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Abramos la palabra de Dios en el evangelio según Juan capítulo 17 del 15 al 19. Dice así la palabra de Dios. No ruego que los quites del mundo sino que los guardes del mal. No son del mundo como tampoco yo soy del mundo. Santificalos en tu verdad, tu palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo. Por ellos yo me santifico a mí mismo para que también ellos sean santificados en la verdad. Hay un poco de feedback, por favor. El propósito de este sermón es que tú y yo podamos entender que en la santificación Dios usa medio o medios para nuestro crecimiento y madurez espiritual. Tenemos ejemplos en las escrituras que Dios puede tanto obrar directamente para sanar a una persona como el caso del leproso. Vino un leproso delante de él y le dijo al Señor, Señor si quieres puedes limpiarme y el Señor dijo quiero se limpio y al instante fue limpiado de su lepra. Pero tenemos también un caso donde el Señor usa lodo para sanar a un ciego. Le untó con su saliva mezclada de lodo en el ojo, la puso en el ojo del ciego y el ciego recibió la vista. Así que Dios suele usar muchas veces distintas maneras para obrar. Y en el día de hoy quiero hablarles de esas maneras o de esas formas que Dios usa para obrar. Por eso he puesto como título a este sermón, Medios diseñados por Dios para nuestra santificación. medios diseñados por Dios para nuestra santificación. En el día de hoy vamos a estar compartiendo cuáles son esos medios que Dios usa para santificarnos. Porque dice Jesucristo en su oración, santifícalos en tu palabra, tu palabra es verdad. Así que el propósito de Dios es que todo creyente sea santificado. Esta exposición va a estar dividida en dos grandes partes. Primero vamos a estar hablando de los medios corporativos de la santificación, nuestra unión con Cristo y la Iglesia. Y en segundo lugar, vamos a estar hablando acerca de los medios individuales para nuestra santificación como lo son la lectura de la palabra de Dios, la oración, el ayuno, la comunión y la mortificación del pecado. Pasemos a nuestro primer encabezado, medios corporativos para la santificación. La vida cristiana no se vive en solitario. Nadie se hace cristiano o se convierte a la fe del cristianismo y se propone vivir aislado del resto de otros creyentes. Así que la vida cristiana es una expresión de nuestra relación en primer lugar con Cristo. Y de eso vamos a estar hablando aquí que es muy importante. Nuestra unión primero con Cristo y luego con la Iglesia del Señor. Y queremos demostrar esto desde la perspectiva bíblica. Nuestra unión con Cristo. Todo verdadero creyente cuando cree en Cristo queda automáticamente unido a Cristo. En Juan 15 dice Cristo, yo soy la vi verdadera y mi padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto lo quitará y todo aquel que lleva fruto lo limpiará para que lleve más fruto. Así como las ramas están unidas a su árbol Nosotros los creyentes estamos unidos a Cristo porque somos las ramas de ese árbol que es Cristo. Así que Cristo está diciendo que aquí es el árbol. Las ramas no se alimentan solas. Ellas necesitan estar relacionadas con su árbol. En este caso, nuestra vida como rama depende de Cristo para conservar vida, la vida espiritual. Si queremos tener vida y dar frutos abundantes, no lo podemos lograr sin Cristo. En Juan 15, del 5 al 6, dice el Señor, yo soy la vid, vosotros los pámpanos, el que permanece en mí y yo en él, éste lleva mucho fruto, porque separados de mí nada podéis hacer. yo en ellos y tú en mí para que sean perfectos en unidad para que el mundo conozca que tú me enviaste y que los has amado a ellos como también a mí me has amado así que estar unido con cristo es estar unidos con la iglesia y manifestar la unidad que hay entre el padre y el hijo Así que todos tenemos que estar juntos pero tenemos que estar en armonía, en unidad. Cuando alguien está unido a Cristo es automáticamente unido a su cuerpo y su cuerpo está compuesto por muchos miembros y ese cuerpo como un todo es la iglesia del Señor. En primera de Corintios 12 Pablo expresa que los miembros del cuerpo son muchos, pero todos pertenecen a un solo cuerpo. De igual manera, todos los creyentes en Cristo somos muchos, pero todos pertenecemos a un solo cuerpo y ese cuerpo es la iglesia. mira lo que dice Pablo así como el cuerpo es uno y dice y tiene muchos miembros pero todos los miembros del cuerpo siendo muchos son un solo cuerpo así también Cristo porque por un solo espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo que es la iglesia tanto judíos como griegos tanto esclavos como libres y a todos se nos dio a beber de un mismo espíritu Además, el cuerpo no es un solo miembro, sino muchos. Si dijera el pie, como no soy mano, no soy del cuerpo, por eso no sería del cuerpo. Y si dijera la oreja, porque no soy ojo, no soy del cuerpo, Por eso no sería del cuerpo. Pablo está corroborando y está enseñando que nadie es suficiente sin la administración, sin el servicio, sin