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Vamos a abrirnos las vilas, hermanos, otra vez en el libro de Oseas. Ustedes aquí han estado oyendo los mensajes domingo tras domingo. Espero que algunos de los que están escuchando por internet también han seguido la serie de mensajes. Hemos visto que el Señor aquí está hablando a la nación de Israel en su pecado y presenta al profeta Oseas y su esposa Gomer como parábola viva de la condición de la nación. ¿Y qué fue la condición de la nación? caída lejos del Señor. Vivían en apostasía, idolatría, infidelidad al Señor. Y por eso el Señor puso a comer una esposa infiel, adultera, fornicaria, para demostrar lo que es Israel. Pero también el Señor pone a Oseas para demostrar lo que Dios va a hacer con su escogida, que va a salvar. Y vemos que no es la nación de Israel que va a salvar, porque siempre ha sido no la nación, no la etnia en su plenitud, sino el remanente, los escogidos. Y como el Nuevo Testamento nos muestra, Pues Romanos 9 hace muy claro porque cita el versículo de nuestro mensaje de hoy y muestra que está hablando no de volver a Israel a la tierra y bendecir a Israel en la tierra, la nación, entonces promesas naturales, sino que son promesas espirituales para el Israel de Dios, Israel espiritual, el remanente escogido del Señor y salvado por gracia. Romanos 9 hace muy obvio, cita Capítulo 2, versículo 23, y cita este versículo que habla a Israel, pero está hablando de la salvación de Israel espiritual. Y dice que eso incluye tanto gentiles como israelitas, todos los escogidos del Señor y todos los redimidos del Señor. Entonces, cuando habla aquí, habla de las bendiciones de salvación. Si insistimos en un cumplimiento natural de todas estas cosas, nos robamos de tantas promesas y tanta riqueza espiritual que se encuentran en este pasaje. Si pensamos que cuando habla de de viñas en Israel. Y pensamos, ah, qué bueno, Israel en algún tiempo tal vez ya fue cumplido o tal vez es un futuro, pero van a tener nuevas viñas y esto va a ocurrir y eso va a ocurrir. Ah, qué bonito, pero eso no tiene nada que ver conmigo. Y no sabemos cómo leer la Biblia. ¿Y qué hemos visto? Que el Nuevo Testamento interpreta el Antiguo. Y vemos que el Nuevo Testamento aplica tantas promesas para Israel, no a Israel nacional, sino a Israel espiritual. Y son promesas para nosotros. Y esto vamos a ver hoy. Y pues me acosté anoche meditando en esas palabras y me doy cuenta que siento tan limitado en cómo explicar y cómo expresar la profundidad y la grandeza de las promesas que encontramos aquí. El domingo pasado vimos versículo 14 y puse el título de ese mensaje yo la atraeré porque el señor dice que a sus escogidos como una novia él eficazmente poderosamente va a atraer va a atraer La palabra podía ser traducido, voy a seducirla. Entonces habla de cómo con amor él atrae a su novia para casarse con ella. Y el Señor asegura que lo hace poderosamente. Que va a ejercer tal poder que la hace venir voluntariamente. el mensaje hoy pongo el título yo te desposaré encontramos esas palabras aquí en versículo 19 yo te desposaré entendemos que es que estas promesas son para Israel de Dios, Israel espiritual, son promesas de salvación. Empezamos en versículo 15 hoy, vimos 14 semana pasada, empezamos en 15 y le daré a Israel redimida, Israel espiritual. y le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por Puerta de Esperanza allí cantará como en los tiempos de su juventud y como en el día de su subida de la tierra de Egipto. Mencioné el domingo pasado que él está usando memoria de recuerdos del éxodo cuando Israel fue rescatado. y sacado, librado de esclavitud en Egipto y salió al desierto para caminar con el Señor y conducido a la tierra prometida. Eso es lo que él está mostrándonos nuestra vida vieja. y que hemos estado en esclavitud, en el pecado, pero el Señor nos rescata y nos saca de esa esclavitud, nos libra y nos lleva a solas con Él y nos lleva y nos conduce a una tierra prometida, una