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Bien, hoy comenzamos un nuevo estudio en Judas para terminar toda la trilogía. Primera, segunda de Pedro y ahora Judas. Entonces, la fe que se habla allí es la fe que tenemos que vivir, la fe que practicamos, la fe que hemos creído, la fe como un cuerpo de doctrina. Por lo tanto, Judas, el versículo 13, constituye en el versículo lema de toda esta epístola que sólo tiene un capítulo y tiene 25 versículos. Así que el número 3, el versículo 3 y el 25 forman una gran doxología que también muchos pastores 24 y 25 emplean para despedir el servicio, despedir el culto. Así que como es nuestra costumbre vamos a leer toda esta epístola. Judas, siervo de Jesucristo y hermano de Jacobo a los llamados, amados en Dios Padre y guardados para Jesucristo, misericordia, paz y amor les sean multiplicados. Amados, por el gran empeño que tenía en escribirles acerca de nuestra común salvación, he sentido la necesidad de escribirles exhortándolos a luchar ardientemente por la fe que de una vez para siempre fue entregada a los santos. pues algunos hombres se han infiltrado encubiertamente, los cuales desde mucho antes estaban marcados para esta condenación, impíos que convierten la gracia de nuestro Dios en libertinaje, y niegan a nuestro único Soberano y Señor Jesucristo. Ahora quiero recordarles a ustedes, aunque ya definitivamente lo saben todo, que el Señor, habiendo salvado al pueblo de la tierra de Egipto, destruyó después a los que no creyeron, y a los ángeles que no conservaron su señoría original, sino que abandonaron su morada legítima, los ha guardado en prisiones eternas bajo tinieblas, para el juicio del gran día. Así también Sodoma y Gomorra y las ciudades circunvecinas, a semejanza de aquellos, puesto que ellas se corrompieron y siguieron carne extraña, son exhibidas como ejemplo al sufrir el castigo del fuego eterno. No obstante, de la misma manera también estos hombres, soñando, contaminan su cuerpo, rechazan la autoridad y blasfeman de las majestades angélicas. Pero cuando el arcángel Miguel luchaba contra el diablo y discutía acerca del cuerpo de Moisés, no se atrevió a proferir juicio de maldición contra él, sino que dijo, El Señor te reprenda. Pero esto plafeman las cosas que no entienden, y las cosas que como animales irracionales conocen por instinto, por estas cosas son ellos destruidos. ¡Ay de ellos! Porque han seguido el camino de Caín y por ganar dinero se lanzaron al error de Balaam, y perecieron en la rebelión de Coré. Estos son escoyos ocultos en los ágapes de ustedes, cuando banquetean con ustedes sin temor, apacentándose a sí mismos. Son nubes sin agua, llevadas por los vientos, árboles de otoño sin fruto, dos veces muertos y desarraigados. Son olas furiosas del mar, que arrojan como espuma su propia vergüenza. Estrellas errantes para quienes la oscuridad de las tinieblas ha sido reservada para siempre. De estos también profetizó Enoch en la séptima generación desde Adán, diciendo, el Señor vino con muchos millares de sus santos para ejecutar juicios sobre todos y para condenar a todos los impíos de todas sus obras de impiedad que han hecho impíamente y de todas las cosas ofensivas que pecadores impíos dijeron contra Él. Estos son murmuradores, criticones que andan tras sus propias pasiones, Hablan con arrogancia, adulando a la gente para obtener beneficio. Pero ustedes, amados, acuérdense de las palabras que antes fueron dichas por los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo, quienes les decían, en los últimos tiempos habrá burladores que irán tras sus propias pasiones impías. Estos son los que causan divisiones, son individuos mundanos que no tienen el espíritu. Pero ustedes, amados, edificándose en su santísima fe, orando en el Espíritu Santo, consérvense en el amor de Dios, esperando ansiosamente la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna. Tengan misericordia de algunos que dudan, a otros, sálvenlos, arrebatándolos del fuego, y de otros tengan misericordia con temor, aborreciendo aún la ropa contaminada por la carne. y aquel que es poderoso para guardarlos a ustedes sin caída y para presentarlos sin mancha en presencia de su gloria con gran alegría, al único Dios nuestro Salvador, por medio de Jesucristo nuestro Señor, sea gloria, majestad, dominio y autoridad antes de todo tiempo y ahora y por todos los siglos. Amén. Oremos. Gracias, Señor, por la gran libertad y el privilegio que tenemos de leer tu palabra, leerla en nuestro idioma, comprenderla y oramos, oh Padre, que tu santo espíritu que inspiró esta escritura también sepa aplicarla y que podamos nosotros también, dispuestamente, abrir nuestra mente y corazón para entenderla, para conocerla y para ponerla por obra y por práctica. Salva a aquellos que has de salvar. Conserva a tu pueblo, Señor. Mira a aquellos que se han deslizado, aquellos que se han enfriado, aquellos que toman la vida cristiana menos o la tienen del todo resuelta. Señor, ten misericordia de ellos porque están en grave peligro, si son o no son Tus hijos. Oramos por nosotros que sí somos creyentes para que Tú nos mantengas cada día más cerca de Ti, anhelantes de Tu venida, de Tu regreso, mientras no sólo combatimos en la fe, luchamos por la fe, sino que al mismo tiempo ayudamos a los hermanos a que continúen esta vida de esperanza, de consuelo que tenemos en ti. Derrama pues tu favor sobre tu pueblo, tu congregación, en el nombre de Jesucristo. Amén. Muy bien, vamos primero al autor. ¿Quién es el autor? Es Judas. El consenso general es que Judas es el hermano menor, uno de los hermanos menores, conjuntamente con Jacobo y Santiago. Hay un debate que este es Judas Tadeo y que no tiene nada que ver con los hermanos de Jesús. Siempre ustedes saben que la discusión o el altercado que existe es si en verdad Jesús tuvo otros hermanos. Al decir esto es si María tuvo otros hijos. Algunas personas van a defender a capa y espada de que no tiene María más hijos porque es virgen, como si el tener hijos deja de ser virgen. o el hecho de que fisiológicamente dará luz, y algunas mujeres dan a luz por cesárea, por ponerlo así, siguen siendo vírgenes en ese aspecto. Pero la