la labor de otro miembro de la iglesia local. Los miembros todos interactúan entre sí porque se necesitan. La mano no puede decir que no necesita del ojo. Los pies no pueden pensar que no necesitan de la oreja. Todos nos necesitamos. Por eso Pablo tiene que decir, de manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan. ¿Cómo puede dolerse un cuerpo de un miembro que no conoce o no reconoce? Si me duele la mano, todos los miembros de mi cuerpo sienten el dolor de mi mano. Así está supuesto sentir todo creyente, todo cristiano, cuando un hermano está enfermo o está triste o está afligido. La tristeza de mi hermano debe producir en mi tristeza. Pero también el gozo de mi hermano, la alegría de mi hermano debe producir en mi alegría Nunca envidia porque él es mi hermano Todos pertenecemos a un solo cuerpo que es la iglesia Tan pronto tú y yo nos convertimos a Cristo Nos unimos a su pueblo y ese pueblo es la iglesia del Señor En Hechos capítulo 2 del 37 al 42 Pedro está en su discurso predicando el evangelio y la audiencia que escuchaba fue redarguida. La audiencia que escuchaba la palabra de Dios recibió esa palabra con gozo, con alegría pero produjo en ellos arrepentimiento y dice la escritura Lucas contando este incidente en Hechos capítulo 2 del 37 en adelante al oír esto esa audiencia La gente que estaba allí, todos se compungieron de corazón y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles, hermanos, ¿qué haremos? Pedro les dijo, arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados. y recibiréis el don del Espíritu Santo porque para vosotros es la promesa y para vuestros hijos y para todos los que están lejos para cuantos el Señor nuestro Dios llame y con otras muchas palabras testificaba y los exhortaba diciendo sed salvos de esta perversa generación así que los que recibieron su palabra fueron bautizados y se añadieron aquel día como tres mil personas y perseveraban en la doctrina de los apóstoles en la comunión unos con otros en el partimiento del pan y en las oraciones se añadieron ¿a qué? Se añadieron a la iglesia del Señor, a la iglesia visible de Jesucristo. Por eso Lucas cuenta cómo era la vida de los primeros cristianos. Cuando dice que perseveraban. No da la idea de que los creyentes se separaban unos de otros, vivían distante unos del otro. Ellos tenían sus devociones personales, pero también tenían sus devociones colectivas, porque dice la escritura que estudiaban la doctrina de los apóstoles, oraban juntos, tenían comunión unos con otros y compartían el pan. A eso es a lo que nos referimos que cuando una persona se convierte a Cristo también pasa a ser parte de la iglesia visible de Cristo. Pasa a tener compañía como compañía a otros hermanos con los cuales él interactúa tiene convivencia espiritual y física. Así que los medios corporativos de santificación que encontramos dentro de la Iglesia de Dios nos sirven para crecer en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo y en la santificación. Dice Hechos capítulo 2, versículo 44, que todos los que habían creído estaban juntos y tenían en común todas las cosas, vendían sus propiedades y sus bienes y los repartían a todos según la necesidad de cada uno. perseveraban unánimes cada día en el templo y partiendo el pan en las casas comían juntos con alegría y sencillez de corazón alabando a Dios y teniendo favor con todo el pueblo y el Señor añadía a su iglesia los que habían de ser salvos encontramos también en Hechos 4 versículo 32 que la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma, ninguno decía ser suyo propio, nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común. Así que Pablo ilustra la unión corporativa aquí en todos estos pasajes bíblicos para que nosotros nos demos cuenta de la verdad la realidad de pertenecer a una iglesia local de creyentes. No solo Pablo lo ilustra contándonos acerca de la interacción de cada miembro en 1 Corintios capítulo 12. sino también Pablo da su testimonio personal. Cuando Pablo se convierte a la fe del cristianismo, se unió a la iglesia del Señor, se unió a otros creyentes. Jesucristo lo puso en contacto con otros creyentes. Por ejemplo, le dijo a Ananías, ve a tal lugar donde está un tal Saulo y ora por él para que reciba la vista. Y cuando va a Ananías y ora por Saulo, Saulo recibe la vista y recibe la encomienda de parte de Dios sobre lo que él debía hacer. Dios le dijo a Ananía que orara por Pablo para que recibiera la vista y le dijera lo que él tenía que hacer. Pablo tenía que aprender muchas lecciones. Él no podía ser un cristiano a su manera, viviendo a su forma, porque ahora de convertido tenía que comulgar con la iglesia de Dios. No podía vivir en solitario. Él necesitaba del resto de sus hermanos en la fe. Y esto nos dice que todos Sin excepción, necesitamos de todos, aprendemos de todos. Eso es lo que Pablo nos enseña en su palabra, en la palabra de Dios. En la Biblia encontramos expresiones como esta, cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros. En