usada. como un instrumento para llevar eso a cabo. La Biblia nos dice que Lot compartía la fe de Abraham, que viajó con Abraham, que enfrentó las mismas pruebas y tentaciones mientras estuvieron juntos. Pero la clave aquí es que Dios usó principalmente la influencia y testimonio de Abraham para traer a Lot a Cristo. Y la pregunta para nosotros es esta, ¿Dudas que puedes ser usado por Dios para llevar a tus parientes a Cristo? ¿Lo dudas? ¿Dudas que puedes ser usado por Dios en la conversión de tus padres, de tus hijos, de tu familia extendida? Y como lo dudas, no cuidas tu testimonio, ni te esfuerzas por predicarles. Bueno, ya no lo dudes. Ya no lo dudes, aquí está, ya no seas negligente. Lot era sobrino de Abraham, no era su hijo, no era su hermano, ni siquiera era un pariente tan cercano, era sobrino de Abraham. Y sin embargo, Dios lo usó en la conversión de Lot. ¿Qué más incentivo necesitamos que este ejemplo para esforzarnos por ser una influencia, una voz que habla de Cristo a lo largo y ancho de nuestra familia? Nunca pensemos, Dios no me puede usar a mí en la conversión de mi familia. ¿Qué más? Siguiente. ¿Qué más necesitamos para entender que es crítico para nosotros estar en la iglesia? Buscar nosotros la compañía de creyentes. También es crítico asegurar que quienes están a nuestro cargo estén en compañía de creyentes. Busquemos que nuestros hijos, nuestras esposas, Estén en compañía de creyentes, lo más que se pueda. Vamos a buscar amistad, busquemosla con creyentes. Estemos con creyentes. Esta es una de las razones por las que nos vemos entre semana los miércoles. Comunión entre hermanos. Pasar tiempo juntos en torno a la palabra. No hermano, yo no estoy tan seguro que necesito eso, ¿no? Tiene años que no lo hago. Yo soy agente libre, yo puedo solo. Dios dice otra cosa. Tú te estás robando solo. Tú solo te estás perjudicando. Leemos en Hebreos, vamos a Hebreos 10. Por favor. Y vamos a regresar enseguida a Génesis. Capítulo 3 Vean este mandamiento en Hebreos 10 Hebreos 10, 24 Consideremos, consideremos los unos a los otros para estimularnos al amor y a las buenas obras Es un mandamiento, es una tarea, yo buscar estimular a mis hermanos al amor y a las buenas obras. ¿Es posible hacer esto sin vernos? ¿Es posible hacer esto sin tener relaciones cercanas con otros creyentes y buscar la compañía de mis hermanos en la fe? ¡No! ¡No se puede! Por eso leemos en 25, No dejemos de congregarnos como algunos tienen por costumbre, más bien exhortémonos y con mayor razón cuando veis que el día se acerca. Entonces, Lot fue salvo por medio de la influencia y cercanía de su familia, Abraham en específico. Ese fue el primer beneficio. El segundo beneficio fue que Dios lo prosperó grandemente. Dios lo prosperó en virtud de la promesa que le había hecho Abraham, que haría de él una gran nación, que lo prosperaría en gran manera. Y vean, esto no es una promesa de prosperidad, como los de paga por sufrir, etc. No es una promesa de prosperidad. No es, si soy cercano con creyentes verdaderos, Dios me va a hacer rico. No. Pero si es, si soy cercano con creyentes verdaderos, Dios me va a traer bendiciones, que no tendría de otra manera. Bendiciones que no tendré, si escojo estar lejos y mantener distancia con los creyentes verdaderos en mi vida, como lo hizo Lot, siguiendo el ejemplo de Lot. Ahora sí, Génesis 13. Génesis 13, 5. Leemos. También Lot, que andaba con Abraham. Dios había prometido bendecir a Abraham. Lot estaba en cercanía con Abraham. Y dice, también Lot, que andaba con Abraham. Tenía ovejas, vacas y tiendas. Al grado de que la tierra no era suficiente para que habitasen juntos. Pues sus posesiones eran muchas. Y no podían morar en un mismo lugar. Génesis 13, 5 y 6. La prosperidad que Dios les dio a ambos resultó en que ya no podían vivir en el mismo lugar. Pero veremos más adelante que Lot, aunque tenían que poner un poco de distancia entre ellos por necesidades físicas de todas sus posesiones y su ganado, pero vemos que Lot, en lugar de procurar mantener cercanía, comunión con los creyentes, con sus hermanos, es un poco como nosotros. Nos gustaría a todos comprar casa en la misma manzana, ¿no? Y vivir todos juntos. Estaría buenísimo, ¿no? No se puede. O sea, no alcanza el dinero. Además, Dios, como veremos más adelante, Dios quiere que seamos luz y sal por distintos trabajos y lugares de la ciudad. Entonces, no se puede. No podemos vivir todos como vecinos en la misma cuadra. Pero entonces, bueno, entonces por eso nos vamos a excusar para no vernos, ¿no? Por eso nos vamos a excusar para