Hechos capítulo 6, versículos del 1 al 7. La Biblia dice, en aquellos días como creciera el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos de que las viudas de aquellos eran desatendidas en la distribución diaria. Entonces los dos se convocaron a la multitud de los discípulos y dijeron, «No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas». Buscad, pues, hermanos de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo. Y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la Palabra. agradó la propuesta a toda la multitud, y eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo, a Felipe, a Procoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas, y a Nicolás, prosélito de Antioquía, a los cuales presentaron ante los apóstoles quienes, orando, les impusieron las manos. Y crecía la palabra del Señor y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén. También muchos de los sacerdotes obedecían a la fe. Vamos juntos a nuestro Dios en oración y pidamos su bendición. Padre Celestial, te damos las gracias por el gozo que es servir a esta iglesia. Gracias por mis hermanos y hermanas. Gracias por el tiempo que nos das alrededor de tu palabra esta noche y oro que me ayudes a declarar tu palabra. Sólo Tú puedes hacer que este tiempo sea edificante y que tenga significado eterno, y te pedimos esto. Oramos que Tú estés orando en nuestro corazón, dando ayuda donde hay necesidad en esta congregación. Sé que hay alguien que me escucha. y les ayudará en donde tengan la necesidad. Y si el resto de nosotros no estamos enfrentando algo difícil, te pido que consideremos un caso que tenemos sabiduría en no pasar mucho tiempo sin que lo necesitemos. Te pedimos que equipes a tus santos, tanto en el momento y para el futuro, a través de la predicación de tu santa palabra. También estoy consciente siempre de que hay alguien que pueda estar escuchándome que no te conoce, y yo oro que tu misericordia esté sobre ellos, que vean la necesidad de tu Hijo, se vuelvan a tu Hijo con fe genuina. Explicado por el Nuevo Nacimiento y lo abracen como Señor y Salvador, te pedimos que salves y te daremos las gracias por lo que tú y únicamente tú explicas y haces y produces, el fruto que es bueno y que pasará el examen de la eternidad. Lo pedimos en el nombre de Jesús. Amén. ¿Será que habrán tiempos difíciles en el ministerio? Por supuesto. Si alguien piensa lo contrario, solo espérate un poco de tiempo y descubrirás que no hay tal cosa como la obra del ministerio sin problemas significativos. Algunas de las dificultades con las que nos encontramos es por el mundo a nuestro alrededor. La iglesia se encuentra con problemas que vienen de afuera de la iglesia. en forma de persecución, de calumnia, en la forma de malos entendidos, de mala caracterización acerca de lo que hacemos, problemas en forma de tentación. La batalla es constante con la tentación del pecado. El mundo trata de moldearnos a su imagen. Encontramos dificultades. de afuera de la iglesia, pero también encontramos dificultades desde adentro de la iglesia. Algunos de estos problemas toman la forma de dificultades en relaciones personales, malos entendidos. Y todas estas dificultades, ya sea que vengan de afuera o de adentro, todas estas dificultades quiere decir que habrá tensión y estrés para los líderes de la iglesia. Para cualquier hombre que ha sido verdaderamente llamado a la obra del ministerio, la iglesia es una carga en su corazón siempre. Nadie debería estar pastoreando el pueblo de Dios si no ama al pueblo de Dios. Nadie debería pastorear el pueblo de Dios si no ama al pueblo de Dios porque ama al Señor. Así que donde te encuentras con esas dificultades está el estrés que viene con esas dificultades en tu corazón porque quieres complacer al Señor. La manera en que tú lidias con esas situaciones y esos problemas. Así que en todas esas dificultades estás consciente de tu necesidad de sabiduría. ¿Quieres que el Príncipe de los Pastores te lidere para que tú hagas en ese momento lo que le complace a Él? ¿Quieres que el Espíritu Santo te guíe para que lo que hagas represente el poder de Dios y esté acorde con la Palabra de Dios? Cuando te encuentras con estas dificultades, lo que quieres es sabiduría, sabiduría pastoral. Decir sabiduría pastoral para aquellos barriles de pólvora, algo que parece explotar dentro de poco, que parece un problema muy grande. Señor, necesitamos sabiduría para saber qué hacer con esto. Es un tema crucial porque, como dije, las tensiones aumentarán. Y esta noche quiero que expandamos nuestra visión aún más allá de problemas en la iglesia y la sabiduría pastoral. Quiero que pensemos en los problemas que tú enfrentas cada semana, cada año. Y yo sé que tú, como nosotros, tú clamas por sabiduría. ¿Qué hago con esta situación familiar? ¿Qué hago con esta situación de trabajo? ¿Qué hago con esta amistad que empieza a tener problemas? ¿Qué hago con esto? Enfrentamos estos problemas todo el tiempo y en el ministerio cada semana. Lo que parece un problema pequeño y manejable, si has estado en el ministerio por un buen tiempo, cada uno de esos problemas pequeños pueden ser mucho más grandes de lo que parecen ser si no lo