la iglesia local, Dios usa a cada hermano con sus virtudes y con sus dones para edificar a la iglesia del Señor. Cada uno tiene el deber de compartir su don, de compartir la gracia que ha recibido con otro creyente. Por esa razón Pablo no desarrolló su ministerio solo, sino en compañía de otros hermanos que estaban con él. Y mira lo que dice Hechos capítulo 20, versículo 34. Antes bien, vosotros sabéis que para lo que me ha sido necesario a mí y a los que están conmigo, estas manos me han servido. Pablo trabajaba para mantenerse él y para también ayudar a los hermanos que estaban con él predicando el Evangelio. Por eso encontramos expresiones como estas en 2 Corintios capítulo 12 versículo 15 y yo con el mayor placer gastaré lo mío dice Pablo. yo con todo el placer gastaré lo mío y aún yo mismo me gastaré aunque amando más yo sea amado menos Pablo está diciendo es probable que yo no reciba de regreso el amor con que yo amo a mis hermanos pero estoy dispuesto a amarlos estoy dispuesto a suplir sus necesidades estoy dispuesto a ayudarlos y yo con el mayor placer gastaré lo mío y aún yo mismo me gastaré del todo por amor de vuestras almas aunque amandos más, dice Pablo, sea amado menos. Otra escritura nos testifica en Hechos 11, 24 acerca de Bernabé, compañero de Pablo, que era un varón bueno, lleno del Espíritu Santo y de fe, y una gran multitud fue agregada al Señor. Otras escrituras nos dicen fueron agregados o añadidos a la iglesia, pero esta escritura no está diciendo que fueron agregados al Señor. Mi hermano, es lo mismo. Es lo mismo ser agregado al Señor que ser agregado a la iglesia porque Cristo no está separado de su iglesia. Cristo es la cabeza de la iglesia. La iglesia es su cuerpo. Así que es lo mismo decir que estamos unidos a la iglesia que estar unidos a Cristo. Ahora somos parte de un cuerpo, de un edificio, de una familia y por eso no podemos pretender desarrollarnos en nuestra santificación personal aparte de este cuerpo. Es necesaria la interacción unos con otros. Yo necesito de ti, tú necesitas de mí Porque los dones que Dios ha dado a su iglesia Es para edificar a su iglesia Para santificar a su iglesia En el contexto de una iglesia local Dentro de una iglesia local De ello nos habla 1 Corintios 12 13 y 14, tres capítulos que nos hablan acerca de los dones que deben ser comunicados entre los hermanos. Estos dones son dados para la edificación del pueblo de Dios y en el contexto de una iglesia que está funcionando, que está viva. Vayamos a Efesios capítulo 4, los versículos del 7 al 16. dice la escritura pero a cada uno de nosotros fue dada la gracia conforme a la medida del don de cristo por lo cual dice subiendo a lo alto llevó cautiva la cautividad y dio dones a los hombres y eso de que subió que es sino que también había descendido primero las partes más bajas de la tierra El que descendió es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo. Y el mismo constituyó a unos apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, a otros pastores y maestro. ¿Con qué propósito? ¿Cuál era la finalidad? Con el propósito de perfeccionar en santidad a la iglesia del Señor. versículo 12 a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio para la edificación del cuerpo de cristo acá hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del hijo de dios al hombre perfecto a la medida de la estatura de la plenitud de cristo así que ya No seremos niños fluctuantes, llevados por loquiera de todo viento de doctrina, por estratagemas de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo aquel que es la cabeza, esto es Cristo. de quien todo el cuerpo que es la iglesia bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente según la actividad propia de cada miembro recibe su crecimiento para ir edificándose en amor. ¿Para qué Cristo ha repartido dones en su iglesia? para el perfeccionamiento de la iglesia, de la iglesia misma. Esos dones son necesarios en el proceso de nuestra santificación. Nadie puede crecer solo. Nadie puede crecer espiritualmente solo. Eso es algo que Dios ya ha diseñado para su cuerpo, para su iglesia. El crecimiento espiritual se produce en el contexto de una iglesia. Cada crecimiento que exista en nuestra vida se debe a la interacción de unos con otros. El crecimiento de cada miembro se produce cuando cada miembro pone sus dones en función para servir a los demás miembros. Todo cuerpo Todo el cuerpo, dice Pablo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente según la actividad propia de cada miembro recibe su crecimiento para ir edificándose en amor. Lo que está diciendo el texto que cada uno tiene una actividad propia que realizar y esa actividad tiene que ver con su don tiene que ver con su llamado, con su vocación dice también Pablo cada uno tiene su actividad propia pero cada uno debe ayudar a su compañero porque la ayuda es mutua deben ayudarse mutuamente para recibir su crecimiento e ir edificándose en amor Nadie puede crecer bíblicamente en santidad