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Génesis 39. Ahora, si Dios lo permite, lo que vamos a estar viendo esta tarde es que... Cuando Yahweh es tu Dios, puedes vivir confiado. Cuando Yahweh es tu Dios, puedes vivir confiado. Porque Dios sí está presente en tus pruebas. Aquí en este pasaje, en Génesis 39, Vemos que José ha sido vendido a Egipto. Ahora está en la casa de Potifar. Un oficial de Faraón nos escribe el versículo 1. Pero... Vemos el rechazo que ha recibido de sus familiares, de sus hermanos. El odio. El enojo. Dice que le aborrecieron. Tuvieron envidia de él. le rechazaron, y entonces casi le matan, pero Dios le salva la vida, y ellos le venden a Egipto, y entonces vemos aquí... ¿Cómo José se mantiene firme? Se mantiene firme, aún en sus pruebas, porque sabe que Dios está con él. Incluso el texto nos menciona, varias veces, que Jehová está con José. Como lo dice el versículo 2, dice, Mas Jehová estaba con José. Versículo 3, Y vio su amo que Jehová estaba con él. y que todo lo que él hacía, Jehová, lo hacía prosperar en su mano. A la mitad del versículo 5, dice, y la bendición de Jehová estaba sobre todo lo que tenía, así en la casa como en el campo. Y viendo como que incluso Potifar es bendecido por la presencia de José en su casa, y porque le puso a cargo de su casa. También en el versículo 21 dice, pero Jehová estaba con José. y le extendió su misericordia y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel, también al final del siglo XXIII, dice, porque Jehová estaba con José. Y lo que él hacía, Jehová lo prosperaba. Entonces, vemos que Dios está presente en tus pruebas. Realmente Dios está interesado en tu vida. Y lo vemos aquí en la vida de José, Porque Dios siempre está contigo. Dios no está limitado. El plan de Dios sigue adelante. Y el plan de Dios a veces es un poquito diferente al nuestro. Porque especialmente cuando en capítulo 37 vemos que José tiene unos sueños de que él va a gobernar incluso sobre su familia. No sabe cómo va a venir ese día, pero seguramente no estaba pensando que tenía que sufrir tanto. Seguramente no estaba pensando que tiene que ser un esclavo en una tierra lejana, y que le van a tratar mal, le van a... le van a... van a mentir sobre él, le van a echar en la cárcel... Él seguramente no está planeando en un trayecto tan largo antes de poder gobernar. En tantas pruebas, tantas dificultades. Pero vemos que el plan de Dios siempre es mejor. Y que nadie puede frustrar el plan de Dios. Y vemos como que José se mantiene firme. Y eso es lo que Dios quiere. Dios quiere fidelidad. Incluso Dios bendice la fidelidad. Dios bendice al que le pone primero. Y el creyente realmente puede sufrir confiado. El creyente puede sufrir confiado en el control de Yahweh. De Yahweh su Dios sobre sus circunstancias. Porque lo que vamos a ver es que Dios está presente en tus pruebas. Cuando el resultado de tus circunstancias son inciertas. Cuando la tentación es fuerte. Cuando pecan contra ti intentando destruirte. y cuando tus circunstancias no mejoran. Dios está presente en tus pruebas. ¡Puedes confiar en Él! Por eso, cuando Yahweh es tu Dios, puedes vivir confiado. El problema es cuando el creyente no confía en Yahweh en medio de sus pruebas. Y... tiene ansiedad, se preocupa, se desanima, se desalienta, ¡tiene desesperanza! Porque se está enfocando en las circunstancias, no en Yahweh, aquel que tiene el poder, que tiene el control. Porque cuando Yahweh es tu Dios, puedes vivir confiado. Y entonces aquí, especialmente en la vida de José, lo vemos en el capítulo 39 de Génesis, vemos la clave de su prosperidad. ¡Es Yahweh! ¡Dios está con él! ¡Y por eso prospera! Incluso es interesante que Salmo 105, Salmo 105, versículo 17 al 18, habla... hace mención de José. Salmo 105, versículo 17, Dice, envió un varón delante de ellos a José, que fue vendido por siervo. Entonces, ¿quién es el que ha enviado? Es Dios el que le envía. Versículo 18. Afligieron sus pies con grillos, en cárcel fue puesta su persona, hasta la hora que se cumplió su palabra. El dicho de Jehová le probó. Entonces, viendo que el tiempo de Dios siempre es perfecto. Entonces, siempre ocurren las cosas en el tiempo de Dios. Para nosotros, a veces, tenemos que esperar. A veces, las circunstancias no son muy bonitas, no son placenteras. Pero Dios tiene el plan perfecto. Dios sabe que es mejor. Y entonces, vemos aquí la vida de José, como que