tierra espiritual. Eso es nuestra salvación. Entonces él está usando y recordando eventos del éxodo. Y entonces él dice, y le daré sus viñas desde allí. Ah, pues, ¿qué está diciendo? Si insistimos en promesas naturales, en cumplimiento de estas promesas naturales para Israel, entonces Israel algún día va a tener viñas en su tierra. Ah, pues eso no tiene impacto en mi vida. interesante. No. Esto es paraíso espiritual. Esos son promesas de la salvación. Entonces, ¿qué está diciendo cuando él dice le daré sus viñas desde allí? Recuerdan desde allí dice en su camino a solas con el señor y dice cuando están caminando con el señor les daré sus viñas. Pues recuerden en el éxodo cuando salieron de Egipto y iban acercando a la tierra prometida y enviaron espías. Ellos entraron y ellos vieron toda la tierra y entonces regresaron demostrando a la nación pues la abundancia de la tierra. ¿Y qué encontraron y qué llevaron? Pues cortaron un racimo de uvas que era tan grande, tan pesada, que tuvieron que cargarlo entre dos hombres. ¿Verdad? ¿Recuerda? Entonces ellos tenían la promesa de entrar en la tierra y ser sostenido con abundancia. Eso era su esperanza al entrar en la tierra. Tenían evidencia de eso. Eso fue una bendición natural para la nación. Pero ahora él está hablando a Israel espiritual. y dice les daré sus viñas en 2.12 aquí mismo cuando está hablando de del juicio sobre Israel por sus pecados que dice haré talar sus vidas y sus higueras en la nación por su pecado. Ellos habían entrado con esa esperanza de ser sostenidos con la abundancia, pero por su idolatría y por su pecado, Dios castigó a la nación y perdieron sus vides, dice, sus viñas, perdieron toda esa abundancia por razón de su pecado. Pero ahora el Señor dice, cuando Él habla a la nación espiritual, dice, le daré sus viñas. ¿Qué está diciendo? El castigo que sufrieron por su pecado será convertido en bendición. Entonces ya tendrán por fin, en manera perfecta y amplia, completa, el sostén en abundancia. Y es sostén espiritual, porque son todas las promesas de la salvación. Como Pedro dijo en segundo de Pedro que tenemos en Cristo todas las cosas que se relacionan con la vida y con la piedad. El Señor nos bendice y nos sostiene con riqueza espiritual. Eso es la promesa. Entonces esa promesa es para mí. El Señor nos sostiene con abundancia. Si perdimos por el pecado, pero por la salvación, el Señor nos sostiene perfectamente y completamente. ¿Qué dice enseguida? Después le daré sus viñas desde ahí y que el Valle de Acor por Puerta de Esperanza. ¿Qué es eso? El Valle de Acor por Puerta de Esperanza. el Valle de Acor fue un valle no tan grande y sin importancia en la nación de Israel. Entonces, ¿qué es el significado? Otra vez insistimos en un cumplimiento natural, perdimos el significado. Simplemente pensar que Israel va a tener un valle, pues, bendecido, pues, ¿eso qué? va a ser un paraíso todo, ¿verdad? Entonces, no es eso, no refiere a simplemente un valle especialmente bendecido en la nación de Israel. ¿A qué le refiere? Hay más significado, más profundo cuando dice esto, que él dará el valle de Acor por puerta de esperanza. ¿Qué fue el valle de Acor? Su importancia se encuentra en su significado simbólico. Cuando entraron, recordando el éxodo y el tiempo en el desierto, entonces la entrada en la tierra prometida, cuando cruzaron el Jordán y tuvieron el gran el gran éxodo, gran éxito, digo, en Jericó. Después, ¿qué? ¿Qué pasó? Buscan conmigo en el libro de Josué. Josué 7. ¿Recuerdan que fueron al pueblito? Un pueblo chico. Ah, y ellos pensaban de él y fácilmente iban a conquistar. ¿Pero qué ocurrió en Jericó? Un hombre tomó de lo prohibido, desobedeció al Señor y fueron derrotados delante de ahí. vencidos, muchos muertos, y no podían vencer un pueblo chico. Pero por razón de pecado, tan pronto que habían entrado en la tierra prometida, encontraron que el pecado causó una caída. Inmediatamente, en Josué 7, 11, ¿qué encuentran? Israel ha pecado y aún ha quebrantado mi