tratas con sabiduría. Así que la pregunta es, ¿dónde comienzas? Cuando te encuentras con problemas difíciles, ¿a dónde comienzas a lidiar con la situación? Y al evaluar esto, no quieres errar en ninguno de los dos lados del espectro. ¿No quieres tratar con problemas de una manera que refleja negligencia? Es simplificar demasiado las cosas. Ellos, esos problemas se solucionarán solos, que a veces puede ser incluso cobardía. No quisiera tratar con esto, así que voy a dejarlo solo, tranquilo, y tal vez se resolverá por sí mismo. Ese es un error en un lado del espectro. Al otro lado del espectro, sin embargo, es tratar de aplastar hormigas con martillos y pensar que cada solución para cada problema es micromanejar cada situación. Estás consciente, yo no quiero actuar como si fuera yo el señor de la situación sobre el pueblo de Dios. Yo no soy su señor. Así que no quiero ser negligente, pero tampoco quiero aplastar al pueblo de Dios. ¿Dónde comienzo? Si quiero ser fiel y quiero que haya unidad y paz en el pueblo de Dios, ¿a dónde comienzo? En Hechos capítulo 6 vemos un ejemplo de la vida real. Un problema surgió en la vida de la iglesia primitiva y cuando vemos cómo los apóstoles que estaban sirviendo a la iglesia pastoralmente, cuando vemos cómo ellos responden a esta situación, tenemos mucha sabiduría, mucha información acerca de cómo tratar los problemas en la iglesia, en la familia y en tu vida individual. Y veremos este texto bajo cuatro puntos principales. El problema, la solución, la ejecución y la repercusión o secuela. El problema, la solución, la ejecución, es decir, la ejecución de la solución y luego la repercusión o secuela. Algunas observaciones finales. En primer lugar, veamos el problema. En aquellos días, como crecía el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos de que las vidas de aquellos eran desatendidas en la distribución diaria. Una de las cosas que vemos desde el principio del pecado es la capacidad que tiene el hombre. lo que es una distinción natural y volverla en una razón de división. En este caso, hay una división surgiendo basado en idioma y cultura. Los griegos estaban murmurando contra los hebreos por algo logístico. Las viudas griegas estaban siendo desatendidas de alguna manera. En una distribución diaria, distribuían comida diariamente. Era un ministerio para las viudas, un ministerio de misericordia. ¿Quiénes eran los griegos? ¿Eran judíos que hablaban griego? ¿Helenistas? tenían todas las marcas culturales de la dispersión de los judíos afuera de Palestina. Su idioma primario era el griego. Reflejaban en su vida diaria la cultura griega. Los hebreos eran judíos palestinos nativos. Hablarían arameo. principalmente, e iban a sinagogas que hablaban hebreo, y ahí están las personas, se han convertido, vinieron a Cristo, fueron salvos, y ahora pertenecen a la misma iglesia. Esta iglesia primitiva, esta primera iglesia. y el problema raíz tenía que ver con la provisión diaria para los necesitados, y las viudas de los helenistas pensaban que estaban siendo desatendidas y lo culparon sobre los hebreos. Pensaban que era algo intencional. Por la manera en que los apóstoles manejaron esta situación, no era algo intencional. No hay nada en el texto que los hebreos fueran reprendidos o que alguna actitud fuera tratada. El diablo siempre está listo. a tomar algo que no es intencional y usarlo para que haya división entre las personas. Siempre listo el demonio para inflamar nuestras pasiones, influir en nuestra imaginación, sugerir alguna desaveniencia personal, si puede causar de alguna manera división entre hermanos. Y esto es lo que está haciendo acá. Había murmuración. Nosotros estamos familiarizados con la murmuración. una actitud de ofensa, de no estar contentos, de crítica, una actitud de sospecha, y todo amenazando ser viral, porque ahora ha sido expresado vocalmente. Para que Lucas pueda escribir esto, alguien tenía que estar consciente del hecho de que la murmuración estaba ocurriendo. Así que en la vida temprana de la iglesia había una amenaza de división congregacional sobre algo que tenía como intención era servir y bendecir y mostrar misericordia, pero esto se convirtió en un potencial problema de división. Y había razones para esto. El Espíritu de Dios nos dice que era como creciera el número de los discípulos que esto ocurrió. Había una razón práctica para este problema, crecimiento exponencial, crecimiento rápido, miles de personas viniendo a Cristo. y donde el crecimiento ocurre rápidamente en una iglesia. Hay una curva de aprendizaje que los líderes tienen que lidiar. Estás tratando de mantener todo y hay problemas prácticos donde las cosas se salen de la mano. No hay motivación oscura o impura, simplemente es la realidad del crecimiento numérico rápido. Pero no solo es una iglesia en crecimiento que puede enfrentar problemas únicos. También una temporada de poca actividad en la iglesia puede causar sus problemas. Quizás los problemas no tienen suficientes cosas que hacer y empiezan a pensar cosas que no son. Pero además de la razón práctica, hay un problema de percepción que podemos notar del texto, porque la división surge entre personas que