virginidad en el aspecto bíblico es que la mujer no conoce varón. Nosotros sabemos que el Señor Jesucristo nació sin que conociera varón, fue engendrado por el Espíritu Santo. Así que al hablar del autor de Judas que se refiere a sí mismo, dice Judas, siervo de Jesucristo y hermano de Jacobo, este es Jacobo, Santiago, la epístola que tenemos, y se dirige a nosotros a los llamados por el Evangelio. Así que en estas consideraciones generales que vamos a mirar nosotros en esta en esta mañana encontramos que hay algunas semejanzas con Pedro después de dilucidar o de poner que simplemente este Judas es el que se refiere al hermano menor del Señor Jesús quien escribió la epístola. Así que, aunque no importa quién lo haya escrito, es una epístola que está en la Escritura desde muy temprano. Recuerden que para el año 150 después del Señor Jesucristo, todas las epístolas del Canon del Nuevo Testamento ya fueron aceptadas por la Iglesia. O sea que no hay más debate después del año 150. Incluso este epístola menciona algunos de los libros que después llegaron a ser apócrifos, como el alzamiento, el levantamiento de Moisés o de Enoch, y que son libros apócrifos que no están, o sea, que claramente no habían muchos escritos en aquella época, y hay otras iglesias o religiones también que mantienen los libros deuterocanónicos o apócrifos como parte de la Escritura. pero no son inspirados, la iglesia en general no acepta ninguno de esos libros, por eso aún en nuestra confesión tenemos los libros de la Biblia que nosotros consideramos que han sido inspirados por Dios y que la iglesia tiene que leer tiene que practicar y tiene que conservar, o sea, luchar para que se conserven. Por eso la aparición de versiones buenas como la Biblia de las Américas, que la estoy leyendo, o la nueva Biblia de las Américas, para que la tengan, no es que es un rival con la versión 60, son dignas de comparar en ese aspecto para poder tener traducciones, versiones que son formales en nuestro idioma. Hay otras paráfrasis y hay otras traducciones que algunos pueden tenerlo y leerlo para su propia aplicación o entendimiento, pero nunca se compararán a traducciones formales como aquellas que les acabo de mencionar. Entonces, luego de zanjar esta espístola, no se conoce una fecha exacta de cuándo fue escrita. Pero muchos siempre ponen que estas escrituras, las epístolas universales, son judeocristianas. ¿Por qué judeocristianas? Como Pedro, como Juan y como Judas, se consideran epístolas judeocristianas, mal llamadas para mí así, porque son para diferenciarlas de las paulinas, del apóstol Pablo. Pero Pablo fue judío, así que también sus epístolas son judeocristianas. Pero, ya ven, es interesante e importante entender que Judas, siendo el hermano menor del Señor Jesús o de Jacobo, al comienzo ellos no creían, no quiero extenderme un montón en cuanto a esto, pero usted lo puede comparar con Juan 7, los mismos hermanos del Señor Jesús no creían en un comienzo, o sea, que no eran discípulos, no eran primos, que siempre andaban con él. En Juan 7 claramente el apóstol Juan establece que ellos al comienzo no querían saber nada con los hermanos. ¿Tiene usted hermanos? ¿No pelea con sus hermanos? ¿No tiene diferencias con sus hermanos? ¿No incluso recuerde qué pasó con Caín y Abel, que aún menciona a Judas? Así que estos hermanos al comienzo no creían quién era él. Sabían que era su hermano, se habían criado con él y lo estimaban, pero no entendían. Y por eso es una buena razón de que este epístola es por el hermano de Jesús, porque él nos identifica como hermanos de Jesús. Oyo a su hermano decir una vez, mi madre y mis hermanos son aquellos que oyen la palabra de Dios y la hacen. Ustedes son mis hermanos. mucho más allá que en la carne. Y mis hermanas, si ustedes oyen la palabra de Dios y la hacen, que ustedes creen y aman al Padre y aman al Hijo y son obedientes en el Espíritu Santo a la Escritura, porque hemos creído en Él. Esta es la fe del Señor que nos ha dado. También encontramos que hay 12 diferencias. Si usted quiere ahondar en su estudio y usted compara Segunda de Pedro con Judas, que se los dije cuando estábamos estudiando Segunda de Pedro, vamos a ver que sí hay diferencias y también hay muchas semejanzas y muchos paralelos, así que hay 12 de estas semejanzas si usted quiere leerla, si encuentra más me avisa o si ve solo algunas menos, pero es para que escudriñemos la escritura. Pero la diferencia que hay me interesa más porque Judas es un poco más claro, es un poco más franco cuando él escribe acerca de los apóstatas. Por ejemplo, él le llama a los apóstatas impíos. infiltrados, mientras que Pedro les llama falsos maestros, se refiere a falsas enseñanzas, entonces hay una sutileza como si son o no son salvos, pero aquí Jehudas es muy claro, estos son impíos, lo que habíamos establecido anteriormente, o sea los apóstatas que pueden hablar de la Biblia, predicar de la Biblia, estar en medio de una congregación, no son salvos, no tienen el espíritu que los haya renovado o regenerado, son encubiertos, son lobos disfrazados de ovejas. Entonces Judas por eso nos interesa, nos gusta en ese aspecto porque nos clarifica, nos habla de esta gente. Judas se dirige a todos los creyentes y no necesariamente igual a los de Cappadocia, Bitinia, a toda esa región que Pedro claramente identifica como Babilonia en el exilio, en ese aspecto. Los creyentes siempre seremos extranjeros y peregrinos en esta tierra. Es algo claro que espero que ustedes hayamos comprendido, hayan comprendido y hayamos comprendido todos juntos de que aquí no tenemos una patria, aquí no podemos esperar nada. la nación que aguardamos en la nación celestial. Esa es nuestra Patria Celestial y que por lo tanto nosotros somos extranjeros y peregrinos aquí en esta tierra. ¿Te gusta tu comida o no? ¿Te gusta tu bebida favorita o no? Es el hecho de que el cristiano anhela la Patria Celestial, la Tierra Celestial. Por lo tanto esto, aunque no se refiera a una religión, a una región geográfica, se refiere a nosotros los creyentes. Está dirigida a nosotros los creyentes. Porque eso es lo que es la Palabra de Dios, pasa el tiempo, la distancia, no tiene nada que ver con cualquier