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Gracias y paz, bendito sea Dios, tenemos este gran privilegio de escuchar el Evangelio de Lucas. Estamos en el capítulo 9 y estamos en el versículo 37 donde habla acerca de Jesús sanando a un muchacho endemoniado. dice en el versículo 37 y al día siguiente cuando descendieron del monte una gran multitud le salió al encuentro y aquí un hombre de la multitud clamó diciendo maestro te ruego que veas a mi hijo pues él es el único que tengo y sucede que un espíritu le toma y de repente da voces y le sacude con violencia y le hace echar espuma y estropeándole a duras penas se aparta de él. Y rogué a tus discípulos que le echasen fuera y no pudieron. Aquí vemos algo, un tema muy importante. ¿Por qué es tan importante? Porque hoy en día todos quieren redefinir, reclasificar a las enfermedades en este mundo. Antes se hablaba de posesión, diabólica. Y ya hoy en día nunca es eso. Aunque las personas hablan en diferentes voces, dicen, no, pues nada más tiene una enfermedad mental. y ya nunca es conforme a lo que marca la palabra de Dios. Tenemos que entender que hay una guerra espiritual, que el diablo es real, los demonios, sus huestes de ángeles caídos, ellos son reales y pueden poseer y pueden hacer desastre en la vida de uno. El inconverso dice, segundo Timoteo 2, que está cautivo al diablo, cautivo. El Señor Jesús enseñó que todo el que peca, esclavo del pecado es. Necesitamos a Cristo y a su palabra y Cristo y el poder de Cristo en el Evangelio es suficiente para romper las ataduras del diablo. Cualquier adicción que usted pueda tener, en el Evangelio y la palabra de Dios es suficiente para romper las ataduras del diablo y hacerte libre porque la palabra de Dios dice que Cristo nos hace libres y podemos ver un ejemplo aquí el muchacho dice en el versículo 39 sucede que el Espíritu le toma y de repente da voces De repente da voces. ¿Cómo lo llaman hoy en día? Esquizofrenia y otras cosas donde reclasifican. También dice, le sacude con violencia. Es interesante porque esta misma porción está en Mateo 17, se encuentra en Marcos 9. Y ahí en esos pasajes también describe cómo es el espíritu que le hace echarse en el agua o en el fuego. Entonces, este demonio cuando se descuidaban, cuando no lo protegían, de repente él quería suicidarse, quería ahogarse en el agua, quería quemarse en el fuego. Él batallaba con pensamientos de matarse. Y eso no es solamente un problema mental en sí, es un problema espiritual. Es una guerra porque el diablo vino para robar, matar y destruir. Él quiere matar, anda como león rugiendo buscando a quien devorar. Él conoce que su fin es corto. Y Él quiere destruir y matarnos. Eso es lo que hizo el Espíritu en su vida. Le sacudía, tenía ideas de suicidio. Y le hace echar espuma. Y estropeándole a duras penas, se aparta de Él. Entonces, constantemente batallaba con posesión diabólica. Y no sé qué batalla. Usted no sé lo que puede ser pasando en la vida de su hijo o de su hija. Pero hay muchas cosas, muchas cosas en que uno se mete para estar más expuestos a posesión diabólica. Tratar de contactar a los muertos cuando empiezan a meterse en brujería, en las religiones falsas. Como mencioné, muchas veces quieren jugar juegos satánicos y están exponiéndose al ataque del enemigo. Muchos se encierran en su cuarto. Y lo único que hacen es que todo el tiempo quieren ver películas de terror. Otros quieren pasar todo el tiempo con sus audífonos y escuchar un ejemplo como Rock Pesado donde ellos están constantemente escuchando el mensaje del diablo. Y así abren la puerta al ataque del enemigo y así muchos también reciben espíritus malos. Entonces es muy importante que nosotros protegemos nuestros hogares y nuestros seres queridos de estos ataques. Pero este muchacho ya estaba endemoniado, ya estaba poseído