Dios está presente en sus pruebas. Y entonces le hace prosperar donde le lleva. Y porque Dios está presente en tus pruebas, lo primero que vamos a ver... es que Dios está presente en tus pruebas cuando el resultado de tus circunstancias son inciertas. Cuando el resultado de tus circunstancias son inciertas. Porque tenemos que recordar a José. Aquí está José, en una tierra lejana, apartado de sus familiares, y yo no sé... Si yo estuviese en la situación de José, yo no sé si quisiera estar cerca de mis familiares, cerca de mis hermanos, que me querían matar. ¿No? Entonces, la situación es bastante incierta. Aún si pudiese escapar de Egipto, ¿qué haría yendo a casa? Los hermanos le quieren matar. No le quieren vivo, no le quieren ni ver. Entonces, el futuro para José es incierto. Ahora sí, él ha tenido unos sueños, que nos lo describió en capítulo 37, unos sueños de que va a gobernar, pero no sabe exactamente cómo va a ocurrir. Entonces, tiene que confiar en Yahweh. Tiene que ver... la mano de Dios en su vida, en sus circunstancias, en sus pruebas. Y entonces, aquí en Génesis 39, versículo 1, vemos el resumen, básicamente, de lo que vemos en el capítulo 37, porque dice, "...llevado pues José a Egipto, potifar oficial de Faraón, capitán de la guardia, varón egipcio lo compró de los ismailitas que lo habían llevado allá. Entonces, en el capítulo 37 nos dice que los hermanos vendieron a José, a los ismailitas, y que ellos lo traen a Egipto y lo venden. ¿A quién? A Potifar. Alguien importante. Alguien que nos dice el rango, dice que es un oficial de faraón, capitán de la guardia, varón egipcio. Entonces, realmente tiene una posición muy importante en el reinado de Faraón. Y eso está preparando el futuro para José, en realidad. Porque luego vemos, después de este pasaje, vemos que José es echado a la cárcel del Rey. Lo cual es importante para poder... para poder interpretar los sueños de los dos siervos de Faraón, para que luego uno de ellos, el que sobrevive, le pueda decir a Faraón, oye, había alguien en la cárcel que me interpretó a mí un sueño, y ocurrió, entonces seguramente te puede interpretar tus sueños. Y lo que vemos es que Dios lo está orquestando todo. Dios lo tiene todo controlado. Y entonces, incluso, ¿en dónde le pone? ¿En qué situación le... en qué circunstancia está? Viendo que Yahweh está en control. Y por eso no hay que dudar, no hay que estar preocupado, porque Dios está presente en tus pruebas. Y entonces, nos lo dice, en versículo 2, dice, Mas Jehová estaba con José. Incluso en capítulo 50, Génesis 50, versículo 20, vemos como que José se ha dado cuenta de que Dios es el que tiene su mano en sus circunstancias, en su vida. Sabe que Dios lo está controlando, porque en Génesis 50, versículo 20, hablando a sus hermanos, le dice que no deben de temer, Versículo 20 dice, vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo. Entonces lo que está indicando es que Dios es el que le ha mandado allí, por ello no deben de temer. Incluso en Génesis 45, versículo 8. Génesis 45, versículo 8. Dice, así pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios. Dios es el que está en control de todos los detalles. También en el versículo 5, Génesis 45, versículo 5. Dice, ahora pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá, porque para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros. Entonces, Dios tiene un plan para José. Al igual que tiene un plan para ti. Y Él está presente en tu vida, si eres creyente, y Él quiere que te enfoques en Él. Y lo primero que vemos es que Dios está presente en tus pruebas cuando el resultado de tus circunstancias son inciertas. Porque aquí vemos que Dios está con José. aún en su situación donde no sabe qué es lo que va a pasar mañana. ¿Qué es lo que va a ocurrir? ¿Qué me va a pasar en esta tierra lejana? Pero aquí, de la forma que lo pones, es que la presencia de Dios no es una promesa. Es un hecho. ¡Dios está con José! No es, estaré contigo, y luego, ¿dónde está? No, no. Yahweh está con José. Y se nota. Ahora... Este tiempo, tenemos que recordar, es un tiempo incierto en la vida de José, pero no hay problema, porque Yahweh está con él. Y eso nos recuerda las promesas que Dios ha tenido con el pueblo de Israel y con los patriarcas, específicamente. Porque en Génesis 26, versículo 3... Génesis 26, versículo 3, dice... Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré, porque a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, y confirmaré el juramento que hice a Abram, tu padre." Entonces, perdón, está hablando a Isaac, en este caso, y le está... Y le está confirmando el pacto, ¿no?, con él. También en Génesis 28, versículo 15. Génesis 28, versículo 15. Vemos que Yahweh está... con ellos. Y va a estar, ahí está la promesa. Génesis 28, versículo 15 dice, he aquí, yo estoy contigo. Y te guardaré por donde quiera que fueres. Y volveré a traerte a esta tierra, porque no te dejaré hasta que hayas hecho lo que te he dicho. Génesis 31, versículo 3. Génesis 31, versículo 3 dice, también Jehová dijo a Jacob, Vuélvete a la tierra de tus padres y a tu parentela y yo estaré contigo. Yo estaré contigo. Entonces, el futuro de José está en las manos de Dios. Dios está presente en sus pruebas. José simplemente tiene que confiar en Yahweh. Tiene que confiar en su cuidado. Ahora, está en una situación vulnerable. No puede ver el futuro. Pero un hijo de Dios nunca está solo. Dios está presente. Y porque Yahweh nunca desampara a sus hijos, siempre está con ellos. Y el poder de Dios no está limitado a una localidad, sino que Dios está con su pueblo y siempre está a su lado, por muy dura que sea la prueba. Y entonces, por eso vemos el énfasis. Para nosotros es fácil verlo, porque en el versículo 2 dice, Mas Jehová estaba con José, pero tenemos que recordar la situación en la que se encuentra José, viviendo de día en día, viendo la mano de Dios. Y entonces dice, y fue varón próspero. Entonces Dios le está prosperando, y estaba en la casa de su amo, el egipcio. Versículo 3. Y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él hacía, Jehová lo hacía prosperar en su mano. Entonces, Potifar se da cuenta de dónde viene el éxito para José. Es Yahweh. Dios está con él. La prosperidad de Dios es notable. Es la fuente del éxito para José. Y entonces, ve que realmente Dios está prosperando José, y que José no es una persona normal, sino que sobresale, porque Dios está con él. Y entonces, es interesante porque la estructura, de la forma que lo describe, indica que la prosperidad era un patrón, que realmente prosperaba, y prosperaba, y prosperaba, hasta el punto que dice en versículo 4, así halló gracia, así halló José gracia en sus ojos, y le servía, y él le hizo mayordomo de su casa, y entregó en su poder todo lo que tenía. Entonces, vemos la... vemos... vemos que Potiphar se da cuenta. Y la razón por la que le da la promoción para ser su mayordomo, simplemente es porque Dios está con él. En el texto no nos da otra razón. Dios está con él, y Potifar se da cuenta, y entonces le pone a cargo, le entrega en sus manos toda su casa. Y entonces... viendo que Dios está prosperando. Incluso en el siglo V, dice, y aconteció que desde cuando le dio el encargo de su casa y de todo lo que tenía, Jehová bendijo la casa del Egipcio a causa de José. Y la bendición de Jehová estaba sobre todo lo que tenía, así en casa como en el campo. Desde aquí vemos como que la prosperidad de José, o sea, Dios está con José, y Dios le está prosperando, y eso impacta a los de alrededor, y bendiciándolos. Y entonces Potiphar es bendecido por causa de José. Y eso también nos recuerda a Génesis 12, 3. Génesis 12, 3. donde hablando a Abraham dice, bendeciré a los que te bendijeren, y los que te maldijeren, maldeciré. Y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. Entonces, los que bendicen al pueblo de Dios, los que les tratan bien, los que les ayudan, realmente Dios les bendice a ellos también. Incluso en Génesis 30, versículo 27, Labán también se da cuenta de que él está siendo bendecido por causa de Jacob. Génesis 30, versículo 27, dice, y Labán le respondió, Allé yo ahora gracia en tus ojos, y quédate, he experimentado que Jehová me ha bendecido por tu causa. Entonces, viendo como que Dios bendice a sus hijos. Dios los prospera. Y impacta a los de alrededor. Y eso es lo que se da cuenta a Faraón. Porque... Ahora, le ha puesto a cargo de todo... Todo lo que él tenía. Todas sus posesiones. Todas sus pertenencias. Dentro de la casa y fuera de la casa. En el campo nos dice, ahí en versículo 5... ¡De todo! Incluso hace mucho énfasis en el todo. No sé si habéis notado la repetición de todo. Pero... En versículo 3 dice, y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él hacía, Jehová lo hacía prosperar en su mano. Y entonces al final del versículo 4 dice, y