otra religión en ese aspecto, porque donde quiera que haya un corazón renovado y regenerado por el Espíritu de Dios, esta Palabra es para Él. Esta Palabra solo es eficaz en aquellos que el Espíritu de Dios ha traído una nueva criatura. que ha abierto nuestro entendimiento y que tú y yo podemos decir amén a la Escritura. Aún puede ser que tú hayas venido de otras doctrinas y de otras creencias, no medias paralelas al cristianismo, y no es que estamos defendiendo doctrinas meramente por ser bautistas, como es esta Iglesia, sino si son bíblicas. Y el espíritu acomoda lo espiritual a lo espiritual. Y decimos, sí, esta es la palabra de Dios. Y esta es la palabra de Dios que cuando el creyente la oye, tiene que obedecerla. No hay dudas ni murmuraciones. Lo que la Biblia manda, hay que hacer. Lo que la Biblia no manda y prohíbe, no hay que hacerlo. Y donde la Biblia guarda silencio, lo hacemos con amor y con misericordia, comprendiendo a lo mejor opiniones que otros puedan tener. Por lo tanto, se dirige a nosotros, en realidad a todos los creyentes. Y el propósito es escribirles de nuestra común salvación para contender por la fe, para luchar por la fe, como dice esta versión, para que nosotros nos edifiquemos. Por eso habla también más adelante en la epístola, en el versículo 20, pero ustedes, amados, edificándose en su santísima fe, orando en el Espíritu Santo, esos son propósitos que encontramos en este epístola. Y el versículo 3, amados por el gran empeño que tenía en escribirles, o sea que el apóstol, el escritor tiene aquí el deseo, tenía ese anhelo de escribirles, no podía estar a lo mejor presentes. pero quería estar, quería enseñarles, quería predicarles en ese aspecto aunque sea por carta acerca de nuestra común salvación. Una razón por qué la Iglesia existe o por qué podemos mantenernos en comunión y podemos estar de acuerdo con la mayoría de esta doctrina es porque es una fe común, es una salvación común. Cuando encuentras que hay una discregación, cuando hay una división, o cuando otras personas tratan de poner separación que no se cree igual, tienes que tener cuidado, porque esta salvación es común. Yo tengo buenos hermanos pentecostales. Amén. Quizá pueden variar por algunas de sus prácticas, pero son salvos. Tengo buenos hermanos que pueden ser de otras congregaciones o denominaciones. Lo que interesa es el denominador común, si son salvos o no. Es nuestra común fe. Y creo que en esta parte, en este punto, puedo traer un sano ecumenismo. Cuando digo sano ecumenismo, no es que cualquier religión nos va a llevar al cielo, no. El sano ecumenismo es... ¿Estamos de acuerdo en doctrinas que son básicas? en doctrinas que predicamos y enseñamos, por ejemplo, en Apocalipsis, ¿se acuerdan? Siete doctrinas básicas de todo cristiano, no importa en qué parte del mundo esté, no importa cuál es su estado de madurez, su origen en cuanto a la fe, conoció al Señor Jesucristo. Eso sí me interesa. Si una persona es salva, Ahora, si tiene alguna doctrina media rara, puedo ser como Aquila y Priscila que vieron a Apolos predicar, pero Apolos estaba predicando el bautismo de Juan, que ya había pasado hace tiempo, recuerden la transición en el libro de los Hechos. Habían varias cosas que transicionaron por el nuevo pacto. Aún la última cena, lo que tenemos en el Señor Jesucristo, cuando cambia el antiguo pacto al nuevo pacto. Hubo muchas cosas que la Epístola de los Hechos nos enseña a nosotros que transicionaron y después quedaron en la iglesia. Algunos piensan que va a quedar para siempre, pero es indudable. La iglesia estaba embebida todavía por el judaísmo. tenía todas sus prácticas judaicas, que poco a poco fue cristianizándolas, como tenemos que hacer con nuestro idioma, cristianizarlo, porque hay muchas personas que pueden referirse a ciertas cosas en nuestro idioma, pero tienen una connotación totalmente distinta de lo que la Biblia dice, o está embebido por su religión, por su catolicismo romano. Entonces tenemos que aprender a distinguir cómo esas transiciones van ocurriendo. Pero claro como Judas, nuestra común salvación. Yo recuerdo hace años, había un señor que me estaba recortando el pelo y decía, yo soy salvo y tengo el don de sanidad. Muy bien, pero ¿está seguro que va a ir al cielo? ¿Usted cree en Cristo? Yo era nuevecito, era jovencito en ese entonces. Pero el señor rápidamente me enseñó, no estamos para discutir la salvación de alguien. No es que yo esté en mi religión y esté en mi denominación y yo la voy a defender a capa y espada porque es la mejor. Y creo que hay un grave error en este tiempo. No es un fundamentalismo ciego, es el hecho de que tú y yo tenemos que luchar por lo que es bíblico. aunque le duela al fundamentalismo, aunque le duela al pentecostalismo, aunque le duera a la nueva era o a los grupos neoapostólicos que veremos en alguna ocasión. Neoapostólicos son los nuevos del mensaje del evangelio de prosperidad, de sanidad, de que te tumban y te paran. ¿Será eso realmente algo bíblico en la práctica de la iglesia? No, la práctica de la iglesia es lo que tú y yo hemos hecho en esta mañana, ya que hemos incluido la cena del Señor, que ha pasado por su transición. Muchos de ustedes recordarán que se criaron en iglesias donde había una mesa con sábanas blanquitas impecables cubriendo los elementos de la cena. Y venían los diáconos y pasaban, era toda una ceremonia, doblaban las sábanas, ¿verdad? Y entonces las ponían a un lado y los diáconos repartían la cena del Señor a los hermanos. Pero tomaba tiempo, por eso lo hacían el domingo muchas veces en la noche, pero era una liturgia bonita, era reverencia de lo que el Señor había hecho. Y nota cómo ahora en el proceso de cambio, lo que tú quieras, hemos transicionado a unas cosas que son muy prácticas para evitar contagio o lo que sea, pero no perdemos de punto de vista cuál es el principio. El principio de celebrar la cena del Señor es de la salvación en el nuevo pacto por nosotros. Es nuestra común salvación. Todo cristiano lee la Biblia, todo cristiano ora, todo cristiano se congrega. Y uno de los efectos negativos de la pandemia ha sido para muchos en que se han acostumbrado a no congregarse localmente. y