no aprovechar las oportunidades de estar en comunión con creyentes. ¡No! No podemos hacer eso. No podemos hacer eso. Lot, en lugar de procurar mantener cercanía y comunión con los creyentes, con sus hermanos, se colocó en la compañía más mundana que encontró. Y esto nos trae a la segunda lección para nosotros. Entonces es una gran bendición estar en un ambiente cristiano. La segunda lección es un pecado grave. Poner nuestro deseo de éxito y prosperidad terrenal por encima de Dios. Lord estuvo dispuesto a poner estas cosas en el primer lugar en su vida. Lord no quiso obedecer a Dios, ni buscó caminar por fe en estas áreas de su vida, prefirió caminar por vista. Mostró la rebeldía que había en su corazón y por eso Dios lo disciplinó. Invirtió el orden de las prioridades en su vida y Dios lo disciplinó. Retomamos, capítulo 13, versículo 7. Entonces, surgió una contienda entre los pastores del ganado de Abraham y los pastores del ganado de Lot. En aquel entonces, los cananeos y los fereceos habitaban en la tierra, entonces Abraham dijo a Lot, por favor, no haya contiendas entre tú y yo, ni entre mis pastores y tus pastores, porque somos hermanos. ¿No está delante de ti toda la tierra? Por favor, sepárate de mí. Si tú vas a la izquierda, yo iré a la derecha. Si tú vas a la derecha, yo iré a la izquierda. Entonces Lot asó los ojos y vio toda la llanura del Jordán, la cual era toda tierra de regadío, como un jardín de Jehová, es decir, otras versiones dicen como el Edén. como la tierra de Egipto, como la entrada de Sohar, antes de que Jehová destruyera Sodoma y Gomorra. Y Lot eligió para sí toda la llanura del Jordán y partió Lot hacia el oriente, así se separaron el uno del otro. Abram habitó en tierra de Canán y Lot habitó en las ciudades de la llanura y fue instalando sus tiendas. hasta Sodoma. Los hombres de Sodoma eran malos y muy pecadores contra Jehová. Y ahora vamos a saltar al capítulo 19, por favor. Vamos al capítulo 19. 19.1. aquí ya estamos adelantando la película hasta la crisis llegaron pues los dos ángeles a Sodoma a la caída de la tarde y Lot estaba sentado a la puerta de Sodoma y viendo los Lot se levantó a recibirlos y se inclinó hacia el suelo entonces en este segundo principio, en esta segunda lección Hay dos principios, una parte A, una parte B, que veremos en esta segunda lección de la vida del Lord. Primero, Dios debe tener el primer lugar en tu vida. Todo creyente que insiste en tratar de vivir la vida cristiana por vista, será disciplinado y obligado a vivirla por fe, tarde o temprano. Lot quería vivir por vista, no por fe. Esta fue la gran diferencia entre Lot y Abraham. Se ve muy claramente en lo que ya leímos. Abraham, ¿qué le dijo a Lot en el capítulo 13? Le dijo, no está delante de ti toda la tierra, por favor, sepárate de mí. Si tú vas a la izquierda, yo voy a la derecha. Le dio la preferencia a Lot. Si tú vas a la derecha, Yo iré a la izquierda. ¿Qué está pasando aquí? Abraham estaba dispuesto a vivir por fe. Estaba dispuesto a dejar las cosas en las manos de Dios. Confiaba que Dios lo llevaría por el mejor camino para él. Pero Lot no confiaba. Lot dijo, no, yo me voy a asegurar del mejor lugar. Yo voy a andar por vista. No pensó, yo quiero lo mejor para mí. Puso primero su ambición. No estaba dispuesto a buscar primero el reino de Dios. Hoy día pasa lo mismo. Hay creyentes que no quieren hacer lo correcto y confiar en Dios. Hay creyentes que están dispuestos a cambiar las cosas espirituales por la prosperidad terrenal, por perseguirla. quieren asegurar su futuro económico, o asegurar su éxito terrenal, por sus propias fuerzas, a toda costa, Dios los disciplinará, a su tiempo, si en realidad son creyentes. Leemos en Lucas, vamos a Lucas capítulo 14 por favor, y vamos a regresar a Génesis, Lucas 14-25, grandes multitudes iban con él, y él se volvió y les dijo, si alguno viene a mí y no aborrece a su padre, madre, mujer, hijos, hermanos, hermanas, y aún su propia vida, no puede ser mi discípulo. Así pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todas las cosas que posee, no puede ser mi discípulo. Dios exige el primer lugar en tu vida. No se va a conformar con el segundo lugar, o el lugar que tú le quieras dar. Hay creyentes que llegan a pensar como pensó el otro. Piensan algo así, ¿por qué privarme de las mejores cosas en la vida? ¿Por qué privarme de lo mejor que ofrece el mundo? ¿Por qué privarme del éxito que quiero? ¿Por qué no hacer lo que tenga que hacer para conseguirlo, así como hace el mundo que me rodea? Piensan, la pobreza no es ninguna virtud, y