viviendo una vida solitaria. Porque Dios ha creado su iglesia precisamente para ayudar a los creyentes a crecer espiritualmente en la santificación. Por eso nadie puede bíblicamente crecer en santidad si es indiferente a la iglesia, a los demás miembros de la iglesia. Así que todo creyente debe comprometerse con la membresía de una iglesia local, con todo lo que eso va a implicar, porque va a implicar que nosotros no nos concentremos tan solo en nosotros, sino también que empecemos a concentrarnos en las otras personas que pertenecen al mismo cuerpo. Yo no voy a estar interesado tan solo en mi crecimiento personal, sino también en el crecimiento de otros hermanos a los cuales yo le comunico el don que Dios me ha dado. Así que implica estar dispuesto a poner al servicio de otros creyentes nuestros dones. Va a implicar estar dispuesto a contribuir tanto espiritual o económicamente con aquellos que forman parte de la obra de Dios. La iglesia, como hemos dicho en otras ocasiones, son los que son sus miembros. Si la Iglesia es dadivosa, si los miembros son dadivosos, la Iglesia es dadivosa. Así que es importante que nosotros comprendamos que esto implica el pertenecer a la Iglesia de Dios, implica una actividad personal y colectiva. Significa también estar dispuestos a someternos a las normas y disciplinas de la iglesia la iglesia tiene sus normas tiene sus disciplinas tiene su código de vestuario tiene sus instrucciones para los que son miembros para que puedan dar testimonio de la fe en todo lugar como dice la escritura así alumbre vuestra luz delante de los hombres para que vean vuestras obras buenas y glorifiquen a vuestro padre que está en los cielos La iglesia debe testificar tanto dentro de ella como fuera de ella acerca de Cristo. Y por eso tenemos normas y tenemos disciplinas por las cuales nos guiamos que tienen respaldo bíblico para vivir una vida cristiana saludable. Pero también tenemos que estar dispuestos a asistir a cada culto y a todos los eventos y servicios que la iglesia Tiene, la iglesia tiene servicios, tiene actividades y los miembros de ellas voluntariamente se involucran para participar con sus dones y talentos y virtudes. Si no estamos dispuestos a comprometernos con los creyentes de la iglesia, a sufrir con ellos, a padecer con ellos, a gozarnos con ellos, no se puede cumplir lo que Cristo dice en su palabra. Porque la palabra de Dios dice que somos santificados en la medida en que la palabra de Dios es predicada, es enseñada, es exhortada y aquí en la iglesia, en este contexto, la palabra de Dios cada semana es enseñada para nuestro crecimiento espiritual. Así que para crecer en la santificación nosotros debemos negarnos a nosotros mismos para vivir para Dios y para vivir para otros hermanos en la fe que necesitan de nuestro don. Nadie puede demostrar que está interesado en la santificación de otros si manifiesta indiferencia hacia las necesidades de otros. Así que es importante que nosotros entendamos que somos llamados a amarnos unos a otros, a vivir en unidad. y colaborar unos con otros en el crecimiento espiritual según los dones que Dios nos ha dado. Ya hemos visto que estar unidos a Cristo significa también estar unidos con la Iglesia, comprometidos con la Iglesia, comprometidos con nuestras actividades, comprometidos a estar presentes para ayudar en todo lo que sea necesario. Pero también existen otros medios que debemos usar para nuestra santificación que son medios individuales medios individuales para la santificación el primer medio es la palabra de Dios la lectura de la palabra de Dios debemos leer la palabra de Dios porque que dice la palabra en segundo de timoteo 3 del 16 al 17 dice toda la escritura es inspirada por dios y útil para enseñar para redarguir para corregir para instruir en justicia a fin de que el hombre de dios sea perfecto enteramente preparado para toda buena obra pablo nos está diciendo que si queremos estar preparados para toda buena obra debemos leer la palabra de dios que nos enseña que nos reprende que nos corrige y que nos instruye en el camino de justicia en el salmo 19 del 7 al 11 dice David, que la palabra de Dios restaura el alma, hace sabio al simple, hace que se alegre el corazón, ilumina los ojos y nos advierte tocante a participar de aquello que a Dios no le agrada. Así que la palabra de Dios es útil para darnos prosperidad y para ayudarnos a crecer en nuestra santificación. Si encontramos, si leemos en la palabra en el Salmo 1 del 1 al 3 dice Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado, sino que en la ley de Kiobá está su delicia, y en su ley medita de día y de noche, será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto a su tiempo, y su hoja no cae, y todo lo que hace prosperará. Como creyentes, como cristianos Si queremos crecer en la santificación Debemos leer la palabra de Dios Debemos meditar día y noche En esa palabra Como le dijo Dios a Josué En el versículo 8 de su primer capítulo Nunca se apartará de tu boca Este