piensan que porque se jubilaron o porque ya no tienen que venir porque se acostumbraron a verlo por YouTube, por Internet, que son esfuerzos que la iglesia hace para que no te falte la palabra, pero realmente esta es la manera, tú tienes que congregarte. No tenemos que congregarnos, ya que no existe el peligro de contagio porque nos hemos vacunado, porque está bajando, lo que sea. Pero este es el principio en cuanto a Dios, nuestra común salvación. O sea, no puede existir un cristiano que esté allá afuera en el mundo y diga no tengo necesidad de congregarme. Y mucho más aquí con unoicos, porque nuestra congregación local también. nuestra congregación de celebración pública aquí. O sea, el creyente siempre busca congregarse, siempre busca tener comunión, aunque lo traten mal. Déjenme comprender, porque puedes pensar que tú eres muy sensible. Aunque contesten mal algunos hermanos, aunque a lo mejor no nos pase, porque a veces uno mira, no le han hecho nada, pero no le pasa a tal persona por su carácter, le falta crecer. No, porque la Biblia nos manda una y otra vez al amor fraternal. Y no puedes tú tener amor fraternal en el sofá de tu sala, en tu cama. En inglés a veces hasta suena un poquito mejor, aunque mi inglés sea mal. Porque dicen, yo, ¿a qué iglesia bautista vas? Bedside. A la cama, así, de la cama, al costado de la cama. Porque van ahí. Y ahí está muy bien porque no tienen que entrar en comunión con otros hermanos y la comunión no quiere decir algo totalmente perfecto. Porque tú que estás casado muchos años o pocos años, tú que tienes tu familia y que tienes tus hermanos, puedes discutir, puedes pelear con ellos, pero no dejas de ser tu papá y tu mamá. Al extremo a lo mejor con tu cónyuge se divorciarán, se separarán, cada quien tomará su camino, pero es común, o sea, no hay manera en que no haya ciertos roces. pero la gente lo toma por pretexto y muchas veces dicen, bueno en la iglesia hay muchos hipócritas ¿para qué voy a ir allá? pero no dejan ir al estadio donde hay más hipócritas o a un auditorio o a un cine ¿ves? porque a veces nuestra congregación o nuestra comunión con los hermanos que nos hace falta ese tipo de roce nos ayuda a edificarnos a crecer ¿Te acuerdas a lo mejor la primera vez que te enamoraste y fracasaste y alguien rompió tu corazoncito? Aprendiste. Te causó dolor y llanto, pero aprendiste. Se aprende o no. Es doloroso. Y en la vida hay muchas cosas así. Lo que queremos es que tú aprendas con cuestiones que no sean tan dolorosas, que no dejen cicatrices tan hondas. Pero definitivamente, leyendo la Escritura, no hay ningún creyente que no pase por pruebas, por sufrimiento, por dolor. Por lo tanto, Judas nos alienta a luchar, a batallar por la fe. Y creo que no les terminé de leer el versículo 3 porque, hablando de nuestra común salvación, he sentido la necesidad de escribirles exhortándoles a luchar ardientemente por la fe de que de una vez para siempre fue entregada a los santos. No hay nada que añadir a esta fe, a esta común salvación. Y terminando este pensamiento, un sano ecumenismo. Hoy más que nunca nos unimos con los hermanos, los creyentes, sin importar denominación de lo que creemos, porque no estamos para pelear. No estamos para pensar que tu congregación o tu iglesia o el pastor es mejor que el otro. Estamos para defender la sana doctrina. en el hecho de que sí somos fieles. Si tú eres fiel en tu congregación, si tu pastor predica positivamente la sana doctrina en la Biblia, amén. Aquí no hay nadie. Aquí puede venir cualquiera y llevarse a lo mejor a cualquier creyente que piense que tiene que estar en su congregación. No necesitamos ese tipo de personas. Porque siempre, cada vez que puede venir cualquier persona, siempre va a traer algún problema, o fue mal formado, o tiene sus ideas de cómo debe ser su cristianismo. Pero qué bueno para ustedes si ustedes nacieron aquí, si ustedes fueron edificados y crecieron a través de los maestros de esta iglesia, porque tienen una continuidad, tienen una cohesión, son coherentes y consecuentes. Y créame, vas a ir a cualquier otro lugar y no vas a encontrar que es lo mismo. Pero es simplemente por la edificación del Espíritu Santo. No porque el pastor sea mejor. Yo lo que trato de ser mejor es predicarle lo que es la Palabra de Dios en nuestra común salvación, donde debemos ser edificados. Amén. Entonces, edifiquémonos en cuanto a eso. No discutas con alguien de doctrina, de vanas palabrerías. No, si te encuentras con un testigo de Jehová no vas a tratar de convencerlo, vas a perder tu tiempo, hay que orar por él, mostrarle la verdad de lo que es el Evangelio. Igual con cualquier otra secta, porque él está convencido que está en esa verdad nueva, en lo que sea, y que por lo tanto ha dejado su religión tradicional que no tenía para entrar en aquello. Entonces, querido hermano, nosotros no estamos para convertir a la gente de una religión a mi iglesia o a mi religión, porque estamos perdiendo no solo el tiempo, sino ese no es el propósito del evangelio. El combatir por la fe es nuestra común salvación. Recuerdan, si una persona es salva, está segura que después que muera va a ir al cielo, que practica la fe, entonces edifiquémonos hablando de cosas que son más edificantes, valga la redundancia, innecesarias, sobre todo viendo que en el mundo hay mucha gente que sufre, mucha gente que padece, mucha gente que no tiene idea de lo que es el Evangelio, y sobre todo que tenemos que ganarlos a ellos para Cristo y darles buen testimonio. porque me temo que muchas veces lo mismo increíble, pero mira cómo pelean. Por eso yo no creo en nada. Tú y yo tenemos que ser más sabios, más inteligentes en ese aspecto. No estamos ni para pelear, ni para discutir, ni con nosotros mismos, ni con otros, porque eso se lo dejamos a los impíos, a los herejes, a la gente inmoral, a los encubiertos, a los infiltrados. Entonces, recordemos quiénes son estos apóstatas que vamos a estudiar en detalle las próximas semanas, otros aspectos. Son personas no salvas, son limpios, son encubiertos y usualmente son inmorales. Cada vez que tú ves, son inmorales en su economía, son inmorales en su moralidad, en su relación con otros. piensan