tienen estas diferencias culturales. Lo que estamos escuchando acá, el eco que estamos escuchando, son maneras antiguas de pensar acerca de las personas que aún tienen necesidad de santificarse. Cualquier tensión natural que existiera entre los helenistas y los hebreos, a través de este problema, esas tensiones que habrían conocido antes de conocer a Cristo, empiezan a emerger ahora que tienen una nueva vida en Cristo. Esto tenía que ser confrontado. Por su nueva vida en Cristo, tenía que ser confrontado por una nueva manera de pensar según la verdad de la salvación. El diablo complacido de trabajar con patrones antiguos, actitudes antiguas, que pudo haber estado bajo la superficie cuando las personas son salvas, pero cuando se encuentran con un problema que pensaron las personas que demostraba la división antigua, el diablo toma ventaja de esto. Este es el problema. ¿Cómo tratarían esto los apóstoles? ¿Cuál es la solución? Versículo 2, Entonces los doce convocaron a la multitud de los discípulos, y dijeron, No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas. Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo. y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra. Un problema potencial grande, un barril de pólvora. ¿Qué harían con esto? ¿Qué pasos tomarían? ¿Qué diría la sabiduría pastoral? ¿Cómo se vería la sabiduría pastoral? Quiero tomar nota de ocho cosas que veo yo de esta respuesta, de la manera que los apóstoles respondieron. Ocho principios. que necesitamos practicar cuando nos encontramos con temas difíciles. Lo primero que vemos es que este es un tema que requiere sabiduría. Vienen a la congregación con su solución, pero ¿de dónde tomaron esta solución? La respuesta es Ellos no lo tomaron de un versículo de la escritura. No hay versículo en la escritura que diga esto es lo que tienes que hacer cuando alguien está siendo desatendido en el ministerio de misericordia. Los apóstoles no tienen un mapa para esto, un libro de instrucciones. Esta es la primera vez que estaban tratando con esto. Así que la solución, cualquiera que fuera, iba a tener que ver con sabiduría, sabiduría práctica, caminando con Dios, sirviendo la iglesia del Señor. Aquí viene un problema. Señor, ayúdanos, porque vamos a tratarlo y lo haremos de la manera que nosotros creemos que tú serás complacido. Lo mejor que nosotros podemos ver. Se lo decimos a los estudiantes en el seminario todo el tiempo, y lo he dicho a la iglesia. No puedes vivir la vida cristiana sin el Espíritu de Dios. No tienes un versículo en la Biblia que trate con cada problema particular en tu vida, y por eso necesitamos sabiduría. Y este era un problema que requería sabiduría. ¿Oras tú por sabiduría? Cuando te encuentras con tus problemas, cuando te encuentras con los temas difíciles, Quizás estás enfrentando uno de esos momentos. Estás pidiéndole tú al Señor, como el libro de Santiago nos dice, que hagamos para tener sabiduría, sabiendo que Él quiere contestar esa oración. Él quiere darte sabiduría para tomar buenas decisiones. Ese es un tema que requería sabiduría. Y vamos a encontrarnos con muchos problemas que requieren sabiduría en el caminar cristiano. Lo segundo que notamos acerca de cómo los apóstoles respondieron, no solo es que es un tema que requiere sabiduría, sino que tienen un espíritu de dependencia. Ellos están conscientes de su dependencia del Señor. Sólo porque era un tema que requería sabiduría, no lo hacía un tema pragmático. Así es como podrías pensar, la Biblia no trata este tema, así que pensemos en esto pragmáticamente. La Biblia no trata este tema, no hay un versículo que me diga exactamente qué hacer, así que usaré mi mejor juicio. No, todo lo que vemos en estos versículos nos dice que estaban respondiendo espiritualmente al tema. En cada punto de la solución vemos evidencia de que ellos estaban dependiendo de Dios, conscientes de su necesidad de Dios. Incluso lo vemos al nivel de los hombres que serían seleccionados para ayudarles. Iban a ser hombres espirituales, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría. Estamos hablando de servir mesas. Estamos hablando de tomar decisiones prácticas para asegurarnos de que nadie esté desatendido al servir la comida. Necesitamos una solución práctica a un problema práctico, y sin embargo, estos hombres no pensaron de esa manera. Entendieron quién era el enemigo. Entendieron cuáles eran las repercusiones que se podían tener. Así que buscaron hombres espirituales dependiendo del Señor para esto. Lo tercero que vemos, respondiendo con sabiduría, es decir, dependiendo del Señor, Señor ayúdanos, en tercer lugar, vemos humildad. Podemos decir incluso, decir sensibilidad. porque no ignoran el problema. No lo apartan. Versículo 1 dice que hubo murmuración de los griegos contra los hebreos. Es un problema logístico, pero el diablo estaba orando y ahora se volvía algo personal. Y puedes decir, el problema es la murmuración. estar agradecido por lo que tengas. ¿Acaso no nos enseña la palabra de Dios que hagamos todas las cosas sin murmuración y sin disputa? Tu murmuración es un problema. Los apóstoles pudieron haber dado esa respuesta, pero no lo hacen. Estos hombres