entregó en su poder todo lo que tenía. Y aconteció que desde cuando le dio el encargo de la casa y de todo lo que tenía, Jehová lo bendijo. Y entonces dice en la mitad del versículo 5, y la bendición de Jehová estaba sobre todo lo que tenía, así en casa como en el campo, y dejó todo lo que tenía en mano de José. Vemos esa repetición enfatizando la bendición, la bendición total de Yahweh sobre sus hijos. ¿Y cómo impacta a los de alrededor? Porque las circunstancias no son obstáculo para las bendiciones de Dios. Los problemas, las tribulaciones, las aflicciones, no son obstáculo para las bendiciones de Dios. Dios no está limitado por una localidad. Dios no está limitado en fuerza. Él puede hacer lo que Él quiere, cuando Él quiere. Y Él sabe que es lo mejor para dar. Y sabemos lo que nos dice la Escritura en Santiago, es que todo lo bueno viene de Dios. Dios da lo bueno. Entonces vemos como que los que muestran favor a los hijos de Dios reciben bendición ellos mismos. Porque esa bendición de Dios hacia José impacta a Faraón. Y entonces en el siglo VI dice, y dejó todo lo que tenía en mano de José, y con él no se preocupaba de cosa alguna, sino del pan que comía. Y era José de hermoso semblante y bella presencia. Entonces, vemos a Potifar, que tiene una relación de confianza con José. Es una relación de fidelidad. José es fiel a Potifar, y entonces Potifar confía en él para entregarle todo en sus manos. Y entonces, viene esta confianza. José confía en Yahweh, Yahweh, su Dios. Dios bendice a José. José... por medio de José bendice a Faraón. Faraón confía en José. Y viendo esta relación de confianza, Pero entonces justamente la última frase, en el versículo 6, abre la puerta a posibles problemas. Porque básicamente nos dicen que José era muy guapo. Básicamente, es la idea. Porque dice, era el hermoso semblante y bella presencia. Y tiene la idea de una hermosa figura y una bella apariencia. Pero lo que vemos es que José es íntegro. Él es fiel a Dios y fiel a su amo. Y ese es el resultado. Al ser fiel a Dios, es que va a ser fiel a su amo. Va a trabajar con integridad. Entonces vemos esa dedicación que tiene José hacia Potifar, y en especial, la dedicación que tiene hacia Dios. Entonces viendo la protección, la bendición que Dios tiene para con José, incluso ahí dice que del siglo VI, que Potifar le dejó todo a menos el pan que comía. Ahora, es posible que realmente esté hablando de comida, y la preparación de la comida de los egipcios era especial, entonces, seguramente, es posible que no quería que un hebreo se encargase de esos. Hay una tradición que... hay algunos que piensan que es un eufemismo simplemente hablando de la mujer de Potifar. En realidad, el texto es claro el decir que está a cargo de todo, y aquí nos dice sino el pan que comía, y obviamente sabemos que por la Escritura también incluye la mujer. Y entonces, vemos que Dios está presente en tus pruebas cuando el resultado de tus circunstancias son inciertas. Porque cuando ya ves tu Dios, puedes vivir confiado. Pero segundo, lo que vemos del versículo 7 al versículo 10, del versículo 7 al versículo 10, es que Dios está presente en tus pruebas cuando la tentación es fuerte. Dios está presente en tus pruebas cuando la tentación es fuerte. Porque aquí vemos que en versículo 6 nos acaba de decir que José es guapo. Y entonces, en versículo 7, vemos que la mujer de Potifar se da cuenta de ello también. Y entonces le codicia, y ella ya adultera en su corazón, pero quiere adulterar físicamente. Versículo 7 dice, Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus ojos en José, y dijo, duerme conmigo. Entonces, es interesante porque las palabras de ellas, en cuanto a su seducción, son muy cortas, ¿no? Duerme conmigo, va directamente al grano. Y en versículo 8, nos dice la fidelidad, y nos expresa la fidelidad de José, no solamente a Dios, que es el principal, sino también a Potifar, porque dice, y él no quiso. Y dijo a la mujer de su amo, He aquí que mi señor no se preocupa conmigo de lo que hay en casa. Básicamente viendo la posición que José tiene, la responsabilidad que tiene hacia su amo Potifar. Dice, y ha puesto en mi mano todo lo que tiene. Entonces, viendo su autoridad, viendo la confianza que tiene con Potifar, versículo 9 dice, Y no hay otro mayor que yo en esta casa. Y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer. ¿No? Entonces, ahí definitivamente vemos que la mujer