que tienen ellos el derecho, como cualquier otra persona más, pero son infiltrados, o sea que Judas identifica que esta gente se meten, se infiltran, entran encubiertamente en congregaciones para traer sus malas doctrinas. Y bueno, prácticamente hemos terminado en cuanto al mensaje, pero vamos a ir más bien ahora al saludo. poquito hacia atrás en ese aspecto. Judas, siervo de Jesucristo y hermano de Jacob, a los llamados, nosotros los creyentes, amados en Dios Padre y guardados para Jesucristo, misericordia, paz y amor les sean multiplicados. Entonces, ¿qué entendemos de este saludo que ya hemos explicado en alguna manera u otra? Lo que quiero que noten es las triadas que no solo se encuentran en Judas, en otras partes, también se encuentran en Segundo de Pedro cuando uno lo analiza bien. Pero me encantan estas triadas porque es un judío el que habla, pero él añade el cristianismo. O sea, para el judío siempre mencionar paz y amor, o perdón, misericordia y paz, era muy común. la misericordia de Jehová sea contigo, el famoso shalom, que era el famoso shalom o paz para el judío cuando, como los cristianos a lo mejor se conocen y se saludan y dicen bueno Dios te bendiga, Dios te guarde. Bendecimos así a la gente en ese aspecto y hay que ver que hasta los que te piden dinero en la calle te bendicen. Pero este de nuestra común salvación, no hay nadie que de la calle nos pueda bendecir, Nosotros como creyentes, escúchame bien hermano, como sacerdote, tú puedes bendecir a otro, no porque tengas algo especial de Dios, porque eres salvo, es que eres salvo. El Espíritu Santo mora contigo, el Espíritu Santo está con nosotros y podemos interceder por otra persona. En ningún pastor, en ningún apóstol de estos falsos, hay algo especial. No hay nada. Cuando pensamos así, estamos pensando todavía en el romanismo, que creemos que el obispo, que el cardenal, que el papa, tienen una unción especial. Y recuerda que cuando la Escritura nos habla que somos sacerdotes, de que tú y yo ya somos una nación santa, lo que estudiamos en Primera de Pedro, ¿recuerdan? Somos una nación santa para Dios, por lo tanto ejercemos este sacerdocio para Dios, Entonces se nos habla que nosotros sí entendemos la misericordia, entendemos lo que es la paz, entendemos lo que es el amor desde el punto de vista de este judío. ¿Por qué añade el amor? Porque el amor no puede venir por otro si no es por Jesucristo. El judío tenía un concepto vago del amor, del amor ágape, del amor de Dios. Y siempre que nos refiramos al pueblo del antiguo pacto, todos ellos tenían a la mitad porque no había venido lo que es perfecto. La gracia y la misericordia vinieron por medio de Jesucristo. Mira cómo este judío Juan, el apóstol, lo menciona en su evangelio. Igual, cuando Judas habla de la misericordia de Dios, ¿dónde se muestra la misericordia de Dios? ¿Se mostraba en que Jerusalén no fuera sitiada por los ejércitos de Babilonia y de Asiria? ¿En qué se mostraba la misericordia de Dios en el pueblo judío? ¿Cómo lo notaban ellos? ¿No será que primeramente Dios llamó a Abraham? Isaac y Jacob. No se notaba que la misericordia de Dios era porque Dios estaba con su pueblo, se compadecía del dolor del pueblo, del pecado del pueblo. ¿verdad? Y por eso ofrece un nuevo pacto. Es la misericordia de Dios que envió a su hijo. Su hijo vino como el buen samaritán. Vino para todo, no sólo para los judíos. Los judíos lo rechazaron, pero él vino a esta tierra para mostrar la misericordia de Dios. Porque las personas siempre tienen ideas equivocadas de Dios. Piensan que Dios tiene que salvarlos. ¿Por qué? ¿Por qué Dios tiene que salvarte? O piensan que Dios es bueno. Y que como tú eres bueno, también debes estar como el Dios es bueno. Pero tenemos un pequeño problema en Romanos, cuando dice que no hay bueno ni a uno. Delante de Dios. Si no fuera por la misericordia de Dios, ninguno de nosotros sería salvo. Pero la misericordia de Dios no es que Él dice, bueno, tengo pena de ti, tengo pena que tú eres un pobre desamparado en este mundo, mira todo lo que has sufrido, todo lo que tú has pasado según tú, y entonces ahora ya tengo misericordia de lo que tú has hecho, entonces vente a morar conmigo. Eso no es la misericordia de Dios, es que nos dio su Hijo. Sacrificó a su Hijo. fue su hijo en lugar nuestro. Esa misericordia solamente puede venir del Padre, de lo alto, de los cielos, que tú ni yo podemos sondear ni comprender. Y por eso estamos en paz con Dios. ¿Y por qué lo hizo? Por amor. Pero no por amor de lo que Él vio en nosotros, sino el amor que Él derramó en nosotros otra vez por su Hijo. Por eso hay un montón de gente que malinterpreta, Voy a poner algo nuevo. Hacen un sacrilegio de Juan 3,16. Dicen, no, Dios te ama, mira, porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su Hijo Unigénito. Para que todo aquel que crea no se pierda, mas tenga vida eterna. Y dicen, ¿ves? Amó Dios te ama. Y Dios te ama tal como tú eres. No, tus interpretaciones humanísticas no entran en mi sano ecumenismo. Porque tú estás mandando mucha gente al infierno. El arrepentimiento y la salvación vienen porque tú te das cuenta de ese inmenso amor de Dios para contigo. Tú ves tu condenación a los pies cuando miras al Golgotha primero y clamas a Dios por salvación porque él te llamó por el Evangelio. Te llamó por el Evangelio porque en su misericordia, antes que todas las cosas fueran, él tuvo un pacto con el Hijo para salvarnos y por eso tenemos paz con Dios. Así que ese amor que menciona la Escritura aquí, amados en Dios Padre, es para guardarnos para Jesucristo. Es un amor que no se acaba. Por eso tú en este mundo sufrirás muchas decepciones, pero nunca del amor de Dios. Nunca de ese Señor que nos ha salvado porque estamos en sus manos, no pereceremos jamás, no iremos a juicio. La muerte segunda no tiene un efecto sobre nosotros, somos guardados por su poder. Por eso este mismo Epístola dice que él es poderoso para guardarlos a ustedes sin caída y para presentarlos sin mancha en presencia de su gloria con gran alegría. Para ustedes, a lo mejor, o gente que piensa que la salvación se pierde, aquí te enseñamos por qué creemos en que somos guardados por él y que no podemos