libro de la ley la palabra de Dios sino que de día y de noche meditarás en él para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito porque entonces harás prosperar tu camino y todo te saldrá bien queremos ser prosperados queremos que todo nos salga bien bueno dice la escritura que debemos meditar en ella porque nuestra prosperidad y nuestro crecimiento espiritual se debe a la diligencia con que nosotros leemos la palabra de dios dice cristo en juan 15 versículo 3 Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado. La palabra de Dios nos limpia. La palabra de Cristo purifica el corazón. Lo hace apto para toda buena obra. Ustedes saben por qué muchas veces cometemos pecados. Erramos porque dice Cristo que estamos ignorando las escrituras. Erráis porque ignoráis las escrituras. En el Antiguo Testamento a uno de los profetas le dice el Señor, mi pueblo fue destruido porque le faltó conocimiento. Así que a través de la lectura de la Palabra de Dios adquirimos el conocimiento necesario para vivir una vida en santificación y en crecimiento espiritual. Pero hay otro medio que debemos usar que es la oración. 1 Tessalonicenses 5, 17 dice, orad sin cesar. Marcos 14 del versículo 18 dice también velad y orad para que no entréis en tentación el espíritu a la verdad está dispuesto pero la carne es débil debemos orar como cristianos cultivar la oración personal Efesios 6 18 dice que este hábito debe ser constante orar en todo tiempo con toda oración y súplica en el espíritu y velar en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos segunda de crónicas versículo 14 del capítulo 7 dice si se humillar en mi pueblo sobre el cual mi nombre es invocado y orar en y buscar en mi rostro y se convirtieron de sus malos caminos entonces yo oiré desde los cielos y perdonaré sus pecados y sanaré su tierra la oración es para reconocer la soberanía de Dios porque sabemos esta confianza tenemos que si pedimos alguna cosa conforme a la voluntad de Dios, el nos la concede es decir que cuando oramos estamos depositando toda nuestra confianza en el Señor sabiendo que el quiere lo mejor para nosotros y nos acomodamos a su voluntad y el corazón es enmendado, es transformado porque la oración nos ayuda a enmendar los desajustes del corazón Así que también la oración es para dar gracias a Dios por todas las bendiciones que Él nos ha dado para confesar nuestros pecados y pedirle que nos perdone en su gracia y que nos ayude a combatir aquello malo que nos arrastra hacia las cosas que desagradan a Dios. Dice Mateo 6, versículo 6. Pero tú cuando ores, entra a tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu padre que está en los secretos y tu padre que te ve en los secretos te recompensará en público. Tenlo por hecho que cuando tenemos alguna aflicción, alguna prueba, y entramos al cuarto y cerramos la puerta y hablamos con Cristo cara a cara con Dios cara a cara y le pedimos alguna cosa con la certeza de que Él nos está escuchando Él concede nuestras peticiones y cuando Dios no contesta de la manera que nosotros quisiéramos Él está más interesado en nuestro bienestar espiritual que en nuestro bienestar físico. Cuando Él ve que algo nos va a descarriar del camino, que algo no va a construir o contribuir con nuestra edificación y que si Él nos contesta en lugar de acercarnos a Él, nos vamos a apartar de Él, Él no nos concede lo que estamos pidiendo. Pero tenlo por seguro, que Dios nos escucha, claman los justos y Jehová oye dice la escritura y los libra de todos sus temores Dios no defrauda aquellos que en él confían dice Cristo pedir y se os dará, buscar y hallaréis, llamar y se os abrirá lo que tenemos que decirle al Señor dame fe para recibir lo que pido porque muchas veces estamos buscando a Dios pero estamos al mismo tiempo huyendo de Dios puede darse el caso que un creyente esté buscando a Dios pero al mismo tiempo esté huyendo de Dios porque no quiera someterse a su voluntad Y Dios lee la intención con que nosotros le pedimos algo. Nosotros le pedimos para nuestro propio placer, para nuestra propia gloria, pero no queremos comprometernos con Dios. Dios sabe eso y por eso no nos contesta. Porque Dios está más interesado en nuestra santificación que en nuestro propio bienestar. Mi hermano, nadie Va a poder estar con Cristo eternamente Si primero no se santifica Lo dice el santificarlos en tu verdad Tu palabra es verdad y dice la escritura Seguir la paz con todos y la santidad Sin la cual nadie verá al Señor el propósito de Dios al justificarnos y al llamarnos a la fe del cristianismo es santificarnos y nos ha dado medios para poder lograr ese fin que es la lectura de la palabra la oración Cristo priorizó la vida espiritual Priorizó la oración en su vida, dice en Marcos 1, versículo 35, que levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto y allí oraba. Nuestro maestro priorizó su vida espiritual. Que Dios nos ayude a priorizar. nuestra vida espiritual edificar nuestras vidas espirituales y si en este momento estamos