pacto, así dice el Señor. Israel ha pecado y aún ha quebrantado mi pacto que yo les mandé y también han tomado del anatema y hasta han hurtado, han mentido, mentido y aún lo han guardado entre sus enseres. tan pronto que entraron, pecaron y sufrieron castigo. Y en 25 a 26 encontraron el hombre que lo había hecho. Y el Señor nos muestra. Bueno, en Josué 7, 24. Entonces Josué y todo Israel con él tomaron a Acán, hijo de Sera. el dinero, el manto, el lingote de oro, sus hijos, sus hijas, sus bueyes, sus asnos, sus ovejas, su tienda y todo cuanto tenía lo llevaron todo al Valle de Acor. Y le dijo Josué, ¿por qué nos has turbado? ¡Túrbete Jehová en este día! Y todos los israelites los apedrearon y los quemaron después de apedrearlos. Y levantaron sobre él un gran montón de piedras que permanece hasta hoy. Y Jehová se volvió del ardor de su ira. Y por esto aquel lugar se llama el valle de Acor hasta hoy. Ese valle donde entraron esperando gran bendición fue el lugar de su primera caída y primer castigo y turbación, aflicción en la tierra prometida. Entonces entraron con tanta esperanza. pero toparon con el pecado y el castigo. Y fue llamado el Valle de Acor, Valle de Turbación o de Aflicción. Y ellos recordaban, no olvidaban eso. Y entonces aquí en Oseas, el Señor dice, y el Valle de Acor Daré el Valle de Acor no por valle de aflicción, ya no por lugar de castigo. Entrarán por este valle y será puerta de esperanza. Está mostrando que entrando en la salvación es una verdadera entrada con esperanza. Es una esperanza segura, una esperanza firme que tenemos en Cristo. el entrar en la vida nueva, esta relación nueva entre Dios y su pueblo redimido. Entonces, estas son promesas de sostenernos con abundancia y entrar en vida nueva con verdadera, segura esperanza. El Señor cambia aflicción en esperanza. Y por resultado de ser sostenidos con abundancia y entrar con esperanza eterna y viva y segura, dice, y ahí cantarán como en los tiempos de su juventud y como el día de su subida de la tierra de Israel. Entonces, lo que recibió la nación en la tierra, fue algo pasajera que falló. El pacto falló porque fue un pacto condicional y ellos no cumplieron. Pero en Cristo es todo diferente. Dice que vamos a regocijar, vamos a cantar. El Señor nos va a sostener y tenemos esperanza segura y viva en Cristo. Eso es la promesa para Israel espiritual. Mira el efecto de la salvación que el Señor asegura que va a cumplir en versículo 16. En aquel tiempo, dice Jehová, me llamarás Ishi y nunca más me llamarás Baali. No voy a entrar muy profundamente en todo eso. Pero habían acostumbrado llamarle al señor Ba'ali. Y dicen, ya no. Me van a llamar Inshi. Pues las dos cosas significan lo mismo. Mi marido. Llamaban a Dios Ba'ali, mi marido. Llamarán a Dios Inshi, mi marido. Mi amado. Pues, ¿por qué cambian eso? Pues, Baalí era palabra genérica para hablar de Dios. Cuando digo Dios, pues, eso no indica un Dios específico, es una palabra genérica. Puede ser usado para cualquier Dios, ¿verdad? Pues, usaban la palabra Baalí en esa forma genérica de cualquier Dios. Entonces usaban esa palabra con referencia a Jehová Dios. Vale, mi marido, mi amado. Pero y aún David nombró a uno de sus hijos Baaleada. Jonathan, hijo de Saúl, llamó a uno de sus hijos Meríbal. Pues usaban la palabra comúnmente así. Pero la palabra llegó a ser usado tan específicamente a un Dios particular, un Dios específico, Dios falso, que decidieron que pues ya no podemos seguir usando ese nombre para nuestro Dios. Porque esa palabra se identifica con ese baal que nosotros conocemos, baal de los dioses falsos. Pues es algo semejante al uso del nombre Allah o Allah, no sé cuál prefieren en español. Pero en Islam dicen que el único dios es Allah. Y hay debate si un cristiano convertido de Islam al Evangelio puede llamar al señor de la Biblia Allah o no porque es nombre genérico de Dios en ese idioma. Pero muchos de los musulmanes dicen, jamás pueden llamar a Dios cristiano, Allah. Es otro Dios