caer. Lo quieres aceptar o no, puedes seguir tu camino, pero no vemos nosotros en la Escritura algo en que el creyente tropieza y cae al infierno. Al contrario, la promesa para aquel que es salvo será guardado. será protegido, eres la niña de sus ojos. No importa que suba los ríos, no importa que vengan huracanes, no importa que se derrumben edificios, no importa cualquier cosa, que venga un cáncer terminal a mi vida, no importa que a lo mejor todo el mundo que yo he pensado que me ha querido me dejan o me abandonan, que mis hijos me maltraten, no importa nada de eso, con tal de que estoy seguro que Dios está conmigo. y que Él me ha salvado, y que nada ni nadie, ni lo alto ni lo profundo, me podrá separar de este amor, que es el amor de Dios que ha dado a su Hijo Unigénito para que yo sea salvo, y tú también. Esa es nuestra común salvación. Y nota que Judas y la matemática ya existían en aquella época. Él emplea un término matemático multiplicado. ¿Tú te recuerdas cuando tú tenías algún problema con matemática? Yo tuve mucho problema con matemática al comienzo. Y mi multiplicación o mi aritmética se agravaba en el sentido porque mi padre no tenía mucho ánimo de enseñar. Así que a pesar con dolor, porque él creía que la sangre, la letra con sangre entra. O sea, eran otros tiempos muy difíciles. ¿verdad? En que la gente o los padres no tenían del todo esa preparación que hoy día o conocimiento que tenemos. Pero ya existían las matemáticas. Ya existían la suma o la resta en una manera u otra. Y lo que quiere decir el apóstol aquí, o perdón, el escritor de Judas, es que la misericordia, la paz y este amor de Dios que le acabo de explicar, le sean a ustedes multiplicados. no sumados, sino multiplicados. Y el creyente conforme pasan los años, si pasa la fe, se da cuenta que Dios jamás resta, ni siquiera suma, multiplica. Y pudiéramos hablar de multiplicación o a lo mejor exponencialmente, pero vamos a quedarnos con algo simple que tú y yo entendemos, la multiplicación. Vamos a cantar Brinca la Tablita, ella la brinqué. ¿verdad? porque 2 y 2 o 2 más 2 son 4 pero nota que 2 por 2 también es 4 pero eso cambia cuando los números van avanzando porque 3 más 3 es 9 pero 3 por 3 es 9 así que tenemos que la ley sí sigue cuando multiplicas un número pero comienza a multiplicarse no es lo mismo una suma que una multiplicación y lo mismo encontramos cuando decimos 8 por 8 más 8 16 y 8 por 8 64 y comienzas a recordar la tabla de multiplicación que te la aprendiste de memoria pero ahora cuando multiplicamos 16 por 16 todo nos quedamos medio raro a menos que como yo te diga 256 pero es porque lo tengo anotado y si te digo 17 por 17 ahí también me pierdes pero te voy a decir 285 porque también lo tengo anotado pero es más fácil para todos 20 por 20 porque es 400 Cada vez que es un número así, cero, fácil. ¿Verdad? ¿Y si les digo 30 por 30? 900, ¿verdad? 900, claro, le añade los ceros. Y por eso es que 19 por 19 es 361, es menos que 400. porque veinte por veinte es cuatrocientos pero diecinueve por diecinueve no puede ser más que veinte por veinte entonces vemos cómo se van añadiendo así que tú a través de la vida sin importar cuando uno analiza pensando no solo en este mensaje sino en la palabra es en el hecho de que a través de los años tus momentos amargos, tus momentos de dolor, de llanto, de sufrimiento nuestros momentos que todos pasamos como seres humanos, en realidad son pocos. Nunca se multiplica. Lo que se multiplica son las bendiciones de Dios cuando tú lo mires. Hay muchas cosas que nos pueden descorazonar, desesperanzar, pero nunca las bendiciones de Dios cuando tú eres creyente. En nuestra común salvación, en que tú y yo vivimos y participamos, realmente tú lo miras. Gracias Dios, porque tus bendiciones se han multiplicado en mi vida. Hemos pasado por ciertas ondonadas, ciertos valles de miseria o de muerte, me imagino este año pasado y comienzo de este año para muchas personas realmente ha sido muy duro y difícil. Le escribí a un amigo que en verdad la muerte como ha tocado a mucha gente y muy de cerca a nosotros a veces los creyentes lo vemos sobre todo en nuestros países que emocionalmente bueno ya se murió, está con el señor, está con el señor, sí, pero es una herida emocional para nosotros es el aguijón que todavía está allí Hay muchas cosas sin responder que ocurren de verdad que tratan de desanimar al creyente y que muchas veces uno se ve impotente porque no sabe qué hacer si un padre, una madre, un hijo se enferma o me imagino la angustia viendo un poco del reportaje de lo que ha ocurrido aquí en la playa. Cuando el uno de los voceros estaba diciendo bueno hemos comenzado a encontrar restos no cuerpos sino restos y vamos a necesitar el DNA de alguno pues uno oyó un lamento ahí de la gente porque quiere decir que de lo que están esperando ya saben si encuentran restos es porque alguno ha fallecido entonces no son noticias agradables no importa si tu hermano, tu hermana, tu padre, tu madre La gente es creyente. Todavía los queremos aquí. Queremos prepararnos con un tiempo en cuanto a eso. Creemos que somos útiles aquí en la tierra. Aunque estaremos en estrecho. Pero ciertamente el Señor nos manda a nosotros. Que ese es un ahijón. La muerte nos toca y nos golpea en ciertas maneras. Pero las bendiciones de Dios se multiplican. Porque anhelamos el cielo. Anhelamos que el Señor venga. Anhelamos ver a nuestros seres queridos, que nos vemos ahora presencialmente. Y algunos de ellos no es que tengan relación a la carne, pero a nuestros seres queridos que son nuestra común fe. ¿No le agradaría a usted conocer a los apóstolos? Verlos, conversar con ellos, aunque ya muchas preguntas no estarán, simplemente pensamos de este lado material. Pero ellos fueron vencedores en la fe, como nosotros somos vencedores. Batallaron en la fe. Y querido hermano, eso es lo que es luchar, contender, batallar. No hay mejor manera que vivir la vida cristiana viviéndola, batallándola. Y siempre digo este dicho en buen sentido que aprendí aquí de los cubanos. ¿Cómo andas? ¿Cómo estás? En la lucha. Puerto Ricanos, los caribeños, todo el mundo dice en la lucha. No hay ninguno de ustedes que viva que no tenga una