siendo seducidos por otras cosas que nos están quitando el tiempo de dios digámosle al señor ayúdame que perezco porque necesito tu ayuda para poder dar atención a mi vida espiritual mira lo que dice juan carlos ray La recaída de un cristiano generalmente comienza con el descuido de la oración privada. La oración privada es tan necesaria y Dios nos está llamando a ello. Pero también hay otro medio de gracia que es el ayuno, el ayuno. Y tenemos la experiencia de Esdras. Esdras tenía un problema muy difícil, pero Dios le ayudó Cuando él se puso en ayuno y oración Dios le guardó, Dios le cuidó Dice Edras capítulo 8 versículo del 21 al 23 Allí junto al río Aba proclamé un ayuno para humillarnos delante de nuestro Dios y solicitar de él un buen viaje para nosotros, para nuestros niños y para todos nuestros bienes. Era un viaje donde habían serpientes venenosas, donde habían personas malas que asaltaban y quitaban las riquezas. Pero dice que él se puso en ayuno para que Dios le guardara a él y a su familia. Pues tuve vergüenza, dice Edra, de pedir al rey tropa y gente de a caballo que nos defendieran del enemigo en el camino, ya que le habíamos dicho al rey la mano de nuestro Dios está para bien sobre todos los que le invocan, pero su poder y su furor contra todos los que lo abandonan. Ayunamos pues y pedimos a nuestro Dios sobre esto y él nos fue propicio. ¿Necesitamos ayunar? Sí, necesitamos ayunar, porque nuestra lucha es espiritual. Hay muchas batallas que estamos librando en el orden espiritual contra nuestros malos pensamientos, malos deseos, también como gente poseída con gente poseída por el diablo que tratan de incitarnos para que practiquemos lo malo necesitamos ayunar para que Dios nos libre de esos enemigos y para que Dios nos libre de nosotros mismos que muchas veces no queremos hacer la voluntad de Dios necesitamos ayunar Porque nuestra lucha no es contra carne ni sangre, sino contra potestades, contra principados, contra gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. Y dice la Escritura, por tanto, tomad toda la armadura de Dios para que podáis resistir en el día malo. Necesitamos ayunar, como dice Cristo en Mateo 17, 21, este género espiritual no sale si no es con oración y ayuno. Pero mira lo que nos dice que cuando nosotros ayunemos, no ayunemos para exhibir nuestra santidad externa, Para que otros vean que ayunamos más o que estamos en una vida de consagración. No, no, no. Él dice, hazlo de manera discreta, que nadie se entere que tú estás ayunando. Para que el glorificado sea Dios, no tú. dice Cristo cuando ayunéis en Mateos 6 del 16 al 18 cuando ayunéis no pongáis cara triste como los hipócritas que desfiguran su rostro para mostrar a los hombres que ayunan de ciertos digo que ya tienen su recompensa pero tú cuando ayunes unje tu cabeza y lava tu rostro para no mostrar a los hombres que ayunas sino a tu padre que está en secreto y tu padre que te ve en lo secreto te recompensará en público gloria a Dios Ya vimos que la importancia de hacer uso de la lectura de la palabra de Dios, la oración, el ayuno, son medios, estos son medios que nos van a ayudar en nuestra santificación y en nuestra comunión con Dios. Pero ahora vamos a terminar con dos medios más individuales. El primero es la comunión Y el último, la mortificación del pecado, la comunión. Es necesario convivir con otros hermanos. Esa es la comunión, dice la escritura. Cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos y en armonía. Porque allí envía Jehová bendición y vida eterna. No, es que allí yo no me siento cómodo. cierto hermano, cierta hermana no compagina conmigo, no se lleva bien conmigo mira mi hermano, Dios te está llamando a la comunión precisamente porque es muy probable que esa actitud tuya se deba a tu carácter y no a la falta de tu hermano y Dios está buscando la manera de reformar, transformar tu carácter hacerte más paciente, más misericordioso, más perdonador Y está usando este medio de gracia para estirpar de ti y de mí lo que no se parece a él. Pero sin lugar a dudas, Dios está obrando y Dios llama a cada miembro a la comunión, a venir al templo, a estar unidos en las casas de los hermanos, confraternizando con ellos. Para poder cultivar los valores cristianos que se nos enseña en la palabra. Así que es necesario convivir con otros hermanos en el templo, venir al culto de adoración y compartir con otros creyentes. Dice Hechos capítulo 2, versículo 46. Perseveraban unánimes cada día en el templo y partiendo el pan en las casas comían juntos con alegría y sencillez de corazón. Mi hermano, no hay mayor placer o no debiera existir otro mejor placer que el invitar a otros hermanos para que vengan a tu casa y coman contigo y compartan la fe y compartan de las cosas del Señor pero principalmente Dios nos está Haciendo entender que la comunión no es opcional, es un mandamiento de Dios. El venir y congregarnos en la iglesia para adorar con otros hermanos es un mandamiento de Dios. Hebreos 10.25 dice, no dejando