son razonables, son compasivos. Se puede hablar con ellos. La murmuración no está bien, pero solo porque alguien está murmurando, no quiere decir que su murmuración no tiene ningún fundamento. Tus actitudes pueden estar mal guiadas, mal dirigidas, pero eso no quiere decir que no hay nada que tratar, que no hay nada que arreglar. Así que lo que despliegan los apóstoles es una madurez que puede ver más allá de la paja de las actitudes equivocadas y ver que hay una raíz que debe ser tratada. Que no se está viendo correctamente, la actitud no es la mejor, pero tienen un punto que hay que tratar. Hay algo acá que solucionar. y todos debemos aprender esto. ¿Puedes aprender de tus críticos aun cuando tus críticos tienen muchas cosas equivocadas? Tienes la humildad de decir, Señor, tú sabes y yo sé que el 90% de lo que están diciendo está equivocado, pero hay un 10% porque yo quiero complacerte a ti. Ayúdame a verlo correctamente y responder a ello correctamente. Esto requiere humildad. Cuando alguien tiene las cosas mayormente equivocadas y tú estás recibiendo una actitud mala, es muy fácil ignorarlo, hacerlo a un lado. Pero estos hombres no lo hacen. Lo toman en serio. Lo toman como algo que tiene que ser solucionado. Es un tema que requiere sabiduría, lo que quiere decir que dependemos del Señor, dependieron del Señor. Lo que quiere decir que la postura es una de humildad y sensibilidad. Estos son el pueblo de Dios y quieres cuidar de ellos bien, aun cuando ellos son inmaduros. Quieres cuidarlos bien. En cuarto lugar, para los apóstoles esta era una oportunidad. Algo que podemos ver en esta narrativa es que ellos están enseñando. Han tomado este problema como una oportunidad para enseñar. Versículo 2, Entonces los dos se convocaron a la multitud de los discípulos y dijeron, No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas. Nuestra obra primordial es el ministerio de la palabra. No estamos diciendo que esta no es una necesidad real. No estamos diciendo que no debe solucionarse. Pero sí estamos diciendo que debemos resolver este problema de una manera que no nos aparte de nuestra obra primordial. ¿Qué es eso? Es enseñanza. Y hay este tipo de enseñanza en toda la narrativa. Es una oportunidad para que la iglesia crezca, para crecer no solo en actitud sino también en su entendimiento. Es una prueba para ti y para mí. ¿Vemos los problemas como una oportunidad? Aquí hay una oportunidad para enseñar, para instrucción, una oportunidad para pastorear, una oportunidad para guiar. Aquí hay una oportunidad para la madurez en mi propia vida y en tu vida también. Creceremos juntos al resolver este problema. ¿Ves tú a los problemas con un sentido de emoción? Es decir, tú sabes que no vienen a ti de manera aleatoria. Han surgido bajo el reino soberano de Jesús, bajo el gobierno soberano de Jesús, y todos tenemos la oportunidad de beneficiarnos. El hecho de que están enseñando a través de esta situación nos indica esto. En quinto lugar, lo que despliega la respuesta es liderazgo. Los doce convocaron a la multitud de los discípulos y dijeron, ¿qué están haciendo? Están liderando. Están dirigiendo. No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas. Buscad, pues, hermanos. Esto es lo que queremos que hagan. Buscad, hermanos de entre vosotros, a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo, y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra. Ellos no convocaron a la iglesia y dijeron, a nivel congregacional. Para tratar de solucionar el problema, vinieron con un plan que, por supuesto, requería que ellos tenían que hablarlo entre ellos antes de hablar con la congregación. Los doce convocaron a la multitud junto a los apóstoles como un grupo, como un todo, convocaron a la multitud. Van a hablar con una voz unánime, porque antes de esta reunión ya lo hablaron y saben qué es lo que van a hacer. La iglesia necesita liderazgo. No es humildad. actuar como que si nadie tiene la responsabilidad de liderazgo. No es humildad actuar como que si todos tienen la responsabilidad de liderar. Tú puedes caminar en soberbia con una falsa humildad actuando como que si nadie tiene la responsabilidad de liderar. ¿Quién soy yo para liderar? Y por lo tanto, ¿yo no voy a liderar? Todos somos santos en el Señor, así que todos debemos decidir estas cosas. ¿Suena tan humilde? En realidad, muchas veces es orgullo, arganería, temor. No quieres que se te culpe por el resultado, así que no vas a liderar a nadie. Inmadurez a veces es sincero, es un malentendido de lo que la Biblia enseña acerca de los dones espirituales. Actuar como que si el liderazgo no ha sido asignado a los ancianos de la iglesia, eso ha sido asignado a los ancianos de la iglesia. Así que vienen a la congregación con una solución, y sin embargo, con la sabiduría de Dios, es una solución que involucra a la congregación en la solución. aun cuando están supervisando la solución. tuvieron que tomar consejo juntos. Una marca de buen liderazgo es que tomarás consejo al tomar decisiones serias, consecuentes y pesadas. ¿Haces tú esto donde tienes un tema difícil? ¿Buscas tú consejo pastoral? Yo Aborrezco. Si lo has hecho, perdóname, vas a tener que