lucha. Y no me refiero a personas, sino que todos luchamos en la vida. Lo que pasa es que el impío no quiere tener luchas. Él piensa que todo debe ir de maravilla, que nada malo debe ocurrir. Pero ¿no se te ha roto un vaso? ¿No te has levantado un día en que todo sale al revés? Por más que te esfuerces y te frustres. Entonces recuerda que tú te levantas pensando ser la voluntad de Dios, pero nos molesta a veces que algunas cosas nos incomodan. O te levantas, te vas del lado, te caes, algo ocurre. Es este mundo que vivimos. Es una lucha. Pero la lucha del creyente es distinta. Nuestra lucha es con un propósito eterno. Nuestra lucha tiene una razón de ser, es la manera como nosotros vivimos. El impío puede llorar su desesperanza, puede tener desaliento y no tiene esperanza del futuro. El creyente se alienta confiando de que el futuro siempre será mejor. Por lo tanto, cuando nosotros vemos este saludo, cuando Judas escribe, no hay mejor manera de vivir la fe que seguir en la lucha, la roca firme del cristianismo. Este fe y este cuerpo de doctrina que nosotros creemos que es nuestra común salvación y en la cual hemos creído una vez y para siempre. Si hay algo nuevo, no es verdad. Y si es verdad, no es nuevo. Escríbalo. No es mío, por algún lugar lo habré leído. No es algo de una reflexión personal, individual. Es algo que todo creyente entiende. Si algo es nuevo, no es verdad, porque todo en el cristianismo tiene dos mil años, es viejo. Hemos crecido, nos hemos adaptado en muchas cosas, pero no hay nada nuevo que descubrir, que inventar. no hay sueños, no hay realidades, no hay visiones en ese aspecto porque la verdad de Dios ya está completada. Así que esta fe que nos ha sido dada una vez a los santos es que hay un solo camino a Dios en salvación. Noten conmigo Juan capítulo 3 versículo 34. Juan ¿Por qué es importante entender esto? Porque hay muchas personas que pueden decir en su mal ecumenismo de que hay muchos caminos para llegar a Dios. Pero Juan en el Evangelio según San Juan capítulo 3 el versículo 34 nos dice, porque aquel a quien Dios ha enviado habla las palabras de Dios. Porque aquel a quien Dios ha enviado habla las palabras de Dios, pues Él da el Espíritu sin medida. O sea que lo que entiendes de la palabra de Dios es porque el Espíritu de Dios te lo muestra. Cristo es el único camino de salvación y no podemos dejarnos de mover por ahí. Y es fácil para el creyente en su común salvación cuando alguien dice, no, no, pero hay otro camino. Como él no va a escuchar a su mamá. Dice, el padre ama al hijo y ha entregado todas las cosas en su mano. El que cree en el hijo tiene vida eterna. Pero el que no obedece al hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios permanece sobre él. No dice, si tú no oyes a fulano o a fulana o a sultana o a perenseja o a perensejo, no puedes tampoco entrar al cielo, ¿no? Es el hijo. El padre ama al hijo y ha entregado todas las cosas en sus manos. El que cree en el hijo tiene vida eterna, pero el que no obedece al hijo no verá la vida. Así que este es el único camino de salvación, lo primero que entendemos que entender en nuestra común salvación. Si hay alguien que puede hablar de otro camino, entonces está muy mal, está en un desvío. Los creyentes, no importa el idioma que hablemos, no importa el lugar en que hayamos nacido, los creyentes alrededor del mundo, creemos que Jesucristo es el camino, la verdad y la vida, que nadie viene al Padre sino por Él. y desechamos de nuestra mente o cualquier otra religión que quiera movernos de esa verdad. Miremos por ejemplo la roca firme como el apóstol Pablo ahora sí en una epístola paulina le habla, en primer lugar vamos a ir a primeras tesalonicenses, una de sus primeras epístolas, y cómo los tesalonicenses que tenían una cultura griega y que tenía muchos ídolos. Él les dice así, quizá el pasaje es un poquito largo pero vamos a leerlo. Primera a los tesalonicenses, la primera epístola de Pablo a los tesalonicenses en el capítulo 1. en el versículo 2. Siempre damos gracias a Dios por todos ustedes, mencionándolos en nuestras oraciones, teniendo presente sin cesar delante de nuestro Dios y Padre su obra de fe, su trabajo de amor y la firmeza de su esperanza en nuestro Señor Jesucristo. Lo que quiero que hagan el énfasis y la correlación es la fe, nuestra común fe. Por eso dice, y padre, su obra de fe, como Dios es el que ha obrado esa fe en nosotros. Sabemos, hermanos amados de Dios, de la elección de ustedes, porque en nuestro evangelio no vino a ustedes solamente en palabras, sino también en poder y en el Espíritu Santo y con plena convicción. como saben qué clase de persona demostramos ser entre ustedes por el amor que les tenemos. Y ustedes llegaron a ser imitadores de nosotros y del Señor, habiendo recibido la Palabra en medio de mucha tribulación, con el gozo del Espíritu Santo, de tal manera que llegaron a ser un ejemplo para todos los creyentes en Macedonia y en Acaia, Porque saliendo de ustedes, la palabra del Señor se ha escuchado no sólo en Macedonia y Acaia, sino que también por todas partes la fe de ustedes en Dios se ha divulgado, de modo que nosotros no tenemos necesidad de decir nada, pues ellos mismos cuentan acerca de nosotros, de la acogida que tuvimos por parte de ustedes y de cómo se convirtieron de los ídolos a Dios para servir al Dios vivo y verdadero. y esperar de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de entre los muertos, es decir, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera. Fe, palabra, palabra, fe. Y como dejas tú de servir a los ídolos o a cualquier otra cosa que impida, como hemos leído en el boletín, se nos leyó en el boletín, como dejamos toda aquella cosa que no nos ayuda en nuestra creencia, en fijar nuestros ojos, en adorar a Dios, en espíritu y en verdad. Y a eso es lo que Judas nos anima, a contender por esta fe. Noten en Romanos capítulo 6 ahora. No quiero dejar de leerles todos estos pasajes. ¿Qué es lo que hace cuando tú lees la Escritura? Hoy es la predicación en Romanos, el capítulo 6, el versículo 17. Pablo pasa aquí a aspectos prácticos que deben hacer los hermanos. Dice, pero gracias a Dios, que aunque ustedes eran esclavos