de que de congregarnos como algunos tienen por costumbre sino exhortando exhortándonos y tanto más cuando veis cuanto veis que aquel día se acerca es muy probable que tú vengas al templo destrozado porque estés viendo en casa algo que desagrada a Dios Y tienes una lucha. Está siendo arrastrado por el mundo. Pero desiste de venir a la casa de Dios y quedarte en tu casa. Esa es la más de las fatales decisiones que tú puedes tomar cuando te sientes mal espiritualmente y te quedas en casa. Porque allí el enemigo seguirá construyendo en tu mente fortalezas. llegará el momento que estarás vencido por el pecado y el corazón endurecido como una piedra porque has dejado de venir a la casa de dios para escuchar la palabra de dios que hace que el corazón sea ablandado por eso dice pablo que debemos exhortar los unos a los otros para que ninguno sea endurecido por el engaño del pecado, la exhortación, la predicación de la palabra, ablanda el corazón, nos hace dóciles, nos transforma, nos regenera, pero si estamos a distancia, fuera de la comunión con otros hermanos, fuera de la oportunidad de escuchar la palabra de Dios para que Dios trabaje en nosotros, Estamos perdiendo la oportunidad de crecer en nuestra santificación, porque el tener comunión con unos con otros no es opcional. Mi hermano, no pierdas la bendición de estar presente en cada culto. Yo sé que las distancias son enormes, yo sé que las inversiones que hay que hacer para venir a la casa de Dios para algunos es una inversión grande pero no hay mayor inversión que nosotros podamos hacer que aquella que hacemos a favor de nuestra propia alma y de nuestra propia familia no hay mayor inversión que esa yo sé que yo invierto todos los programas, en todos los programas invierto recursos, invierto trabajo, invierto tiempo preparando cada sermón, cada sábado para traerlo aquí, enseñarlo. Pero esa inversión es muy valiosa para mí. No es tiempo perdido. No es tiempo perdido. Tampoco para ti es tiempo perdido venir a la casa de Dios. porque eso se va a revertir en bendición cuan bueno, cuan delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía porque allí envía Jehová bendición y vida eterna mi hermano no pierdas la bendición no pierdas la bendición no dejes de trabajar en tu santificación personal no te despreocupes de los demás hermanos en la iglesia que necesitan de tu don No seas tan autosuficiente que pienses que tú puedes llevar la vida cristiana independiente del cuerpo de Cristo. Eso es un engaño. Eso es un engaño del enemigo. El enemigo quiere que tú y yo nos alejemos del resto de los demás hermanos para hacernos vencer, para darnos lo que él quiere y vencernos. Así que no pierdas la bendición de estar presente de manera presencial en cada culto. Porque eso es un medio para tu santificación. Otro medio para nuestra santificación es la mortificación del pecado. Y en otras ocasiones ya hemos predicado sobre esto, pero vamos a decirlo de manera resumida lo que es la mortificación del pecado. La mortificación del pecado es negarse a uno mismo para agradar a Dios y a los demás. Es negarse a uno mismo para agradar a Dios y a los demás. Es cerrar los ojos para no ver lo malo. Es decir que si estás en tu televisión, si usas televisión, O si estás en un monitor viendo una película o viendo un video y hay alguna escena donde se practica el pecado deliberadamente. Tú como cristiano debes cerrar los ojos para no ver eso. Cambiar de canal o quitar lo que estás viendo. En dado caso que tengas televisión. Debes tapar tus oídos. Eso es santificación. Tapar tus oídos para no escuchar propuestas sanguinarias. Cuando alguien te propone algo que va a herir o dañar la vida de otro, cierra tus oídos, no lo escuche. Cuando alguien venga con un chisme contra otro, una murmuración contra otro, cierra tus oídos. Eso es santificación. Abandonar el vocabulario indecente. Como dice la escritura, ninguna palabra corrompida, soes, sucia, salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación de los oyentes. Maldecir es decir mal. No hables mal de otros. Eso es santificación. Abandonar el vocabulario que desagrada a Dios. Tu lengua debe ser para bendecir. Cuando dice Pedro, vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable. ¿Qué es lo que estamos supuestos a decir nosotros o hablar nosotros? Debemos estar supuestos a hablar las virtudes de Cristo, que nos llamó de las tinieblas a su luz admirable. debemos no ir a lugares impropios, no apto para cristianos. Hay lugares donde un cristiano no debe estar, no debe entrar. Si en un pasado fuiste un borracho, si en un pasado viviste una vida inmoral y hay lugares que promueven el licor, la inmoralidad, mi hermano, eso no es un lugar para un cristiano. huye de ese lugar, sobre todo por cuestiones de que en un tiempo pasado tuviste esa debilidad. Huye de ese lugar. Huye como José. Deja la capa. Porque ese no es un lugar para para ti. También debemos dejar amistades que no nos convienen. Las malas compañías corrompen las buenas costumbres. Si