dejarme decirlo. Aborrezco. Cuando las personas vienen y me dicen, pastor, he decidido que nos vamos a ir a otro lugar y ora por nosotros. Esta es la decisión correcta. Hablaste con alguien al respecto. No necesitas nuestro permiso. Si el Señor te muda, tú eres siervo de Dios, no necesitas nuestro permiso. Pero si estás hablando de una decisión consecuente que toma tu familia y la saca de una iglesia sana, ¿a dónde vas a ir a la iglesia? Preguntamos y dicen, no, no sabemos todavía. Todo acerca de la decisión grita, esta es una mala decisión. ¿Con quién has hablado acerca de esto? ¿Con nadie? ¿Con nadie? ¿Por qué me molesta esto? ¿Porque necesitamos otro miembro de la iglesia? No, porque te amamos. Estas son decisiones con consecuencias graves muchas veces. Lo mismo se le puede preguntar a los ancianos de la iglesia. ¿Estás tú buscando consejo? Deberíamos. Entre nosotros debería haber buen consejo, pero también a veces consejo de otros pastores experimentados que están afuera de la congregación. Pueden ayudar para tomar buenas decisiones. El punto es que vemos liderazgo en este texto. Es un tema que requiere de sabiduría, de depender de Dios. Son decisiones espirituales que se están tomando. Tiene que haber una actitud humilde y sensible. tienen que poder ver más allá de las malas actitudes. Es una oportunidad para la enseñanza, una oportunidad para la madurez. Pero alguien tiene que liderar, y los apóstoles tienen esa responsabilidad. También vemos convicción. Esta es la sexta característica que vemos desplegada acá. Cualquiera que fuera la solución no podía involucrar infidelidad a lo que Dios ya había revelado. Cualquiera fuera la solución. Esto es lo que tenemos claro. Dios no va a estar complacido que nosotros abandonemos o desatendamos Su palabra para servir a las mesas. ¿Quién ha sugerido que los apóstoles sirvan a las mesas? Quizás nadie lo había sugerido. Esta frase no quiere decir que alguien había sugerido que ellos dejaran la palabra de Dios para servir a las mesas, ¿no? ¿Por qué lo dicen entonces? Si nadie lo sugirió, ¿por qué lo están diciendo? Porque desde el inicio están haciendo el punto que hay principios no negociables. Debemos buscar una solución que respeta las cosas no negociables. Hay límites que nos ayudan a tomar buenas decisiones. Sabemos lo que podemos hacer y sabemos lo que no podemos hacer. Así que tenemos que buscar la solución dentro de los límites de nuestra convicción. Esto es sabiduría. El compromiso nunca resuelve la confusión. Hay un problema en tu vida, en tu familia, donde trabajas, algo que te está estresando y tú estás tentado a comprometerte. Lo que tú sabes de la Palabra de Dios que es verdad, esperando que la tensión baje, yo puedo decirte que nunca funcionará. Tú compromisas la Palabra de Dios, tú estás invitando un mundo de problemas. Cualquiera sea la solución, debe estar acorde con la convicción informada, formada por la Palabra de Dios. Dios no está en conflicto con sí mismo. Él no dice lo que dice en Su palabra y luego lidera a Su pueblo a actuar de una manera contraria a lo que Él ha revelado. Así que una de las maneras en que tratas con problemas difíciles es con la claridad de tus convicciones. Esto no lo podemos hacer. Esto no debemos hacer porque Dios ha hablado claramente en su palabra acerca de este aspecto del problema. Cualquiera sea la solución, no podemos comprometer nuestras convicciones. La claridad lleva a la unidad. Así que lo que dicen, le enseñó a la congregación acerca de las motivaciones. ¿Cuál es la motivación? Versículo 2. No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios. No es que nosotros seamos tan importantes que no podemos servir mesas. Esto me refiero con falsa humildad. Oh, sirvamos las mesas. Eso puede parecer muy humilde. El problema es que estarías desobedeciendo al Señor al hacer eso. No estarías complaciéndole al Señor. Ganas la aprobación de la congregación. ¿Qué líderes más humildes tenemos? Ahora ellos sirven las mesas ellos mismos. Los apóstoles dicen, no podemos hacer eso. No porque nosotros seamos muy importantes, sino porque un ministerio vital sería desatendido. No podemos hacerlo. ¿Cuál es el mandato que Dios ha dado a estos hombres? ¿Cuál es su misión? ¿Cómo la misión se consigue, se logra? Sí, misericordia es parte de la misión de la iglesia. Tienes el mensaje como parte de la misión de la iglesia. Ambos tienen que ser logrados. pero un grupo de hombres no lo puede hacer todo. ¿Qué es lo que se les manda hacer? Así que el resto de la iglesia va a tener que actuar. Alguien más va a tener que llenar esa necesidad. Estos apóstoles están siendo guiados por sus convicciones. Ellos serán fieles a Dios. Ellos buscarán cuidar del pueblo de Dios. Ellos buscarán no a una humildad falsa que gana el aplauso de los hombres, porque no quieren complacer a la congregación. Esa es una de las convicciones que debe tener cualquier pastor fiel. Te amamos y sujetos al Señorido de Cristo queremos complacerte. Pero nuestra meta principal no es complacerte a ti, es complacer a Cristo. porque eso siempre será lo mejor para ti. Galatas 1.10, el apóstol Pablo dice, pues busco el favor de los hombres o el de Dios, o