es cierto. Pobreza monetaria no es virtud, no van a encontrar eso en ningún lugar de la Biblia. Cuando la Biblia habla de pobreza, habla de pobreza espiritual, como lo dice Cristo en el sermón del monte, que es otra cosa completamente. En ningún lugar la Biblia dice que pobreza monetaria es virtud, pero lo que sí dice es que codiciar riquezas y éxito es pecado. Y es un peligro, aún para creyentes fuertes. En esta trampa cayó Lot. Lot no consideró los peligros de lo que estaba haciendo. No consideró el ejemplo de Abraham. Fue en todas las tentaciones de Sodoma. Fue directo hacia la tentación. O sea, es como alguien que va directo, sabe que tiene problemas con tentaciones a beber y se va directo al bar, ¿no? ¿Cómo? Fue directo a la tentación, directo a la feria de vanidades, a propósito, deliberadamente, y directo hacia la disciplina inevitable, la disciplina divina. Cualquier amor, cualquier deseo que tengas en tu vida, en tu corazón, que no se somete y no tomas su lugar por debajo de tu amor por Cristo. Está fuera de orden. Está fuera de orden. Todo amor, todo deseo debe subordinarse al amor por Dios. Si en nuestra lista de prioridades Dios no está en el primer lugar, nos estamos apuntando para su disciplina. Dios no acepta que familia, pareja, trabajo, amigos, éxito, ni prosperidad estén por encima de Él. en nuestros corazones. Él demanda el primer lugar. Así que la rebeldía de Lot llegó a un punto de quiebre, colmó la paciencia de Dios trayendo su disciplina. Y la pregunta para nosotros es, ¿está Dios en el primer lugar de tu vida hoy? ¿Está Dios en la cima de la lista? En primer lugar, ¿estás sentado en el trono de tu corazón? Si lo está, qué bendición, qué bueno. Cuida que así permanezca, porque muchos creyentes empiezan bien, como Lot, pero terminan mal. Algunos nunca fueron creyentes, pero otros sí lo son, y han incurrido disciplina por no entender y vivir esto, por no buscar primero el reino de Dios. Así que Lot obtuvo lo que quería, por un tiempo. incrementó sus riquezas. El texto dice, fue poniendo sus tiendas, es decir, es una ilustración de que fue expandiendo, creciendo, expandiendo, más, más, más, hasta que llegó a Sodoma. a la puerta de Sodoma. Fue extendiéndose, enriqueciéndose, hasta que llegó a Sodoma. Lot ya era rico. Antes de esto, tan rico que tenían que poner distancia. Él y Abraham no cabían en el mismo espacio. Ya era rico. Abraham también. La diferencia era que Abraham tenía contentamiento. Abraham estaba contento, estaba satisfecho con lo que tenía. Lot no. Leemos en primera Timoteo, no vayan yo se los voy a leer, grande ganancia es la piedad con contentamiento, porque nada trajimos a este mundo y dice evidentemente nada podremos sacar. Es decir, dice todo mundo sabe, incluso el que pide que lo entierren con su coche no se lo va a llevar. aunque lo entierren con el fajo de billetes y todo, no se lo va a llevar. Abraham vivía por fe, estaba contento con la providencia divina, pero Lot comenzó a ver riquezas, poder, éxito, como la meta, y el fin de su vida terrenal, y muchos siguen su ejemplo. Escogió para sí lo mejor, las mejores tierras. Buscó asegurar el mayor potencial en lugar de vivir por fe. Cambió una vida de contentamiento entre creyentes por una de ambición a la orilla del mundo. Y no sólo a la orilla, o sea, él buscó acercarse lo más que se pudiera. al mundo. Leímos que estaba sentado, Génesis 19, 1, Lord, estaba sentado a la puerta de Sodoma. En tiempos bíblicos, los principales hombres de la ciudad, los líderes, los más prósperos, los gobernantes, se sentaban en la puerta. Era una señal de estatus, de poder. Hay muchos ejemplos bíblicos de esto, lo vemos en el libro de Ruth, lo vemos en Proverbios donde se describe al esposo de la mujer virtuosa, así que Lot tenía al parecer... Todo lo que deseaba. Prosperidad, status, éxito, cosas que en sí no son pecaminosas. Pero Lot cambió estas cosas por una vida piadosa. Y eso sí es pecado. Cambió estas cosas por una vida piadosa. Las puso por encima de Dios en su lista de prioridades. Y eso nos trae Al segundo principio, seguimos aquí. Eso nos trae el segundo principio dentro de la segunda lección en la vida de Dios. Quien pone su deseo de éxito y prosperidad por encima de Dios, peca gravemente. Por dos razones. Primero, Dios exige el primer lugar en nuestras vidas. Dios no se contenta con menos. Segundo, quien no da a Dios el primer lugar, daña. su salud espiritual. Lut obtuvo prosperidad terrenal, pero al hacerlo perjudicó su salud espiritual. El principio bíblico que debe gobernar en el creyente lo encontramos