hay una persona que no te está ayudando en el orden espiritual y el tema de discusión o análisis o de conversación es un tema que deteriora tus valores cristianos que te arrastran hacia el pecado mira lo mejor es romper con esa relación rompe con esa relación sea quien sea ay que si que es mi amigo ay que es mi amiga rompe con esa relación porque tu meta es ser santo tu meta es santificar tu vida es acercarte al Señor. Así que dejar las amistades que no nos convienen, esto es un paso hacia la santificación. Decir no a los deseos lujuriosos de nuestra carne cuando nuestra propia concupiscencia nos tienta a pecar. Decir que no, eso es santificación, eso es mortificación del pecado. Sacudir las manos para no recibir soborno cuando alguien te ofrece dinero para tú hacer algo que es indebido. Porque dice la escritura que el soborno ciega a los que ven y pervierte las palabras de los justos. Cuando tú dices que no, a pesar de que te están ofreciendo una gran suma de dinero, tú estás mortificando el pecado. Cuando decides no proveer para los deseos de la carne, no alimentar los deseos de los ojos, la vanagloria de la vida, los deseos concupiscentes de tu carne, tú estás mortificando el pecado. cuando decides limpiarte de toda contaminación de carne y de espíritu y nos referimos cuando hablamos de espíritu a todo sentimiento como el odio, la ira, los celos, la envidia todo eso cuando tú te niegas a practicar todos esos deseos impuros del corazón tú estás mortificando el pecado Cuando haces buen uso de los medios de Dios, como la oración, el ayuno, la lectura de la palabra de Dios, el venir a la casa de Dios, aunque tú no tengas deseos, tú estás mortificando el pecado. ¿Qué dice Romanos 8.13? Porque si vivierais conforme a la carne, moriréis. Mas si por el Espíritu mortificáis, hacéis morir las obras de la carne, viviréis. Mi hermano, hay algo que quiero dejar grabado en tu mente. Cuando hay un enfermo que ha perdido el apetito, papá o mamá o algún ser querido le dice, tienes que comer o si no te vas a morir. Si dejas de comer, te vas a morir. Y es lo mismo que te digo a ti hoy. Si no tienes deseos de venir a la iglesia, si no tienes deseos de orar, Si no tienes deseo de leer la Biblia Mira, aunque no tengas deseo, hazlo Porque si tú quieres vivir, tienes que hacerlo Si quieres vivir espiritualmente, tienes que hacerlo Hay que no quiero tratar a ese hermano porque me cae mal Si lo tratas bien, tú vas a vivir Si lo tratas mal, vas a morir Aprende a crucificar tu propia carne Para agradar a Dios Hacer morir las obras de la carne significa crucificar el pecado, negarse a pecados que podemos cometer cada día. ¿Qué tan consciente tú y yo estamos de los medios corporativos de la santificación? ¿Qué tan consciente tú estás que el día en que tú fuiste unido a Cristo, tú fuiste conectado con otros hermanos en la iglesia, que tú no puedes vivir una vida en solitario, tú tienes que llevar una vida en comunión con otros hermanos y compartir tus dones, talentos y virtudes y tu dinero para el crecimiento de la obra de Dios? ¿Qué tan comprometido estamos nosotros con la iglesia de Dios? que tan conscientes estamos nosotros de los medios individuales bíblicos que debemos usar para nuestra santificación como la lectura de la palabra de Dios, la oración, el ayuno la comunión, venir a la casa de Dios y mortificar el pecado como lo hemos enseñado en el día de hoy todos debemos dar fruto El fruto del espíritu, amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza. Pero tenemos que dar el fruto de santificación. Dice la escritura, ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación y como fin la vida eterna. Mi hermano, Dios ha puesto en tus manos tanto los medios corporativos como los medios personales para tu crecimiento en santificación, para que tú puedas vivir en santidad. Recuerda, como hemos dicho en el mensaje, como dijimos en el mensaje pasado o antepasado, que hablamos de la justificación. Dios no justifica porque hemos creído en Cristo. Pero también en Cristo nos santifica. No podemos vivir de la manera en que nosotros queramos vivir, debemos vivir conforme a Cristo. Porque dice 1 Corintios 1.30 Por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios, sabiduría, justificación, santificación y redención. No hay vida eterna si no hay santificación. Oh mi hermano, Que Dios nos ayude a seguir cultivando este fruto de santificación y no acomodarnos a nuestro propio estilo de vida. Y le digamos al Señor si nuestro corazón está endurecido, ablanda mi corazón. Quita toda la dureza, toda la insensibilidad de mi corazón, porque yo quiero crecer en santidad. Y estoy interesado en que otros también crezcan en esa santidad. Porque sin esa santidad nadie verá al Señor. Que Dios les bendiga.
Medios Diseñados Por Dios Para Nuestra Santificación
Sermon ID | 62524722404840 |
Duration | 1:00:57 |
Date | |
Category | Teaching |
Bible Text | John 17:15-19 |
Language | Spanish |
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