de Potifar también estaba incluido en lo que no podía tocar José. Y entonces dice, ¿Cómo pues? Haría yo este gran mal, y pecaría contra Dios." Y esto es lo principal. ¿No? José se da cuenta, y lo sabe, por medio de la escritura, que adulterar, o... la inmoralidad, es pecado contra Dios. Entonces dice, ¿cómo pues haría yo este gran mal, y pecaría contra Dios? De hecho, luego, en la ley, en Levítico 20.10, vemos que... los que adulteran, bueno, Dios los condena a la muerte. En Levítico 20, versículo 10, dice, si un hombre cometiera adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero y la adúltera, indefectiblemente, serán muertos. Eso era en Levítico 20, versículo 10. También en Deuteronomio 22, versículo 22, Deuteronomio 22, versículo 22, dice, si fuera sorprendido alguno acostado con una mujer casada, con marido, ambos morirán. ¿No? Es bastante claro. Eso era Deuteronomio 22, 22. Incluso en Proverbios 7, 23, nos dice que toda clase de inmoralidad es que destruyen. Te llevan a la muerte. En Proverbios 7, versículo 23, describe al hombre que escuchó la voz seductora, y dice, versículo 23, como el ave que se apresura a la red, y no sabe que es contra su vida, hasta que la saeta traspasa su corazón. El versículo 22 dice, al punto se marchó tras ella, como va el buey al deguayadero, y como el necio a las prisiones, para ser castigado. Porque la inmoralidad destruye. Y José lo sabe, y lo principal, no quiere pecar contra Dios. Y entonces, por eso, él le dice no. le dice que no, incluso le da razones por su confianza con Potifar, por la autoridad que tiene, por la responsabilidad que tiene, pero principalmente porque no quiere pecar contra Dios. Y entonces... Versículo 10, dice, Hablando ella a José CADA DÍA. Y literalmente, en el lenguaje original es día a día. Es la idea de día tras día, tras día, tras día, tras día. Es casi todos los días que va al trabajo, ella está allí, y ella le está intentando seducir. Dice, y no escuchándola a él, para acostarse al lado de ella, para estar con ella, entonces, ahora está preparando la escena, algo va a ocurrir. ¿Qué va a ocurrir? Él va al trabajo y todos los días ella le está insistiendo, y él todos los días le dice que no, que no, que no, viendo su fidelidad. Y lo que tenemos que recordar es que Dios está presente en tus pruebas cuando la tentación es fuerte. Cuando ya ves tu Dios, puedes vivir confiado. Porque Dios está presente en tus pruebas cuando el resultado de tus circunstancias son inciertas, cuando la tentación es fuerte, y también cuando pecan contra ti intentando destruirte. Dios está presente en tus pruebas cuando pecan contra ti intentando destruirte. Eso es del versículo 11 al versículo 20. Porque ahora vemos la siguiente escena donde la mujer se da cuenta de que no puede conseguir acostarse con José, porque él es fiel a Potifar, él es fiel a Dios, Y vemos el contraste, ¿no? Porque ella es infiel a su marido, es infiel a Dios. Y entonces, nos dice versículo 11, que aconteció que entró él un día en casa para hacer su oficio, y no había nadie de los de la casa allí. Entonces, esa idea de oficio, su ocupación, su trabajo. Entonces, es la idea de, como es usual, o lo que hacía normalmente todos los días, es ir al trabajo, pues José entró para trabajar. Ahora, José estaba trabajando, entonces, realmente no se da cuenta de que estaban solos. Entonces, tenemos que recordar que José no es culpable, porque realmente él está cumpliendo con su trabajo normal. Él está entrando y haciendo lo que tiene que hacer en la casa, pero como que ella lo tenía todo planeado. Ella sabía exactamente qué hacer. Entonces, en el versículo 12, dice que viene ella, y ella le asió por su ropa, diciendo, ¡duerme conmigo! Entonces, ella ya ha dejado la seducción, y ahora es agresivo, ¿no? Porque esa idea de... dice que lo asió por su ropa, y entonces, básicamente, no quiere que se escape, y le está intentando forzar ¿Y qué es lo que hace José? Al fin, a la mitad del versículo 12, dice, Entonces él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó, y salió. Ahora, esa palabra dejó es interesante, porque lo repite en versículo 6, nos dice que Potifar dejó todas sus posesiones, todo lo que él tenía, en las manos de José. porque él se dio cuenta de que José era fiel. Y ahora José demuestra que es fiel al dejar su ropa, o su túnica exterior, es la idea, en las manos de la mujer de Potifar. Porque José es fiel a