Amados hermanos, acompáñenme a Ecclesiastes capítulo 3. Vamos a meditar en el versículo 1 y en el versículo 11. Ecclesiastes 3 nos dice Todo tiene su tiempo y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Y el verso 11 nos dice, todo lo hizo hermoso en su tiempo y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin. Amén. Padre te oramos para que al meditar en tu palabra tu ilumine nuestro entendimiento. De modo que podamos contemplar las maravillas de tu palabra. Las maravillas que has hecho tu con tus manos Señor. Y en la inteligencia, la sabiduría que ha puesto en tu creación. Te lo pedimos en el nombre de Jesús. Amén. Es interesante hermanos que Salomón, después de todo lo que ha vivido, la experiencia puesta en el libro de Proverbio, comienza este capítulo 3 declarando una verdad que habla de la providencia de Dios en todo su esplendor. Cuando la palabra dice aquí, todo tiene su tiempo. ¿A qué apunta hermanos? apunta al gobierno de Dios sobre su creación, apunta al control de Dios sobre su creación, apunta al sostén de Dios en todo lo que él ha hecho y puso un tiempo para cada cosa. Los achaques no nos llegan cuando niños, cuando jóvenes, cuando vemos un joven muy achacoso, nosotros nos sorprendemos y decimos pero ese muchacho salió tan enfermizo, ese muchacho salió tan achacoso, ¿Cuándo nos llegan los achaques, hermana reina? Que damos gracias por la obra que el Señor ha hecho en su vida. Nos llegan cuando estamos ya en una edad avanzada. Y hermano, y no es eso hermoso aún eso, de que Dios no nos dio una vida de achaques desde la juventud desde que nacimos hasta que llegue la hora de nuestra muerte. Hermano, aún en eso se nota la belleza de la creación de Dios. La Biblia declara a los jóvenes como fuertes. vigorosos. Un himno que cantamos dice hasta que el hombre es bello en su losana juventud. Pero hermano, cuando bajan los números y la aguja del reloj empieza a marcar 70, 73, 75, porque la aguja del reloj de la vida va hacia la derecha, no va hacia la izquierda como la del carro para decir échame. Si no full, pero de años. Y es en esa etapa de nuestra vida, ¿verdad, hermana Carla? Hermana Carla se ríe. Se va esa lozana belleza, se va esa lozana juventud. Y hermanos, Dios hizo todo hermoso en su tiempo. Yo no sé cuántos de ustedes han visto la película, una película que se titula El raro caso de Benjamin Button, que él nace anciano, Y es un bebé, pero es un anciano, y todo el mundo se sorprende, pero qué cosa más fea. Pues ese no es el tiempo de estar tan feo. Un bebé, uno lo ve tierno, bonito, bello. Y entonces él iba en forma contraria al reloj. Mientras más viejo se ponía, se iba volviendo niño. Nació viejo y se volvió niño. y la película se llama así el raro caso porque es un caso raro no va conforme lo que el señor enseña aquí todo lo ha hecho hermoso en su tiempo y todo lo que se quiere debajo del sol también tiene su hora de ahí hermanos la importancia de nosotros orar continuamente delante del señor porque el señor ve nuestra necesidad el señor ve nuestras peticiones que ponemos continuamente delante de él. El Señor sabe antes que pidamos cuáles son cada una de las cosas que necesitamos y ve nuestra devoción al ir en rodillas delante del Señor. Pero nosotros sabemos que Dios hará lo que ha determinado hacer en el tiempo en que lo ha determinado hacer. Y hermanos, eso es maravilloso. Por eso el versículo 11 de ahí en adelante él relata un montón de experiencia en la vida y él dice hay tiempo para nacer y tiempo para morir, tiempo para plantar, para regar y luego para cosechar. Pero al final de toda esa sabiduría en el verso 11 dice, todo lo hizo Dios hermoso, ¿cuándo? En su tiempo. No en el tiempo del hombre. Por eso es que cuando nos desesperamos y nos salimos de la voluntad del Señor, no cosechamos las mismas consecuencias. Vemos otras consecuencias, porque Dios hizo las cosas hermosas en su tiempo. El matrimonio es hermoso en su tiempo. Las relaciones íntimas son hermosas cuando? En el matrimonio, para cuando Dios las hizo. Y así, hermano, podemos aplicar cada cosa a nuestra vida. Todo lo hizo hermoso en su tiempo. Imagínese que después de los 60 sea que nos coja a nosotros con querer hacer ejercicio. ¿Y a este le da de hacer ejercicio, hermano? No pongas esa cara, Cornelio. Al pasito. Pero no podemos estar de malabaristas, ¿verdad? La etapa de la juventud es esa etapa donde tenemos esa elasticidad para hacer todas esas cosas. hermoso en su tiempo, hermano, en el tiempo de vigor, en el tiempo de fortaleza, en el tiempo que podemos hacerlo. Y termina diciendo el verso 11, y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio y hasta el fin. Nos cansamos de ver, hermanos. Usted no ve el día estrellado, ¿verdad que no? ¿Cuándo que salen las estrellas? ¿Cuándo que se ven? La noche. Y tú sabes lo hermosa que se ve una playa a las 12 de la noche con todas esas estrellas afuera y la luna cayendo hermano eso es hermoso y cuando lo vemos no alcanzamos a entender la obra del señor desde el principio hasta el fin y cuando aplicamos eso a nuestra vida hermanos encontramos consuelo encontramos alegría porque David le dijo a Salomón O Salomón mismo relata su experiencia de vida con su padre y dice, joven fui, pero viejo seré, hijo tendré y enseñaré a mis hijos lo que mi padre me enseñó a mí. Hermanos, tenemos una etapa de nuestra vida en la que somos enseñados y otra etapa en la que nosotros vamos a enseñar y ese es el ciclo, hermanos. Y vean todo eso, la belleza, la sabiduría de Dios. ¿Quién enseñan a los más jóvenes? Los adultos. No le dice Pablo a las hermanas en la iglesia enseñen a las más jóvenes a que sean mujeres en su casa, que sean piadosas. No manda a las otras jóvenes. Así que hermana, cuando haya pasado esa etapa de esa losana juventud, de esa belleza, de ese esplendor, hay ministerio todavía para ustedes. Enseñar a las que van subiendo, enseñar a las que van creciendo. Porque es que Dios lo hizo así hermano, cada etapa es hermosa. Cada etapa es hermosa. Y yo espero cuando llegue a mis 70, seguir diciendo eso. Como yo soy más gordito que Anny, es posible que a los 70 ella sea la que tenga que cargar un chin conmigo. A menos que ella no me ponga dieta antes. Clara va de robo. Clara se puede tirar pa' Turcumán arriba y subir la escalera. Se puede tirar a su flaco arriba y subir la escalera. Pero Anny no puede hacer eso conmigo, mi hermana. Tiene que llamar a Edward para que le ayude a subirme. Pero hermano, todo es hermoso en el tiempo del Señor. Y cada etapa de nuestra vida tenemos que ver lo hermoso de lo que Dios ha diseñado para esa etapa. Que el Señor nos concede ver esas maravillas, esa bienaventuranza, y que nos permita gozarnos sobre todo, hermanos, en eso. Que nos permita gozarnos en eso.