trato de agradar a los hombres, pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo. Convicción. ¿Cómo tratas con los temas difíciles? ¿Con sabiduría? ¿Con dependencia en el Señor? ¿Con humildad? ¿Con oportunidad? Esto es una oportunidad para servir al Señor con liderazgo, con convicción. Un séptimo principio es participación. Participación. La solución incluyó la participación de la congregación. representó una oportunidad para que haya progreso en la madurez de los santos al ser involucrados con la solución del problema. Lo vemos a través de la solución. Mientras está siendo expresada, ¿cuántos hombres van a supervisar? ¿Cuántos hombres van a tener un liderazgo en esta solución? Siete hombres. ¿De dónde vino ese número? de los apóstoles. ¿Quién va a seleccionar a estos siete hombres? ¿La congregación? ¿Los apóstoles supervisan la solución en cuanto al número de hombres? ¿La iglesia será parte de la solución al seleccionar a estos siete hombres? ¿De dónde vienen las calificaciones para estos hombres? Estos hombres tenían que ser llenos del Espíritu Santo y de sabiduría. ¿Quién puso ese requisito? Los apóstoles. Con el conocimiento de la voluntad de Dios, este tipo de hombre necesitamos, dijeron los apóstoles. ¿Quién va a escoger a estos hombres en base a esas calificaciones? La iglesia. seleccionen de entre vosotros, los apóstoles dicen a la congregación, seleccionad de entre vosotros hombres que estén acorde a estas calificaciones. Los apóstoles trabajan y la iglesia trabaja. Y al describir cómo estos hombres iban a servir, los apóstoles dicen, Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo. Ustedes están participando. Nosotros estamos supervisando. Ustedes seleccionarán. Nosotros afirmaremos esa selección. Nosotros tendremos la última palabra en cuanto a esa selección. Así que en la solución había participación. Eso es pastorear a las personas. El gobierno de ancianos no quiere decir que los ancianos están aislados. El gobierno de ancianos no quiere decir que los ancianos dominan. Sí quiere decir que hay liderazgo, pero es liderazgo amoroso. Primera de Pedro, 5, 1. Ruego a los ancianos que están entre vosotros, yo anciano también con ellos. Pedro, escribiendo como un apóstol, se describe a sí mismo anciano también con ellos. Ruego a los ancianos y testigo de los padecimientos de Cristo, que soy también participante de la gloria que será revelada, apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente. No por ganancias honestas, sino con ánimo pronto. No como teniendo señorillos sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la Grey. No siendo negligentes, no siendo cobardes, no esperando que los problemas se solucionen por sí solos, pero tampoco micro supervisando, no aplastando, no dominando, no señoriando, pastoreando a las personas en amor, principalmente siendo un ejemplo, siendo un ejemplo a la ley de Dios. La octava característica que vemos como resultado de la respuesta de los apóstoles, oportunidad, liderazgo, convicción, participación y por último continuación. Y nosotros, al seguir este proceso, mientras ustedes hacen las cosas que les hemos instruido, nosotros, mientras este problema está siendo solucionado, nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra. Ellos deben continuar con su obra asignada. Su obra no debe detenerse. Y van a tener que confiar en el Señor de que este proceso congregacional y de que a través de estos hombres el problema iba a poder ser solucionado. La solución incluyó delegar a otros que estaban calificados para liderar. Así que el problema enfrentado no paralizaría el ministerio. Tú y yo, si vamos a ser fieles a Cristo, debemos aprender cómo batallar con una mano y cómo ser granjeros, labradores con la otra mano. No puedes permitir que los problemas que enfrentas paralicen el resto de lo que Dios te ha mandado a hacer. Tienes que poder hacerlo todo. Tú conoces esto. Vi a nuestro hermano Gerardo esta mañana. en el edificio pastoral y hablamos. Puedes orar por nuestro hermano. Su padre está en mala salud. Acaba de regresar de ver a su papá y tiene escritura bíblica que hacer esta mañana en la iglesia, en el ministerio. Aquí está con esta carga con la familia mientras está siendo fiel en el ministerio. y esa es toda nuestra vida. La vida no se detiene. Así que tienes esta carga en tu vida, pero tienes que trabajar mañana. Esto es cierto para todos nosotros, pero es cierto especialmente en el ministerio. Debemos ver los problemas como parte de nuestro ministerio. Todo el ministerio continúa, Aun cuando algo del ministerio, los problemas del ministerio, requieren atención especial en temporadas particulares, no estoy negando que a veces nuestro enfoque está apartado por estos problemas, pero no puedes dejar de hacer todo lo que Dios te ha llamado a hacer. Vamos a delegar, vamos a confiar en el Señor que trabaje en este proceso y nos vamos a dedicar a la oración y el ministerio de la palabra. El ministerio continúa. ¿Cómo será esto ejecutado? Vemos el problema, vemos la solución, ahora vemos la ejecución. Versículo 5. Agradó la propuesta a toda la multitud. y eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo, a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas y a Nicolás, prosélito de Antioquía, a los cuales presentaron ante los apóstoles quienes, orando, les impusieron las manos. ¿Qué vemos? Vemos una iglesia que está dispuesta a recibir la enseñanza. La murmuración fue reemplazada por un acuerdo. Esta palabra complació a los helenistas y a los hebreos, a toda la congregación. Hubiera sido fácil ser ofendidos de parte de los hebreos o continuar la sospecha de parte de los helenistas. Pero el problema se convirtió en una oportunidad para alabar al Señor. Los apóstoles lideraron y la Iglesia aprendió. Una Iglesia dispuesta a recibir la enseñanza y la solución. Para esto enseñas, para esto oras, por esto oras. Tú deseas que el pueblo de Dios aprenda a ser seguidores maduros. No seguidores inmaduros, no seguidores irresponsables, seguidores con convicción. Hebreos 13.7 y 13.17, la iglesia debe ser sumisa a sus líderes. Esa no fue una idea que se le ocurrió a los líderes. Eso viene de la boca de Dios. Confiamos nosotros en que Dios obrará a través de los hombres líderes calificados, ordenados por Dios. Quiere decir que estos seguidores van a estar llenos de fe y van a seguir porque creen la palabra de Dios. Van a ser seguidores enfocados en Cristo. La confianza no está en los líderes, sino en Cristo, y es su iglesia. Y tú revelas cómo debemos funcionar. Los discípulos estaban aprendiendo esto, y la congregación estaba aprendiendo esto, pero ellos estaban recibiendo la instrucción. Así que vemos que es una elección confiable. Ellos siguen lo que se les dijo que se hiciera. Escogieron a Esteban, y a Felipe, y a Prócoro, y a los demás. Le dieron seguimiento a lo que se les pidió que hicieran, y tomaron su decisión, así como los apóstoles tomaron su decisión. Es decir, tomas el estándar que se te dio, hombres que reconoces que son sabios y llenos del Espíritu Santo. Esos hombres son los que están buscando, así como los apóstoles buscaban ese tipo de hombre. La congregación, entonces, buscaba ese tipo de hombre, lo que quiere decir, escuchando al Señor, confiando en el Señor, buscando la ayuda del Señor, nosotros, entonces, tomaremos la mejor decisión que sabemos tomar. haremos nuestro mejor esfuerzo, orando que Dios hará uso de esta elección. Pero nosotros sabemos que somos limitados en nuestro conocimiento. Nos has dado el estándar, apóstoles. Nosotros no conocemos el corazón de los hombres. Así que estamos viendo sus vidas, lo que caracteriza a sus vidas. Están caracterizados por lo que creemos nosotros ser, el fruto del Espíritu, lleno del Espíritu. Vemos en estos hombres sabiduría. Así es como haremos nuestra elección. ¿Por qué estoy diciendo esto de esta manera? Porque el primer nombre en la lista fue probado ser un hombre de fidelidad hasta el final. Esteban. Hicieron una buena elección. Predica el evangelio y muere por su fe. Pero si has estado escuchando la enseñanza del libro de Apocalipsis, ¿cuál es uno de los errores que estaba influyendo la vida de estas iglesias primitivas? El error de los nicolaitas. Y compartí con ustedes que según muchas fuentes en la historia temprana de la iglesia, La historia era que ese movimiento comenzó con un hombre que se alejó como un falso maestro, y ese era Nicolás de Antioquía, el último nombre de la lista en Hechos 6. Esa es la historia de la iglesia, eso no es la Escritura, y yo reconozco esto, pero creo que hay una lección que tomar de ahí. La solución de hoy puede ser el problema de mañana. Tú haces tu mejor esfuerzo para tomar la mejor decisión. Puedes resolver el problema hoy, ser la solución hoy, pero más adelante. puede ser que haya sido incluido problemas. Pablo escogió a Demas para que fuera con él en el ministerio. Demas le sirvió a Pablo, es nombrado en las cartas. Pero al final, Demas, habiendo amado este mundo, me ha desertado, dijo el apóstol. ¿Cómo tomas decisiones si estás congelado, paralizado, por la realidad que tú no lo sabes todo? Tú confías en el Señor justo donde estás parado y tomas la mejor decisión que puedas tomar en ese momento, sabiendo que el Señor sabe. Él conoce tus deseos, tu motivación. Él sabe lo que tú no sabes del corazón de los hombres. Y el mismo Dios que te ayudará a tomar la mejor decisión hoy estará contigo para resolver el problema mañana. Tú puedes confiar en el Señor. Esta es una solución confiable. Y toda elección que hagamos como líder de la iglesia, deberemos confiar en el Señor. Queremos ser fiel a ti, Señor. Estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo. Ayúdanos, Señor. Hablando de esta lista de nombres, John MacArthur dice, los siete hombres tenían nombres griegos. Eso implica que todos eran helenistas. La iglesia, desplegando amor y unidad, pudo haber escogido a estos hombres para rectificar el aparente imbalance involucrando a las viudas helenistas. No es malo tomar elecciones prácticas lideradas por el Espíritu Santo. Esta es una elección confiable por una iglesia que está dispuesta a recibir la enseñanza, lo que lleva a una solución en la que ellos confiaron. a los cuales presentaron ante los apóstoles quienes, orándoles, impusieron las manos. Los apóstoles ratificaron la decisión de la congregación. La