Dios, y es fiel a Potifar. Y entonces, viendo esa fidelidad, incluso la infidelidad de... de la mujer, incluso viendo su culpabilidad, que ella lo está iniciando, ella le asió de la ropa, y entonces dice que él huyó. Al final del versículo 12 dice, entonces él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó, y salió. Entonces vemos a que aquí huye de la tentación. realmente demostrando el deseo de huir, deja su ropa. No, él no quiere estar ni presente. Pero ella se queda con la ropa y entonces dice que Potifar dejó... Había dejado todo lo que tenía en las manos de José y ahora José deja por decirlo así, casi todo en las manos de ella, para salir, para no pecar. Entonces, realmente viendo que él tenía la opción, ¿no? ¿Qué es lo que va a hacer? Ahí está la tentación. Es muy fuerte. ¿Cómo va a responder? Ahora, nosotros como creyentes tenemos la promesa en 1 Corintios. 1 Corintios 10, versículo 12. 1 Corintios 10. Versículos 12 y 13, porque el versículo 12 nos dice, no creas que tú puedes vencer la tentación solo, básicamente es la idea. Dice, así que el que piensa estar firme, mire que no caiga. Es fácil pensar que nosotros ya hemos llegado a un estatus que ya somos invencibles. O nosotros nunca vamos a caer en eso. Nunca vamos a caer en tal pecado. Pero aquí dice, el que piensa estar firme, que no se enorgullezca. Porque el orgullo viene primero y luego la caída. Entonces, por eso, dice así, que el que piensa estar firme, mire que no caiga. Hay que tener cuidado en la tentación. Porque la tentación es real. Y es difícil. El siglo XIII dice, no os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana, pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también, juntamente con la tentación, la salida, para que podáis soportar. Entonces habiendo la promesa de Dios que siempre va a dar una opción, siempre va a dar una puerta de salida para que podamos vencer la tentación. No por nuestra propia fuerza, sino por el poder de Dios. Y nosotros debemos de someternos a Dios, que es su plan, y tomar la salida. Y eso es exactamente lo que vemos aquí en la vida de José. Él toma la salida y huye. Y entonces, Ella lo ve. En versículo 13 dice, cuando vio ella que le había dejado su ropa en sus manos y había huido fuera, llamó a los de su casa y les habló, diciendo, Mirad, nos ha traído un hebreo para que hiciese burla de nosotros. Vino él a mí para dormir conmigo y yo di grandes voces. Y viendo que yo alzaba la voz y gritaba, Dejó junto a mí su ropa y huyó y salió. Entonces, ahora vemos el engaño de la mujer. Es interesante, no sé si lo habréis notado, es que ella cambia todo, básicamente. Cambia el orden de los acontecimientos. Porque ella, lo que está diciendo, es que El hebreo le está usando términos para bajar su estatus, para pintar una imagen de José como horrible, y entonces dice, mirad, nos han traído un hebreo para que hiciese burla de nosotros, para que se riera de nosotros. Y entonces ella dice que él vino a mí. ¿No? Para dormir conmigo. Él, básicamente, es la idea de... Casi que me quería violar. Y entonces dice... ¡Y yo di grandes voces! Entonces, ella está gritando... Y viendo que yo alzaba la voz y gritaba, dejó junto a mí su ropa y huyó y salió. Es interesante que ella... Tiene que cambiar los detalles, porque si no, ella es la culpable. Porque si ella lo cuenta exactamente como ocurrió, pues... Ella es la culpable. Ella es la que lo ha iniciado. Pero ella lo pone... pintando a José como el villano, pintándole como que él es el que lo ha iniciado, él es el que ha intentado forzarla, él es el que incluso ha dejado su ropa junto a ella. No es que ella lo tenía agarrado, ¿no? Y entonces ella le está culpando, y ella es la que da grandes voces. Ahora, lo que ya nos ha dicho el narrador, es que ella da las voces después, ¿no? Incluso, si leemos el acontecimiento otra vez, dice versículo 12, y ella lo asió por su ropa, diciendo, duerme conmigo. Entonces, él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó, y salió. Y entonces, en versículo 14, ella es la que empieza a gritar, ¿no? Y llamar a los de la casa. Entonces vemos que ella está engañando, y lo que demuestra es que el amor que ella decía que tenía hacia él, realmente se vuelve un engaño. Demuestra lo temporal que es el placer mundano. Demuestra lo volátil que es el aprecio de los hombres. Demuestra lo inútil que es agradar a los hombres. Y entonces ella, lo que ella