y su padre le pide a sus discípulos que lo libren y no, no pudieron. No pudieron. Y el versículo 41 es uno de esos versículos donde uno tiene que sacar comentarios y uno tiene que buscar su significado. Permíteme leerlo y con mucha atención podemos entender su enseñanza. Respondiendo, Jesús dijo, Oh, generación incrédula y perversa, hasta cuando he de estar con vosotros y os he de soportar. Trae acá a tu hijo. Este versículo es muy sorprendente para muchos. Ellos ven a Cristo y a Dios como puro amor. y no consideran tanto su santidad. Ellos ni siquiera piensan que la ira de Dios es un atributo de Dios, pero sí lo es. Cristo es, Dios es infinito, sin límites en cuanto a su amor, en cuanto a su santidad. Pero también Cristo es infinito en cuanto a su ira. y es muy importante que nosotros entendemos que Dios no nos debe nada, no tiene por qué no está obligado a perdonarnos ni obligado a tener misericordia en nosotros Él lo hizo por pura gracia por su voluntad Él tuvo piedad de nosotros demonios están poseyendo a las personas y vemos como ellos por su propio pecado ellos buscan la maldad ellos buscan el pecado y se meten hasta que llegan hasta el fondo y cuando ya están al fondo entonces ahora si quieren buscar a Dios entonces Cristo al escuchar esto Algunos piensan que el versículo 41 es un regaño en cuanto a sus discípulos, pero no. Porque mira lo que dice. Oh, generación incrédula y perversa. No está describiendo a sus discípulos, está describiendo a la generación incrédula y perversa de los que rechazan a Dios. De los que lo rechazan, los que buscan su propio placer, su propia carne. Y terminan completamente atados. Y dice Cristo, hasta cuando he de estar con vosotros y os he de soportar. Trae acá a tu Hijo. No está diciendo que no quiere sanar. No está diciendo que ya, que ya se, en un sentido, que no quiere venir y salvar a los pecadores porque veremos esto dentro de pocos versículos. Pero lo que sí estamos viendo La verdad acerca de la ira de Dios. Otro tema tan importante es el celo de Dios. Dice Éxodo 20, yo soy Dios fuerte y celoso que castiga hasta la tercera y cuarta generación. Dios es un Dios celoso y Él no quiere que nosotros andemos buscando nuestro propio placer, rechazándolo. No es su voluntad. Y cuando ya estamos en el fondo, buscamos a Dios. Y por esto este versículo es tan potente, tan claro en lo que dice y muy pocos de los predicadores predican estos aspectos de la naturaleza y atributos de Dios. Versículo 42 dice, y mientras se acercaba, el muchacho, el demonio, le derribó y le sacudió con violencia, pero Jesús respondió, reprendió al espíritu inmundo y sanó al muchacho y se lo devolvió a su padre, y todos se admiraban de la grandeza de Dios. Cristo no es como el famoso yin yang que enseñan los chinos, un símbolo circular que tiene arriba blanco con un punto negro y en la parte de abajo es negro con un punto blanco. Esa falsa enseñanza de Asia que enseña acerca de la lucha eterna ellos tienen la idea de que siempre para empezar su enseñanza es es que la fuerza de la justicia y la fuerza de la maldad es igual por eso en el círculo tiene la misma cantidad de espacio y dicen que es la lucha eterna ¿por qué? porque dicen nunca va a ganar ni la justicia ni la maldad y no es así Cristo es victorioso Dios es todopoderoso, Satanás no. Los demonios no. Y podemos ver aquí que cuando Cristo se acerca y ahí está el demonio, los demonios tienen, ellos tiemblan. Dice Santiago que creen y tiemblan. A Cristo, cuando veían a Cristo, decían a Cristo, ¿Ya has venido para tormentarnos? Ellos saben quien es el victorio. Ellos saben quien es el Dios Todopoderoso. Y aquí el demonio sale. Sale porque Cristo los manda. Los echa afuera y tienen que obedecer a la voz del Todopoderoso. Y cual fue el resultado? Todos se admiraban de la grandeza de Dios. Y hay una lección