en tercera de Juan. Vamos a tercera de Juan rápidamente. Tercera de Juan. Capítulo uno, solo hay un capítulo. Aquí encontramos a Juan escribiéndole al amado hermano Gallo y le dice a su hermano, hermano, amado, mi oración es que seas prosperado en todas las cosas y que tengas salud, así como prospera tu alma. Nunca debemos desear prosperidad ni éxito que perjudique nuestra alma. Debemos desearla en la medida que beneficie a nuestra alma. Pobreza monetaria no es virtud, y prosperidad y éxito no son pecado, mientras no dañen nuestra alma. Nada que venga a costo de tu prosperidad espiritual vale la pena. Si no lo queremos entender ahora, lo entenderemos después. Cuando sea demasiado tarde, como Lot, lo aprendió demasiado tarde. Lot no lo entendió hasta que Dios en su gracia, en su amor, le quitó todo para obligarlo a aprender la lección. Con eso llegamos al tercer punto en la vida de Lot. Cuando creyentes buscan conformarse y asimilarse al mundo, sale muy caro. Cuando un creyente busca conformarse y asimilarse al mundo, sale muy caro. Muchos al parecer creen que ser un creyente se trata de probar los límites. ¿Qué tanto puedo pecar? ¿Qué tanto puedo parecerme al mundo? ¿Creen que pueden probar los límites de la paciencia divina? El creyente que piensa así, vean esta ilustración, es como el esposo que piensa, bueno, voy a ver que tanto puedo engañar a mi esposa, pero mantener un buen matrimonio. Voy a probar el límite, voy a ver que hasta donde puedo llegar y mantener un buen matrimonio. Que tanto puedo pecar, que tanto puedo rebelarme, así lo veía Lot. Esa era su filosofía de vida. Cuando creyentes buscan acercarse, conformarse, embonar con el mundo, sale muy caro. ¿Dios nos manda a salir del mundo? No. Dios nos manda a vivir en el mundo, a ser luz y sal, pero nos prohíbe conformarnos. al mundo, amoldarnos al mundo. Muchos buscan amoldarse al mundo usando el pretexto, es que voy a ser lucisal, voy a evangelizar. Pero vean, no es lo mismo. Ser lucisal y amoldarte al mundo son cosas opuestas, incompatibles. No es lo mismo Les voy a leer en Lucas 14, buena es la sal, Lucas 14, 34, buena es la sal, pero si la sal se vuelve insípida, ¿con qué será sazonada? Si nos conformamos al mundo, si nos contaminamos con el mundo, si perseguimos lo que el mundo persigue y ponemos las cosas del mundo por encima de Dios, nuestro testimonio ya no sirve de nada. Y Cristo mismo nos lo dice. Lucas 14, versículo 35. Cristo dice, la sal que se contamina con el mundo no es buena ni para la tierra, ni para abono. O sea, si tú crees que vas a ser usado como creyente, conformándote, asimilándote lo más que puedas al mundo, Dios dice, tu vida ya no sirve ni para abono en este mundo como luz y sal. Dice, por eso los arrojan fuera. Quien tiene oídos para oír, oiga, pon atención, haz caso de lo que dice Cristo. Ser luz y sal requiere mantenerte puro, requiere poner a Dios en primer lugar, requiere ser diferente. Si no te mantienes puro, si te conformas al mundo, ¿qué pasará? Leemos en 1 Corintios, vamos ahí, 1 Corintios 15, versículo 33. 1 Corintios 15, 33 No se dejen engañar, dice. No se dejen engañar. Las malas compañías corrompen los buenos modales, algunas traducciones, las buenas costumbres, la virtud, la moralidad. Lot pensó que podía alejarse de los creyentes, menospreciar la comunión con creyentes, asimilarse al mundo, sin sufrir consecuencias, sin pagar el precio. Luego pensó que podía ser lo que algunos llaman un silencioso testigo de Cristo. Eso es algo contradictorio. Un silencioso testigo de Cristo. Hemos hablado en otros mensajes acerca de los cristianos secretos, ¿no? Yo también soy cristiano, ¿no? Cuando ven a alguien que llega y se identifica como cristiano, yo también soy cristiano, pero es secreto, ¿no? Nadie lo sabe. Tú que eres cristiano, a ti sí te lo voy a decir, ¿no? Pero para los demás es secreto. El supuesto testimonio rebajado del OT, no sirvió para nada, y lo vamos a demostrar. La palabra lo deja en claro. El testimonio del OT no sirvió para nada. Fue un desperdicio. Cuando vino la destrucción, no salió Lot con una sola persona. Más que sus hijas, que fueron prácticamente fuerzas, ¿no? Ni una persona de Sodoma salió con él. Su testimonio no sirvió para nada. Ni un solo pecador rescatado y convertido a Cristo. Entonces, te pregunto, cuando venga la destrucción a este mundo, cuando venga el día de juicio, que para nosotros es o el día de nuestra muerte o si vivimos cuando venga Cristo por segunda vez, cuando venga el día de juicio, ¿habrá alguien rescatado por medio de tu testimonio? O sea, ¿llegarás