diferente, aunque es la palabra genérica. Y algunos insisten, pues sí podemos usarlo. Y otros dicen que no podemos usarlo. Y los que salieron muchas veces dicen que, pues ya no. Hay otros nombres adecuados para alabar al Señor verdadero. No seguiremos usando ese nombre del Dios falso. El Señor dice que va a llegar un día que ya no se aferrarán a ningún Dios falso. Ni van a querer usar su nombre. Sino que me llamarán, ya no Wally, sino Ishi, otro nombre. Aunque la palabra en sí no era palabra mala. No, ya no. Dice en versículo 17, porque quitaré de su boca los nombres de los Baales y nunca más se mencionarán sus nombres. El Señor rescatará a su pueblo de toda su idolatría. y de ser asociado, alineado, conectado con dioses falsos. Porque ya no habrá fornicación o adulterio espiritual, sino fidelidad al Señor. Eso es el efecto de la salvación. Fidelidad al Señor. Amor especial y único para el Señor. Él es, eso es el efecto. Dos dieciocho, en aquel tiempo haré para ti pacto con las bestias del campo, con las aves del cielo y con las serpientes de la tierra y quitaré de la tierra arco y espada y guerra y te haré dormir segura. Otra vez, se dan cuenta que pues no No hay aplicación natural de esa promesa en realidad. Pues dice, quitaré de la tierra arco y espada. ¿Conoce alguien que vive en temor de arco y espada? Yo creo que no, ¿verdad? Entonces, obviamente, no está hablando de una promesa natural. Tiene un significado. Que es, en este pacto, dice eso incluye pacto con las bestias del campo eso tiene en idea está pensando en el lobo o en el tigre que andaba silvestre en el campo o con las aves como la águila porque el tigre y el lobo mataban a sus uejas las águilas mataban a sus a sus corderos recién nacidos y a las serpientes que los mordían en el camino. Había peligro dondequiera, y quitaré de la tierra arco y espada y guerra. Eso refiere a los enemigos. ¿Qué es el significado de todo eso? Te haré dormir segura. La aplicación espiritual de eso no es que el señor va a calmar las serpientes en Israel. Es que el señor nos va a cuidar de todos los enemigos. Podemos dormir seguros en Cristo. Él nos guarda. Y entonces él dice en versículo 19 Te desposaré conmigo para siempre. Cuando el Señor promete a Israel espiritual, a su remanente, a sus redimidos, te desposaré conmigo para siempre. Eso muestra la diferencia del pacto nuevo y el pacto viejo. El pacto viejo con Israel fue un pacto condicional y se acabó por el pecado de ellos. Pero el Señor dice, te desposaré conmigo para siempre. Será un pacto sin condiciones para la novia. Porque es un pacto que Él cumplirá. Es un pacto para siempre. Y cuando dice, te desposaré, ¿qué nos muestra eso? Te desposaré, quiere decir que su novia es escogida y amada. Y que el Señor dará todo costo, pagará todo costo necesario para tomarla como su esposa. Recuerden que el hombre que quería casarse con una muchacha tenía que pagar un dote. Y el Señor dice, te desposaré. Daré todo lo necesario para tomarte para mí como esposa y será para siempre. Te desposaré conmigo. Mira como él explica cómo lo hace. Te desposaré conmigo en justicia, juicio, benignidad y misericordia. Y te desposaré conmigo en fidelidad. Tres veces dice, te desposaré. No dice, voy a intentarlo si no lo voy a hacer. Y dice, lo haré para siempre. Y entonces dice, lo haré en justicia. Refiere esto a la justicia de Cristo que mantiene el pacto de la gracia. Es justicia mía, dice el Señor. Que mantiene este. matrimonio. Te desposaré conmigo en juicio. Si hubo juicio, la cruz, nuestro pecado ya fue juzgado y castigado en Cristo nuestro Salvador. Te desposaré conmigo en benignidad. Te tomo como mi esposa por gracia, por gracia. No es por mérito, no es por por cumplir de tu parte, sino es por mi gracia. Tomaré, te tomaré, me desposaré contigo por gracia y misericordia, que eso nos muestra la compasión del Señor a su escogida. Y finalmente te desposaré conmigo en fidelidad. Ah, qué rico esta promesa. Te desposaré en fidelidad. Este pacto de matrimonio