que igual como Cristo sanó a los ciegos, también los pecadores son ciegos espiritualmente y Cristo nos sana. Así como Cristo sanó a los leprosos, también el pecador es sucio, inmundo. Y Cristo tiene poder para limpiarnos de toda maldad. Y Él puede sanarnos. Aquí también, El poseído es real, es histórico, es un relato de lo que sí pasó, pero a la vez es una enseñanza. Que todos aquellos que están atados por el diablo, todos aquellos que están adictos en su vicio, y atados y poseídos, Cristo y su palabra es lo único. Es lo único que nos puede librar y no solamente lo único que nos puede librar, es suficiente, todo suficiente. No necesitamos otra cosa sino el Evangelio y su palabra y Dios nos hace libres. Haced que os penetren bien en los oídos de estas palabras. Escuchen esto bien, porque acontecerá que el Hijo del Hombre será entregado en manos de pecadores. Esto lo dijo a sus discípulos. Ellos estaban maravillados y se quedaban pensando, wow, ya llegó el Mesías, llegó el Cristo, no solamente libra a las personas de los demonios, pero Él nos va a librar del poder de Roma. Y Cristo dice, no se equivoquen, no se queden con ideas falsas. Yo vine para dar mi vida en rescate. Yo vine para entregar mi cuerpo sin mancha y sin contaminación. Yo vine para derramar mi sangre preciosa que los redime de toda maldad, del pecado. Y también yo he venido para resucitar al tercer día. Este es el mensaje de Cristo. No piensan por lo que vieron que los voy a librar de Roma. Yo vine para dar mi vida en sacrificio. y en el versículo 46 entonces entraron en discusión sobre quién de ellos sería el mayor pobres discípulos pobres discípulos porque se perdían del enfoque querían hacerse grandes en esta vida y como es que eso también nos pasa ya pasa el tiempo Y se nos olvida que aquí no está nuestra residencia. Aquí no se encuentra nuestra ciudadanía. Dice que somos ciudadanos del cielo. También dice la palabra de Dios que somos peregrinos. Pero cuando pasamos mucho tiempo aquí está la tentación. la tentación de querer vivir para ser grandes aquí en este mundo y aquí están los discípulos y ellos están discutiendo entre ellos para saber quién es el mayor, quién tiene más autoridad y sigue corriendo esta misma triste historia hombres en la iglesia buscando sobresalir de ótrofes que quiere ser grande sobre la grey personas que no están contentos en servir en su señor y que la gloria sea para el sino que ellos mismos quieren la gloria y quieren recibir la gloria entonces si el muchacho era endemoniado los discípulos no estaban endemoniados pero también somos susceptos a caer en ideas satánicas es el diablo mismo quien dijo yo seré como el altísimo ese es el corazón del orgullo personas que quieren reemplazar a Cristo la gloria de Dios Y Jesús, percibiendo los pensamientos de sus corazones, tomó a un niño y lo puso junto así. Y les dijo, cualquiera que recibe a este niño en mi nombre, a mí me recibe y cualquiera que me recibe, a mí recibe al que me envió. Porque el que es más pequeño entre todos vosotros, ese es el más grande. También podemos ver esta enseñanza ahí en el Evangelio de Mateo. Y la enseñanza es esta. Especialmente como en el libro de Mateo dice que para entrar en el reino de los cielos tenemos que hacernos como un niño. ¿Cómo es un niño? Tengo varios pequeños en mi hogar. Y un niño es uno que es 100% dependiente. Porque no pueden hacer las cosas por sí mismos. No pueden. Nos habla de una humildad y de dependencia. Los niños son humildes en el sentido de que siempre quieren buscar a su padre y su madre. Un niño dice, ¿puedes hacer esto por mí? Un niño hace muchas preguntas porque reconoce que ellos son ignorantes. Y hacen preguntas porque esa confianza que tienen en su papá y su mamá. Los pequeños no pueden ni siquiera hacer su propia comida y, papá, mamá, por favor, haz esto