iglesia tomó su responsabilidad seriamente, y los apóstoles afirmaron su elección. Pero a cada paso en cada punto de esta solución. Reconocemos que hubo más obrando que el pragmatismo. La prioridad era espiritual. La solución era espiritual. Las calificaciones de los hombres, espirituales. La consagración de estos hombres a la obra era espiritual. Después, los cuales presentaron a los opóstoles quienes, orándoles, impusieron las manos. Esto es servir las mesas, pero los encomendamos a estos hombres a esta obra, pidiéndole al Señor que hiciera uso de ellos. El problema es la solución, la ejecución. En cuarto lugar, y por último, la repercusión o secuela. Versículo 7, Y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén. También muchos de los sacerdotes obedecían a la fe. como resultó todo. La Palabra del Señor creció. La Palabra del Señor seguía esparciéndose. Los discípulos incrementaron. El número de discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén. Y la penetración de Su testimonio incrementó, porque aún muchos de los sacerdotes obedecían a la fe. Esta congregación unida estaba siendo utilizada grandemente por el Señor en la ciudad de Jerusalén. Un barril de pólvora potencialmente explosivo se convirtió en un paso poderoso hacia adelante en la vida y el ministerio de la Iglesia Infante. Lo que el diablo quiso hacer para dañar, Dios usó para un bien glorioso. Quiero terminar entonces con algunas observaciones. En primer lugar, los problemas. Este es un problema y un ejemplo. Nosotros los enfrentamos cada semana, cada año. Nosotros no escogemos el tiempo de los problemas. Los discípulos fueron multiplicados en números. No pareció ser el mejor momento para este conflicto, pero era el tiempo perfecto. El Señor lo permitió. Yo no quiero decir que no hubo pecado involucrado, pero sí que Dios es soberano. Cualquier problema que tú enfrentes hoy, tú debes estar convencido de que Dios es soberano Y así verás estos problemas como oportunidades para crecimiento, para madurez, para pureza. El Señor usa los problemas para tratar con nuestros pecados. No escoges tú el tiempo, lo escoge Dios. Ni tampoco la presencia de problemas quiere decir falla personal. Nos enfrentamos con algo que nos impresiona y nos empezamos a preguntar, ¿qué hice yo mal? ¿Cómo es que terminamos en este problema? ¿Qué estamos haciendo mal? A veces la respuesta es nada. No es que tú hiciste algo mal. El Señor lo ha permitido. Para tu bien, al final. Primera Corintios 11, 18. Cuando oigo que se reúnen como iglesia, ¿hay problemas entre vosotros? Y lo creo, porque debe haber facciones entre vosotros para que los que son genuinos entre vosotros, sean manifiestos entre vosotros los que son aprobados. Algo bueno en la división en Corinto, dijo el apóstol Pablo, podemos saber quiénes son los verdaderamente aprobados, quiénes son verdaderamente los que aman a Cristo. Estamos averiguando quiénes son los que piensan bíblicamente. Estamos viendo quiénes son los sumisos a la autoridad espiritual. Aún en medio de las facciones podemos ver los que son aprobados en la congregación. Y en el caso de los Corintios, habían muchos problemas. Pero en el caso de muchas iglesias en nuestra nación, no es que ellos hayan hecho algo malo. Los problemas llegarán en el curso del ministerio. Pensamiento final, ¿el camino para la solución? Esa fue la pregunta inicial. ¿Cómo tomas un punto de vista amplio del problema? ¿Cómo comienzas? Esta es la verdad consoladora. No requieren respuestas extraordinarias. Nuestros problemas requieren respuestas fieles y ordinarias. Fielmente quiere decir que entendemos que necesitamos sabiduría, que necesitamos el Señor, necesitamos de Él, somos dependientes de Él. Fielmente abrazando la humildad. Señor, si el problema vino a mí de una manera equivocada, que no lo ignore, Señor. Que yo fielmente pueda ver los problemas como oportunidades. Que pueda ser fiel proveyendo liderazgo valiente. El liderazgo no puede tener manos débiles. Los problemas no se van a solucionar por sí mismos. Debemos ser líderes valientes. Debemos actuar también con convicciones estables, que no fluctúan. La palabra de Dios es clara. No podemos estar parados en ningún otro lugar que no sea la palabra de Dios. Fielmente participando con otros, de tal manera que tú estás pastoreando a las personas. Fielmente. trabajando en la obra. No puedo dejar que este problema paralice cosas importantes que necesitan ocurrir hoy. Aun cuando mi mente esté tentada a estar tan enfocada en este problema, Señor, hay mucho trabajo que hacer. Yo tengo que tener una espada en una mano y un arado en el otro. Que yo sea fiel a todo lo que Tú me has asignado, Señor. Que Dios nos ayude. a tomar los problemas potenciales y ver cómo Dios convierte eso en progreso. Amén. Oremos. Señor, te damos las gracias por tu fidelidad. en hacer esta obra maravillosa, tomar cosas que nos hacen temer, que nos hacen ver nuestra pequeñez, que nos hacen estar conscientes de nuestra gran necesidad por Tu sabiduría, y volver esas dificultades En situaciones donde Tu obra poderosa y maravillosa es desplegada. Bendice Tu Palabra a nuestro corazón, lo pedimos en el nombre de Jesús.