es diferente del otro. El otro dependía de la fidelidad de la esposa Israel. Ese pacto fue roto. Este pacto nuevo depende de la fidelidad de Dios mismo. Te desposaré en fidelidad. Este pacto no puede ser roto. Depende de la fidelidad de Dios y no nuestra fidelidad. Entonces el Señor toma a su pueblo como esposa para siempre. Toma a su esposa ya justificado con la justicia de Cristo, juzgado en la cruz, y toma por gracia, en compasión y en fidelidad. Y entonces dice, conocerás a Jehová. Esto fue la petición de Jesucristo en Juan 17, antes de ir a la cruz. Él pidió por sus redimidos a que conocieran a Dios. que es vida eterna. Y Él dice, conocerás a Jehová. Eso es la promesa, conocer al Señor, tener vida eterna por Cristo. El pueblo dado a Jesús, el pueblo escogido, salvado por gracia, que recibe vida eterna, que conoce a Dios. Una cosa, hermano, observa que Él siempre, a través de esta profecía, está diciendo, el Señor hará a ellos. El Señor hará a Israel. El Señor hará a sus redimidos. Pero de repente, en versículo 16, lo leímos, pero no lo mencioné. tiempo dice Jehová me llamarás ha cambiado la voz ya no está diciendo ellos me llamarán sino que nos habla directamente tú me llamarás nunca más me llamarás Bali en 17 vuelva a hablar al profeta y así a la nación y dice su pero en versículo 18 en aquel tiempo el señor otra vez cambia su voz y dice haré para ti pacto versículo 19 te desposaré versículo 20 te desposaré Hay algo precioso aquí que podemos ver que el Señor ha estado dando su profecía y está hablando de aquel pueblo y está hablando al profeta de ellos y de repente el Señor pausa, gira y mira a través de la historia y nos habla personalmente a sus redimidos. les habla a ustedes, porque Jesús dice, el Señor dice, te desposaré, te desposaré. Es decir, a su pueblo, a sus redimidos, has sido escogido tú, has sido amado tú. y daré todo lo necesario para tomarte como mi amor. Eso implica nuestra sumisión a Él y nuestra dependencia en Él, pero su amor para nosotros, su sostenimiento para nosotros, su protección para nosotros. Y Él nos mira al ojo directamente. Entonces es más íntima y más personal y nos habla directamente a sus redimidos, a su Israel espiritual. A nosotros los creyentes, el Señor dice, te he escogido como esposa, te he amado como esposa y daré todo para tomarte como la mía. Eso es la promesa y nos lo dice directamente y personalmente. Y entonces, En 23, la sembraré para mí en la tierra. Tenemos una vida eterna, prometida y segura. Y dice, tendré misericordia de los Ruama y diré a Loame, tú eres pueblo mío. Él dirá, Dios mío. Como Romanos 9, toma este versículo y dice, El pueblo que no era mío, Israel perdido. El pueblo que no era mío, los gentiles. Será llamado. Lo amé. Pueblo mío. Pueblo de misericordia. Está hablando a su pueblo escogido. Es una promesa rica, preciosa y personal. Así, en todo este pasaje que hemos estudiado, el Señor nos muestra lo que ermos, pecadores, infieles, en aluterio espiritual, fornicación espiritual, idolatría, lo que ermos. ¡Qué vergüenza! Pero aquí también el Señor nos muestra lo que hizo por nosotros. Y tenemos que decir, ¡qué amor! Dios sufría nuestras ofensas y nos amó aún durante el tiempo de nuestra infidelidad. Romano 5 días dice que nos amó y nos salvó cuando éramos enemigos. ¡Qué amor! Todo este pasaje nos muestra lo que Él hizo en nosotros. Y tenemos que decir qué poder, el poder que nos atrajo poderosamente. Su maravillosa gracia y misericordia para con pecadores indignos. El Señor aquí nos muestra nuestra esperanza eterna. Y tenemos que decir qué gracia, qué vergüenza, qué amor, qué poder, qué gracia. Todo eso encontramos aquí en ustedes, en la profecía, en las promesas, en ese matrimonio entre ustedes. y comer y alabamos al Señor. Oremos, hermanos.
#6 Yo te desposaré
Series Oseas
Sermon ID | 7112223743963 |
Duration | 38:26 |
Date | |
Category | Sunday Service |
Bible Text | Hosea 2:15-23 |
Language | Spanish |
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