del pecado, vivían sin Dios, sin esperanza en el mundo, eran seguidores de cualquier otra religión, se hicieron obedientes de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fueron entregados. Ahora tú, como creyente, eres entregado a esta forma de doctrina, O sea, tenemos una manera de vivir, practicamos la doctrina de Dios. Y doctrina no es otra cosa más que enseñanza. O sea, nota, en el tiempo moderno, el cristiano piensa, y qué lamentable, porque eso es algo que es una falla de las iglesias, es que tú ya eres salvo y quieres seguir viviendo tu vida. Por ejemplo, puede ser que en tu país cualquier otra cosa todavía no te mudabas, todavía no hacías, y no ibas a la iglesia constantemente, no vivías ese cristianismo. Tenías varios defectos en tu vida y hay mucha gente que el mayor problema que tiene es que crece torcido. No entiende del todo esta doctrina, pero mira lo que Dios dice. Tú fuiste instruido, has sido entregado a esta doctrina. Y el creyente se queja cuando no recibe esta doctrina. El verdadero creyente. Porque tiene que tener pasos de multiplicación. Amén? O sea, vas creciendo en la fe. Para eso tienes que obedecer la doctrina. Una y otra vez. Y 1 Corintios 11, versículo 2. El pasaje que leímos de la cena. Vamos a leer del versículo 1. Y cuando Pablo dice en 1 Corintios 11, verso 1, 100 imitadores de mí, como también yo lo soy de Cristo, se refiere a cómo él guarda la fe. Ahora, el hispano por general es copión, es imitador, pero a veces no es imitador de sí mismo, a veces imita las doctrinas de otra gente. Pero aquí esta imitación es con algo que es original de Dios. es su doctrina para que tú la vivas, tú la practiques. Dice, los alabo porque en todos se acuerdan de mí y guardan las tradiciones con firmeza, tal como yo se las entregué. O sea que el apóstol está diciendo, y esto fue lo que yo les enseñé, ¿Cuál es la mayor alegría de cualquier maestro o pastor? Es lo que te enseñamos, de acuerdo a cómo tú vienes, de acuerdo a cómo te vemos vivir. Hay mucha gente que en este país, como en cualquier otro lugar, tú puedes oír a buenos pastores o buenos, voy a decir, predicadores y oradores. Y tú puedes entender la verdad, pero cuán difícil es aplicarla a tu vida, porque ellos están apuntando en algo general. nunca en el sentido de que, y perdonen mi sonrisa, pero no he de sacar ironía si soy yo en ese aspecto, nunca en que muchas veces mi enseñanza no es para remarcar tus debilidades, sino es por lo que te falta, por lo que nos falta a nosotros edificarnos y creer. Por eso fracasarán o no irán a bien aquellos que desprecian una enseñanza que muchas veces es personalizada. Personalizada no con la intención, otra vez, de herirte o faltar a tu orgullo, sino porque es lo que Dios te manda. Es por lo que Dios nos enseña. ¿Por qué queremos traer esta escuela, las diferentes escuelas de escatología? Porque ustedes mismos me lo dicen. Porque quisieran ver el otro lado. Y no es que el pastor siempre tiene que enseñar lo que tú quieres o lo que te falta, sino es en relación a realmente cómo la respuesta a la predicación y la enseñanza va. Entonces, no es más que mi intención en cualquier otro mensaje, porque los conozco, los entiendo, esta es la relación del binomio pastoral de las personas, de la gente, en el hecho de cómo nos conocemos como congregación. Y por eso tenemos que contender por la fe. Luchar por la fe es también depender de esa misma fe como una ayuda espiritual. O sea, es que todo esto que decimos es para que te ayude porque no sé lo que te vas a enfrentar. No sé lo que Dios va a traer a tu vida, no lo puedo imaginar. Por eso cuando hablo de un común denominador, no solo de salvación, es de la vida que nosotros tenemos, es pelear con ese enemigo común que tenemos de la infidelidad, es seguir constante sin distraerse, es una vida abnegada para superar obstáculos, es evitar peligros y, ¿por qué no?, hasta aceptar la muerte por causa de nuestra fe. Mientras tanto seguimos en la propagación del Evangelio. y puedo recordar muchos instantes y anécdotas cuando traigo a veces mensajes me recuerdo cuando falleció mi padre le traje varios mensajes sin saber que muy poco algunas personas iban a perder sus padres con jóvenes padres jóvenes con hijos todavía jóvenes porque a veces personas mayores ya entendemos le toca su tiempo Pero yo considero que, por ejemplo, la muerte de mi papá fue un hombre joven relativamente, porque él tenía 53 años. Cuando veo que yo ya he vivido mucho más que eso, tampoco exageren, no lo multipliquen. La vida nos toca de diferentes formas, de diferentes maneras. Muchas pueden ser parecidas, Hay muchos retos que el Señor nos lanza delante de nosotros, pero nuestra común fe, nuestra común batalla debe ser continua y constante, sin importar qué. Amén? Para ayudarlos a crecer. Amados, edifíquense en nuestra común fe. Seguiremos más adelante. Mientras tanto, batallemos por esta fe, crezcamos en esta fe y propaguemos este mensaje de fe a los que no le conocen para identificar a estos hombres impíos. Gracias por esta común salvación. Gracias Señor por la obra de fe que has puesto en nosotros, porque el entendimiento que tenemos es común, vamos creciendo en esta sabiduría espiritual a base de retos, dolores, sufrimientos, pero qué bueno que nos luchamos juntos, tenemos un ejército, tenemos soldados de Jesús, soldados de Jesucristo que han vivido no sólo antes, sino en el presente, y siguen adelante, siguen fieles. Señor, que tengamos este mismo empeño del escritor, de Judas, tu hijo amado, como nosotros que somos tus hijos, amado, que podamos ver esta misma solicitud en otros de crecer, de batallar, de luchar, de seguir hasta el fin, superando toda clase de obstáculos. Y si nos toca sufrir o ser martirizado por nuestra fe, tú nos darás también el valor y el coraje. Bendice a tu pueblo, en el nombre de Jesús.
La necesidad de contender por la fe
-Autor.
-Consideraciones generales: semejanzas, propósito, apóstatas.
-Saludos: Triadas, multiplicados.
Sermon ID | 62821329287378 |
Duration | 1:00:59 |
Date | |
Category | Sunday Service |
Bible Text | 1 Thessalonians 1:2-10; Jude 1-2 |
Language | Spanish |
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