a las puertas del cielo con al menos uno? Hermano, todavía no hay nadie, le estás pidiendo a Dios todos los días. Señora, ayúdame. Que pueda alcanzar a uno, por favor. Dame esa bendición, de alcanzar a uno. De no llegar solo. Llegarás. Por lo menos con uno. Habrá uno rescatado por medio de tu testimonio, tu influencia, tu predicación. ¿Estás viviendo de tal manera que así sea? ¿O eres como Lot? ¿Serás como Lot en el día final? El testimonio rebajado de Lot no sirvió de nada, pero la influencia malvada de Sodoma sí lo impactó a él, sí lo perjudicó a él. Perjudicó la prosperidad espiritual de Lot. Le costó muy caro. ¿Qué le costó? Vamos a enlistar al menos cinco cosas que le costó a Lot. Cuando los creyentes buscan conformarse al mundo, embonar con el mundo, el costo es altísimo. ¿Qué le costó a Lot? Lot es la gran ilustración de un hombre que buscando ganar el mundo y sus tesoros, apagó y estiró al límite su testimonio y su relación con Dios, para al final perder todo lo que había, según esto, ganado. Lot perdió en primer lugar su testimonio, vamos a Génesis 19 por favor, no pierdan su lugar ahí, vamos a leer varios textos. En 19, por favor. Cinco cosas que perdió Lot. En primer lugar, perdió su testimonio. Leemos en Génesis, versículo 14. Entonces, salió Lot y habló a sus yernos, los que habían de casarse con sus hijas, y les dijo, ¡Levantaos! ¡Huyan! Salí de este lugar porque Jehová va a destruir la ciudad. Pero a sus yernos les pareció que bromeaba, que era un chiste. Lot había perdido su testimonio. O sea, los yernos le dijeron, como suegro, o sea, eres de los gobernantes de la ciudad, tienes todo invertido aquí. ¿Cómo nos vienes a decir que este lugar es tan malvado que va a ser borrado de la tierra? Dios va a borrar este lugar de la tierra porque es el más malvado sobre la faz de la tierra. Y aquí estás tú, metidazo. ¿Cómo, suegro? Aquí estás tú, viviendo con nosotros, viviendo como nosotros, invertido al máximo en este lugar. ¿Y qué creen, hermanos? nos va a decir lo mismo nos va a decir el mundo que nos rodea si nosotros somos iguales a ellos si vivimos en los mismos pecados y hablamos de la misma manera si preferimos su compañía a la de creyentes ¿cómo nos van a ver cuando les hablemos del infierno? su necesidad de un salvador ¿es una broma o qué? En segundo lugar... Perdió su testimonio en segundo lugar. Luego perdió su moral. Perdió sus principios. Leemos a partir del versículo 4, que cuando Lot recibió en su casa a los dos ángeles, que Dios envió para advertirles y sacarlos de la ciudad. Versículo 4. Antes de que se acostaran, los hombres de la ciudad, los hombres de Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más viejo, rodearon la casa. Y llamaron a Lot y le dijeron, ¿dónde están los hombres? que vinieron a ti esta noche, sácanoslos para que los conozcamos. Esta es una forma velada de decir que querían violarlos básicamente. Entonces Lot salió a ellos a la puerta y cerró la puerta detrás de sí y dijo, por favor hermanos, Lot no se identificaba con Sodoma, hermano, él estaba ahí como un silencioso testigo de Cristo. Aquí está llamando a los hermanos. Si se van al texto hebreo, esta palabra es la misma usada por Abraham en 13.8 que ya leímos, donde le llama a Lot su hermano. Y sale Lot a llamar a estos maleantes, hermanos míos, no hagáis tal maldad. Y aquí tengo dos hijas que todavía no han conocido varón, os las sacaré pues, y haced con ellas como os parezca. Sólo que no hagáis nada a estos hombres, porque para esto han venido a la sombra de mi techo. El mismo Lot que una vez caminó, oró, sacrificó y compartió con Abraham, ahora está dispuesto a prostituir a sus hijas vírgenes. de acuerdo a su escala de valores corrompida. Hermano, asimilarme al mundo no afecta mi moral. Yo sigo mis principios cristianos. ¡No! ¡No es cierto! ¡No se puede! Luego tenía una escala de valores corrompida, y ese es el precio. Ese es el precio. Luego perdió su moral cristiana. Estaba dispuesto a cambiar ciertos pecados por otros. a buscar el menor de dos males, como lo hace el mundo todo el tiempo, ¿no? El costo de ser conformado al mundo y codizar las cosas del mundo parece bajo en un principio. Así está diseñado para parecer la feria de vanidades. Todo es barato, todo sale barato, todo es fácil, pero siempre termina siendo más caro de lo que queremos pagar. Al poco tiempo comenzarás a llamar a lo bueno malo y a lo malo bueno, como le pasó al otro. Será cada vez más fácil ser partícipe en los pecados que te rodean. El mandamiento de Dios es ésta. Vamos a 2 Corintios 6, por favor. Vamos