necesita, son testigos. Ella necesita que le apoyen, especialmente cuando venga su marido y le tenga que contar la historia. Y por eso ella les da los acontecimientos todo planeado. para decir exactamente lo que ella tiene que decir, porque ella está intentando destruir a José. Incluso, es interesante, porque ella le echa la culpa al marido. Dice, mirad, ¡nos ha traído un hebreo! ¿No? Le está echando la culpa a su marido por haberle traído... por haberles traído un hebreo. Para que esto ocurriera, es la idea. Y entonces... vemos este engaño. Incluso ella dice, yo grité, ¿no? Es la idea de... Yo di voces, nos dice ahí versículo 14. Porque eso era bastante importante, incluso en Deuteronomio 22, en la ley, Deuteronomio 22, versículo 23 al 27, Deuteronomio 22, 23 dice si hubiera una muchacha virgen esposada con alguno y alguno la hallare en la ciudad y se acostare con ella entonces los sacareis a ambos en la puerta de la ciudad y los apedrearas y moriran la joven porque no dio voces en la ciudad entonces si ella no da voces entonces ella tambien es culpable incluso en versículo Versículo 27 dice, porque él la halló en el campo. Entonces, básicamente, lo que está describiendo es si alguien sale al campo y se encuentra con la chica y la viola. Dice, y dio voces la joven endesposada, y no veo quien la librase. Entonces, la idea es que ella, al dar voces, ella es inocente. Entonces, ella no va a morir. Solamente va a morir el hombre. Es la idea. Incluso en versículo 25 dice, mas si un hombre hallare en el campo a una joven desposada y la forzare, aquel hombre acostándose con ella, morirá solamente el hombre, porque se acostó con ella. Mas la joven no le harás nada, no hay en ella culpa de muerte. Básicamente porque ella dio voces y no había nadie que la podía librar. Y entonces es bastante importante ese punto. Y por eso lo está mencionando ella. Volviendo aquí a Génesis 39, y entonces, dice... Versículo 15, y viendo que Yo alzaba la voz y gritaba, dejó junto a mí su ropa, y huyó, y salió. Entonces, ella ya tiene más o menos testigos, ¿no? Ella ya les ha contado la historia. Ellos pueden estar junto a ella cuando viene su marido. Y entonces ella espera. Versículo 16. Dice, y ella puso junto a sí la ropa de José hasta que vino su señor a su casa. No sé de cuánto tiempo, pero ella tiene paciencia, porque ella quiere inculparle a José. Y en el versículo 17 dice, entonces le habló ella las mismas palabras, diciendo, ¡el siervo! ¡Hebreo, que nos trajiste, vino a mí para deshonrarme!" La idea de deshonrarme, literalmente, en el original, es burlarse, y entonces, es la idea de aprovecharse, de reírse. Es un siervo, es hebreo, entonces, le está despreciando en frente de su marido. Incluso, ahí otra vez, le está inculpando al marido. Le está diciendo, mira, tú nos lo trajiste, para que se burlase de nosotros. Y versículo 18, dice, Y cuando yo alcé mi voz y grité, él dejó su ropa junto a mí y huyó fuera. Entonces, básicamente, es la misma historia que les contó a los de la casa, a los siervos. Hice el versículo 19, y sucedió que cuando oyó el amo de José las palabras que su mujer le hablaba, diciendo, así me ha tratado tu siervo, se encendió su furor. Y entonces en versículo 20 dice, Y tomó su amo a José, y lo puso en la cárcel, donde estaban los presos del rey, y estuvo allí en la cárcel. Ahora... no nos dice por qué no mata a José. Pensaríamos que si había intentado violar a su mujer, pensaríamos que Potifar quizás simplemente mataría a su siervo. Pero le echan la cárcel. Ahora, es posible que Potifar viendo la fidelidad de José, quizás estaba dudando un poquito del testimonio de su esposa. No nos dice el texto, pero lo que sí sabemos es que Dios está con José y le preserva la vida, una vez más. Ya le había preservado la vida con sus hermanos cuando le querían matar, y Dios orquestra las cosas para que José salga con vida y pueda venir a Egipto. Ahora está en Egipto, Dios le está prosperando, José se mantiene fiel ante la tentación. Y entonces vemos que José también se mantiene fiel, aunque le intentan destruir. Y entonces ahora le mandan a la cárcel. Y lo que vemos es que Dios está presente en tus pruebas. cuando tus circunstancias no mejoran". Eso es lo último que vemos. Dios está presente en tus pruebas cuando tus circunstancias no mejoran. Y eso lo vemos del versículo 21 al versículo 23. Porque el versículo 21 dice, pero Jehová estaba con José. O