por mí. No puedo. Y así es, esa es la enseñanza. Usted no puede salvarse. Usted no puede vivir la vida piadosa. Y uno que se hace como un niño, se hace dependiente de Dios, diciendo, yo no puedo salvarme, no puedo quitar las manchas de mi alma. No puedo pagar el precio, no puedo hacer nada, ni buenas obras, ni méritos para ganar mi salvación. No puedo. Pero Cristo sí. Cristo sí. Cristo puede salvarme. Sálvame Señor. Es uno que es dependiente de Dios. Es uno que confía plenamente, así es como un niño. Y dice aquí, cualquiera que recibe a este niño en mi nombre, a mí me recibe y cualquiera que recibe, a mí recibe al que me envió, porque él es el que es el más pequeño entre todos vosotros. Ese es el más grande. Entonces la meta no es hacernos grandes en este mundo. La meta no es ser los que tienen autoridad y la gloria y ser reconocidos. Eso es lo que buscaban, ser reconocidos. Pero aquí dice, el más grande es el más pequeño, el más humilde, el más que da la gloria a Dios en lugar de sí mismo. Entonces, respondiendo, Juan dijo, maestro, hemos visto a uno que echaba fuera demonios en tu nombre, se lo prohibimos, porque no sigue con nosotros. Jesús le dijo, no se lo prohibáis, porque el que no es contra nosotros, por nosotros es. Y vemos ese de nuevo a ese espíritu malo de ser sectarios de ser personas que dicen es que no pertenecen a nuestra denominación no pertenecen a nuestro grupo no son parte de nuestra iglesia y lo que quieren hacer a otros hermanos genuinos de Cristo y lo que quieren hacer es cortarles quieren prohibirlos quieren estorbarlos Ahora, por supuesto que Dios manda a todos nosotros como sus hijos tener discernimiento. Por supuesto debemos exponer falsos maestros por lo que son. Hay muchísimos pasajes donde Cristo mismo llamó a muchas personas falsos. Hay que disciplinar el pecado. hay que reconocer el pecado por lo que es pero a la vez no debemos ser sectarios no debemos ser en el sentido tan denominacional donde ya estamos rechazando a otros creyentes genuinos porque no llevan el mismo tipo de nombre como nosotros haciendo divisiones del Cuerpo de Cristo, porque el Cuerpo de Cristo no está dividido. Eso es claro, eso es lo que marca la Palabra de Dios. Hace la pregunta, ¿está el Cuerpo de Cristo dividido? Y la respuesta es no. Entonces no debemos decir que somos de Pablo que somos de Cefas que somos de Apolos no debemos seguir los hombres no debemos seguir las denominaciones debemos seguir a Cristo y incluso algunos tomaban diciendo no pues yo soy de Cristo y como tu eres de Pablo como tu eres de Apolo yo te rechazo a ti así no es Sigue con el corazón sectario, haciendo divisiones. Y debemos, el Espíritu de Dios, por medio de la Palabra de Dios, está uniéndonos. Y dice hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe. Hasta que todos lleguemos, no debemos dejar a ninguno atrás. En lugar de desecharlo, enséñale. Ayúdale. Si tienen prácticas o enseñanzas malas, en lugar de cortarlos, enséñalos. Hasta que todos lleguemos. Entonces aquí podemos ver que Juan dijo, vamos a prohibirlos, vamos a pararlos, porque no sigue con nosotros. Y Cristo dijo, no se lo prohibáis. También Pablo en su carta a los filipenses dijo que si hay personas que predican a Cristo, pues buscando causar problemas. Algunos predican a Cristo porque por vanagloria. Algunos lo hacen por los motivos incorrectos. Pero Pablo decía, pero yo me gozo porque Cristo es predicado. De nuevo, no estoy promoviendo aceptar las sectas. Hay que exponer, hay que sacar a la luz las mentiras de las sectas, de los que enseñan que Cristo no es Dios. Hay que exponerlos por lo que son. Hay muchas enseñanzas con la idolatría, las imágenes. Hay personas que están a favor de las mentiras del homosexualismo. Hay que demostrar, pero a la vez hay que enseñar. Y a los que son falsos, los que rechazan la