bien, vamos bien. Falta poco. Segundo Corintios 6.17 No te asimiles al mundo Segundo Corintios 6.17 Salid de en medio de ellos, apartaos Dice el Señor, no toquéislo en puro Y yo, os recibiré Si dices ser creyente, pero ahí estás en el antro con tus amigos. Si dices ser creyente pero ahí estás en el bar, si dices ser creyente pero no hay diferencia entre ti y el mundo y tu moral se conforma a la del mundo, estás en desobediencia y en grave peligro. La tercera cosa que perdió Locke fue su influencia. Leemos en Génesis 19.9 que los que vinieron a exigirle, que les entregara a los ángeles, le dijeron. Él les pide no, por favor, no hagan esto, yo les ofrezco esto, una cosa inconcebible lo que les ofrece. No, pero le contestan a su oferta, quítate, quítate de la puerta, quítate de ahí. Y añadieron, este vino aquí para residir como forastero y ahora habrá de erigirse como juez. Ahora te haremos a ti más daño que a ellos. Forcejeaban mucho, dice la versión 60, hacían gran violencia contra Lot, contra el hombre, contra Lot, y se acercaron para romper la puerta. Creyentes que se han conformado y asimilado al mundo no tienen influencia alguna en cuestiones morales, con sus vecinos, familiares y compañeros de trabajo. Si intentas redagüir al mundo siendo igual que el mundo, te vuelves un objeto de burla. El mundo se vuelve contra ti, como pasó con Lot. Influencia espiritual viene de pureza, de orar, de predicar y de decir, así dice el Señor, cuando hay que tomar decisiones morales. no viene de parecerte al mundo la cuarta cosa que perdió Lot fue a sus hijos perdió a sus hijos aquí hay dos posturas algunos creen que Lot tenía cuatro hijas dos casadas y dos vírgenes otros creen que sólo tenía dos que estaban las dos comprometidas para casarse pero aún no lo habían hecho y según el versículo 8 eran vírgenes. Versículo 8 de capítulo 19. La confusión viene principalmente de la traducción del versículo 14. La traducción de la King James en inglés traduce que Lot habló con sus dos yernos cuando fue a advertirles y dice que ellos se casaron con sus hijas. Así lo traduce la versión en inglés. Todas las traducciones al español que consulté lo traducen. Habló Lot con sus yernos que habían de casarse con sus hijas. No puedo resolverlo al 100%, lo que hice fue ir a la Septuaginta, la traducción más antigua que tenemos, que es la traducción del Antiguo Testamento del Hebreo al Griego, que se hizo antes de los tiempos de Cristo, es la traducción que Cristo mismo leía. La Septuaginta lo traduce, habló con sus yernos que se habían casado. con sus hijas. Así que al parecer Lot tenía cuatro hijas. ¿Dos casadas? Dos comprometidas o vírgenes, no sabemos. Si es así, Lot perdió a dos de sus hijas en el fuego del cielo que trajo Dios, porque los yernos se burlaron y dijo, ja, ja, ja, por su... Sí, sí, sí, claro, ahí nos vemos mañana, ¿no? Se burlaron de él y murieron. con sus hijas, porque su testimonio era tan débil que a sus yernos le parecía una broma cuando les advirtieron. Si sólo tuvo dos hijas, la conclusión es la misma, perdió a sus hijas, las dos que escaparon con Lot no murieron prematuramente, pero también las perdió en sentido espiritual. que es el único, en la suma final de las cosas, es lo único que importa. Tú puedes perder a un hijo joven de manera prematura, pero si se fue a estar con Cristo, no lo perdiste. Si se fue a otro lado, lo perdiste. Entonces, si solo tuvo dos hijas, las perdió en sentido espiritual, como veremos más adelante. Este es nuestro caso, les pregunto de nuevo. Es tan débil nuestro testimonio, que si hablamos de Cristo, del Evangelio, del juicio venidero, a los demás, incluso a nuestra familia, tal vez sobre todo a nuestra familia, ¿les parece una broma? ¿Algo de risa cuando tratamos de compartirles? Dios nos ayude, si es así. Entonces, Lot perdió todo lo que buscaba ganar. Perdió su testimonio, rebajó su moral, perdió su estatus e influencia, perdió a sus hijos, y la quinta cosa que perdió fue su esposa. Leemos en el versículo 26, Génesis 19. Entonces la mujer de Lot miró atrás, a espaldas de él, Estaban huyendo de la destrucción. Los ángeles les habían dicho, ni siquiera volteen. No miren, ni siquiera volteen a ver lo que están perdiendo ahí atrás. La esposa de Lot no hizo caso. Y se convirtió en una columna de sal. Ahora, podemos hacer muchas conjeturas sobre lo que pasó por la mente de la esposa de Lot. ¿Por qué lo hizo? Podríamos pensar que fue por la pérdida de dos de sus hijas. O podríamos pensar que fue simplemente el espectáculo y el instinto de voltear y ver lo que estaba