sea, Dios aún no ha dejado a José. Él está con él. Y dice, y le extendió su misericordia. Es interesante porque esa palabra misericordia es la palabra gesed, que tiene que ver con el amor del pacto, el amor leal, que Dios es fiel a José. Y es que José es fiel a Yahweh también. Y entonces vemos que Dios está con José, y le extendió su misericordia, y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel. Y entonces, estamos viendo Otra vez, ¿no?, esta idea, como ocurrió al principio con Potifar, esta relación de fidelidad, porque Dios está con José, y entonces José es fiel, y la gente de alrededor se da cuenta. Potifar se dio cuenta, y ahora el jefe de la cárcel se da cuenta, dice que le pone gracia en sus ojos, versículo 22, dice, y el jefe de la cárcel entregó en mano de José. el cuidado de todos los presos que había en aquella prisión. Todo lo que se hacía allí, él lo hacía. No necesitaba atender el jefe de la cárcel, cosa alguna, de las que estaban al cuidado de José. ¿Por qué? ¿Cuál es la fuente de su éxito? Dice, porque Jehová estaba con José. Y lo que él hacía, Jehová lo prosperaba. ¿Vemos otra vez? Aquí, la misma idea. Dios está prosperando. Dios está fortaleciendo. Incluso el jefe de la cárcel le puede entregar todo en las manos de José. De la misma forma que Potifar le había entregado todo en las manos a José. ¿Por qué? Porque Dios le está prosperando. Dios está con José. Pero lo que vemos es que el plan de Dios no se ha frustrado. Sigue adelante. Dios siempre obra su plan a pesar de dificultad. Dios siempre obra su plan a pesar de las circunstancias. Y siempre puedes confiar en el control total de Dios. Porque la lealtad de Dios no tiene igual. La presencia de Dios está con José en todas sus pruebas. Y aquí no termina la historia de José. Nosotros sabemos que Dios sigue estando con él, aunque tiene que pasar varios años en la cárcel. Pero José se está dando cuenta de que Yahweh está con él. Entonces, da igual la circunstancia. Sabe que Yahweh es leal. Porque la presencia de Dios está con José en todas sus pruebas. Y es que el lugar no importa, la circunstancia no importa. Dios está con sus hijos. Dios está contigo en cualquier circunstancia, cualquier lugar, cualquier dificultad. Porque cuando Yahweh es tu Dios, las circunstancias son insignificantes. Él tiene el control. Cuando Yahweh es tu Dios, su misericordia es suficiente. Cuando Yahweh es tu Dios, puedes confiar en Él. Y entonces vemos el plan de Dios. Como que Dios obra su plan, a pesar de dificultad, a pesar de pruebas. Es que si Yahweh es tu prioridad, realmente vas a vivir para Él. Si Yahweh es tu enfoque, entonces tu prioridad será glorificarle a Él en tu vida. Da igual las circunstancias, da igual las pruebas, da igual las aflicciones. Vas a querer glorificarle en tu vida. Si tu enfoque no está en Dios, caerás en pecado. Por eso tenemos este pasaje, porque nos muestra que Dios tiene todo el control. Nos muestra que la victoria del malvado es temporal. ¡Que el mal no vencerá! Dios está contigo en cualquier circunstancia. Sí puedes ser fiel a Dios en tus pruebas. Sí puedes soportar la tentación. Sí puedes esperar en Yahweh. Y cuando esperas en Él y confías en Él, le encontrarás que es fiable. Entonces, en una situación así, normalmente reaccionamos con ira hacia los que nos dañan. Con ansiedad hacia lo que ocurrirá en el futuro. Confiamos en nuestras propias fuerzas para sacarnos de los problemas. Buscamos venganza del malhechor. Deseamos el mal para el engañador. Pero la venganza es de Dios. Lo que nosotros debemos hacer es obedecer. la palabra de Dios. Ser leal a Dios ante cualquier prueba. Dedicarnos a Él con una dedicación total, incluso ante la tentación. Enfocarnos en Cristo durante la prueba. Esperar en el cuidado total de Dios. Porque cuando Yahweh es tu Dios, puedes vivir confiado. Dios está presente en tus pruebas cuando el resultado de tus circunstancias son inciertas, cuando la tentación es fuerte, cuando pecan contra ti intentando destruirte, y cuando tus circunstancias no mejoran. Dios está presente en tus pruebas. Eso debe ser causa de gozo. Porque cuando Yahweh es tu Dios, puedes vivir confiado. Vamos a terminar en oración.
Dios está Presente en tus Pruebas
Series Génesis
Sermon ID | 42015630325 |
Duration | 50:29 |
Date | |
Category | Sunday Service |
Bible Text | Genesis 39 |
Language | Spanish |
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