Trinidad, los que rechazan la Deidad de Cristo, los que enseñan una salvación por obras, no es la fe verdadera, es un evangelio falso. Y Pablo dijo, Pablo dijo, que el que predica otro evangelio que sea anathema. Pero aquí, Cristo está diciendo, No está en contra de nosotros. No los prohíben. Déjanos. Versículo 51 dice así, Cuando se cumplió el tiempo en que él había de ser recibido arriba, afirmó su rostro para ir hacia Jerusalén. y envió a mensajeros delante de los cuales fueron y entraron en una aldea de los americanos para hacerle preparativos mas no lo recibieron porque su aspecto era como de ir a Jerusalén este pasaje, este versículo es muy importante Cristo no vino como discutían los discípulos No vino para ser reconocido. No vino para que vieran sus milagros y ser exaltado para ser levantado como Rey. Él no vino a eso. Él vino para dar su vida en rescate. Él vino. para ser el sustituto en vez del pecador, cargando nuestros pecados sobre él. Entonces, antes de que Cristo sea glorificado, Cristo vino primeramente para sufrir, para padecer y morir por nuestros pecados. Entonces aquí, cuando entró en la aldea de los samaritanos, para hacerle preparativos, no lo recibieron porque su aspecto era como de ir a Jerusalén. Y como ellos vieron que iban a Jerusalén, los samaritanos lo rechazaron. Viendo esto, sus discípulos Jacobo, Juan, dijeron, Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo como hizo Elías y los consuma? Así sus discípulos tenían muchos deseos de rechazar a otros primeramente vemos en el caso de Juan que vieron a otros echando fuera demonios y quería prohibirlos ahora ven a samaritanos que como vieron que tenía intención de la gente salen no aceptaron y dicen no pues de una vez de una vez vamos a que baja el fuego y que los consuma y cristo les dijo entonces volviendose el nos respondio diciendo vosotros no saben de que espiritu son Porque el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas, y se fueron a otra aldea. Él dice, mi propósito no es venir a condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo. Podemos ser tan prontos para ver a personas condenadas, Pero tenemos que ser personas maduras, personas que deseamos ver su arrepentimiento, su cambio. Hay muchos allá en la calle que están viviendo vidas que en verdad, en verdad el juicio de Dios está tan fuerte como contra ellos. Pero debemos predicarles el Evangelio. debemos desear su salvación porque si Dios tuvo compasión de nosotros, si Dios tuvo piedad de cada uno de nosotros, ¿por qué deseamos la muerte y condenación de otros? No vaya a pensar que no es que yo no estaba tan mal como él, Es que el hombre, el corazón del hombre es tan engañoso. Si no fuera por la gracia de Dios, tal vez usted sería como esa persona o peor. Usted pasa y ve a un borracho tirado ahí y dice, no pues ya, que se muera, porque hace aquí nada más ensuciando todo. Mira cómo viene, orinado. Pero si no fuera por la gracia de Dios en su vida, usted no sabe si estuviera en la misma posición. Es por la gracia de Dios que somos lo que somos. Es por la gracia de Dios que no estamos tirados en la calle como drogadictos. Y por esa razón, porque Dios tuvo gracia y misericordia y bondad hacia nosotros. Que nosotros también debemos desear que otros también seamos salvos como nosotros. Que así sea. Que Dios nos dé un corazón de evangelismo donde deseamos ver no la condenación de otros, sino la salvación en sus vidas. Que Dios bendiga su palabra, gracia y paz.
Espíritus Malos en los Hombres
Series El Evangelio de Lucas
Cristo sana el muchacho endemoniado pero los discipulos tambien tienen malos virtudes que tienen que cambiar.
Sermon ID | 710182223476 |
Duration | 32:56 |
Date | |
Category | Sunday Service |
Bible Text | Luke 9:37-50 |
Language | Spanish |
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