pasando, ¿no?, la destrucción. Pero la palabra deja muy clara la condición de su alma en Lucas capítulo 17, se los leo yo. Dicen aquel día, el día del juicio, el que esté en la azotea y sus cosas estén en la casa, no descienda para tomarlas. Asimismo, el que esté en el campo no vuelva atrás, acordados. de la Mujer de Lot, Lucas 19, 32. La Mujer de Lot vivía con el ídolo del materialismo. El versículo dice, si llega la destrucción no vuelvas por tus cosas, no vuelvas por la compu, no, no vuelvas por las llaves del coche, por los billetes. La Mujer de Lot vivía con el ídolo del materialismo. El dinero y las posiciones estaban en el trono de su corazón. Cuando creyentes buscan conformarse y asimilarse al mundo, sale muy caro. Hemos visto estas cinco cosas, al menos, que le costó a Lot. Y con esto llegamos a la última lección en la vida de Lot. Número cuatro. Nuestro pecado siempre impacta a otros. Impacta a los que nos rodean y a los que amamos. Sobre todo, nuestra familia leemos en éxodo capítulo 20 éxodo 23 no tendrás dioses ajenos delante de mí no te harás imagen ni ninguna semejanza de lo que está arriba en el cielo ni abajo en la tierra ni en las aguas debajo de la tierra no te inclinarás a ellas ni las honrarás porque yo soy Jehová tu Dios fuerte ¡Celoso! Dios exige el primer lugar. Él te avisa. Yo soy celoso. No acepto el segundo lugar. Que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen. Y hago misericordia a millares, a los que me aman. Y guardan mis mandamientos. Nuestros pecados impactan a los que nos rodean. El pecado nunca se detiene a nivel individual. Nunca. Nadie peca en un vacío. No hay pecado que puedas cometer que se detenga contigo y te afecte solo a ti. El pecado siempre involucra a alguien más. indirecta o directamente. Y hay muchos ejemplos bíblicos de esto. Rápido, no vamos a ir a los textos. Vemos en 2 Samuel capítulo 21 cómo mueren ahorcados los siete hijos del rey Saúl por causa de su pecado. Treinta y siete años después de muerto Saúl mueren sus siete hijos ahorcados por causa de su pecado. Saúl asesinó a los gabaunitas violando el pacto que les había dado Josué e Israel, así que 37 años después de muerto, mueren sus siete hijos a causa de su pecado. Las consecuencias de nuestro pecado no se extienden ni siquiera muertos. Las consecuencias de tu pecado no se detienen contigo. Lo mismo pasa con inconversos y creyentes. Saúl fue inconverso, pero ¿qué hay de David? ¿Qué hay de David? Por causa del adulterio y homicidio que cometió David, Dios le dijo en 2 Samuel 12 que pagaría por cuadruplicado su pecado. Y así fue. Su hija Tamar, violada por su medio hermano, y tres de sus hijos. muertos. No podemos evitar que nuestros pecados afecten a nuestra familia. La ilustración suprema de esto es Adán. Todos somos pecadores. Toda la creación está bajo maldición por causa del pecado de este hombre. Romanos 5 nos dice, por tanto, como el pecado entró al mundo por un hombre y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos. pecado. Todos nacemos con una naturaleza pecaminosa, rebeldes contra nuestro creador como consecuencia del pecado de un hombre. Toda la vida de Lot y toda su familia sufrieron las consecuencias de su pecado y su asimilación en Sodoma. Lot hizo una inversión financiera y moral en Sodoma y perdió todo. Financieramente y moralmente. Toda esta historia termina con el terrible relato de las consecuencias y la corrupción que se manifestaron en las dos hijas de Lot que huyeron con él. De nuevo, Génesis 19, por favor. Las consecuencias del pecado de Lot se manifestaron en sus hijas. Lot huye con sus hijas. terminan viviendo en una cueva. De hecho, no tenía la opción de vivir en otra ciudad, pero ya estaba tan afectado, tan aterrorizado por lo que pasó, que mejor quisieron vivir en una cueva. Y leemos de nuevo en el capítulo 19, versículo 31, entonces la mayor dijo a la menor, nuestro padre es viejo, No queda ningún hombre en la tierra que se una a nosotros como es la costumbre en toda la tierra. Ven, demos de beber vino a nuestro padre, acostémonos con él y conservemos descendencia de nuestro padre. Ambas cometieron incesto con su padre. Vemos la influencia inmoral de Sodoma que permanecía en ellas aún después de partir. Si nosotros nos contaminamos con el mundo y buscamos asimilarnos en el mundo, nuestros hijos también lo harán. La descendencia de Lot fueron los Samonitas y los Moabitas, enemigos mortales de Israel. Entonces, ¿qué hemos visto el día de hoy? Cuatro lecciones ilustradas gráficamente en la vida de Lot. Es una gran bendición estar en un ambiente cristiano. Es un gran privilegio poder vivir en cercanía y contacto frecuente con cristianos. Es un pecado grave poner nuestro deseo de éxito, prosperidad y estatus terrenal por encima de Dios. Dios exige el primer lugar en nuestras vidas, y quien no se lo da, daña la prosperidad de su propia alma. Cuando creyentes buscan conformarse y embonar con el mundo, sale muy caro. Más caro de lo que cualquiera de nosotros quisiera pagar. Pierdes tu testimonio, se corrompe tu moral, pierdes tu influencia y podrás perder a tu familia. Cuarto, nuestro pecado siempre impacta a otros. Nadie peca en un vacío. El pecado no se detiene a nivel personal. impacta a los que nos rodean y a los que amamos, sobre todo a nuestra familia. Por lo tanto, ¿qué hemos de hacer? ¿Qué hemos de hacer? Si hemos visto las advertencias, el qué no hacer, ¿qué sí hemos de hacer? Primero, poner a Dios en el primer lugar, en nuestras vidas. Primero, en nuestra lista de prioridades, No pruebes qué tan lejos puedes llegar. No busques cuál es el límite de rebeldía que Dios tolerará. Sólo invitarás su disciplina. Pon a Dios en el primer lugar. Segundo, esfuérzate por mantener tu testimonio ante el mundo a toda costa, a toda costa. Debes estar dispuesto a sacrificar lo que sea por mantener tu testimonio firme, ser luz y sal. Si pierdes tu testimonio, ¿qué te queda? ¿Podrás vivir una vida cristiana con gozo y paz sin tu testimonio? No podrás. Tercero, busca el bien espiritual de tu familia. Dios ha puesto a los varones, a los padres de familia como líderes espirituales de sus hogares. Da la coincidencia que hoy es el día que el mundo marca como el día del padre, ¿no? Bueno, no sigan por favor el ejemplo como padre de Lot, el peor ejemplo que pudiéramos ver, pero nos sirve para para aprender. Cabeza de familia, considera la responsabilidad que recae sobre ti. ¿Estás siendo infiel? Si estás siendo infiel, no esperes que tu familia no sea infiel. No esperes lo contrario de tu familia. Pon a Dios primero. en tu vida y la de tu familia. Busca de todo corazón la salvación de tus hijos en lo que de ti depende. Vive ante ellos una vida santa que honra a Cristo. Considera, sé consciente del precio y las consecuencias de tus pecados para tu familia. Cierro preguntando, a los que están entre nosotros el día de hoy fuera de Cristo. ¿Qué esperanza tienes tú fuera de Cristo? ¿Qué esperanza tienes de evitar naufragio en esta vida terrenal y naufragio eterno en la vida venidera? Ninguno fuera de Cristo. Tu naufragio eterno es garantizado fuera de Cristo. Pon a Dios en primer lugar. Busca primeramente el reino de Dios y su justicia y todas estas cosas os serán añadidas. Si no conoces a Cristo, Pídele que te ayude a ponerlo a Él en primer lugar. Si eres creyente, éste debe de ser la bandera de tu vida, el principio que guíe tu vida. Si estás fuera de Él, aférrate a Cristo, confía en Él, cree en Jesús y serás salvo. Dios nos conceda que no haya lotes entre nosotros, que se nieguen a poner a Dios en primer lugar. Imitemos a Abraham, quien confió en que Dios le daría la medida de prosperidad terrenal que convenía a su alma. Que Dios le daría lo que le convenía. Buscó primeramente el reino de Dios y su justicia, y todo lo demás. fue le fue añadido vamos a orar padre que temible advertencia nos ha registrado en tu palabra gracias por mostrarnos estas cosas señor te rogamos padre que estemos donde estemos como creyentes en nuestro peregrinar, si estamos enfriados, si estamos cayendo en este error, este pecado del lote, sacúdenos Padre, despiértanos, no nos permites llegar a este extremo, a probar las aguas, a hacerte enojar y ver hasta donde podemos probar tu paciencia, no permitas esto Señor, despierta a todos los creyentes verdaderos aquí el día de hoy no nos permitas andar tibios apagados sin valorar a los creyentes que nos rodean y sin ponerte a ti en primer lugar siempre buscar tu reino sobre todas las cosas si alguien no te conoce señor acudimos a ti, el único que puede despertar y amar las almas, obrar el milagro del nuevo nacimiento. Te rogamos que llames a los que están aquí perdidos, a ti, ayúdalos a humillarse, acudir a ti, Señor, para salvación. Pedimos todo esto en el nombre de Cristo Jesús. Amén.
Lecciones en la vida de Lot
Series Lecciones en la vida
Lecciones en la vida de Lot. ¿Qué podemos aprender de la vida de un creyente muy débil?
Sermon ID | 724192035337812 |
Duration | 1:13:13 |
Date | |
Category | Sunday Service |
Bible Text | 2 Peter 2:6-9; Genesis 19 |
Language | Spanish |
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