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reconocer bienvenidos a esta edición del martes de por cristo y su palabra con el pastor y maestro enrique zaria pastor de iglesia del valle central en ceres california vamos a cubrir versos 27 al 34 el título es el poder y la misericordia de jesús Pasando Jesús de allí, le siguieron dos ciegos, dando voces y diciendo, de misericordia de nosotros, hijo de David. Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos, y Jesús les dijo, ¿creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron, sí, Señor. Entonces les tocó los ojos diciendo, conforme a vuestra fe os sea hecho. Y los ojos de ellos fueron abiertos, y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo, Mirad que nadie lo sepa. Pero salidos de ellos, divulgaron la fama de él por toda aquella tierra. mientras salían ellos de aquí le trajeron un mudo endemoniado y echado fuera el demonio el mudo habló y la gente se maravillaba y decía nunca se ha visto cosa semejante en Israel pero los fariseos decían por el príncipe de los demonios echa fuera los demonios señor oramos pidiéndote entendimiento y ayuda para comprender lo que dice aquí para tomar la actitud de obediencia ante ti, una actitud de adoración, Señor. Que tu nombre sea santificado en este mensaje, te lo pedimos en el nombre de Jesucristo. Amén y Amén. Antes de continuar aquí, quisiera mirar la lista de milagros que Mateo presenta. Él escoge, si usted lee, dice que Jesús sanó a miles y miles de personas, multitudes. Donde quiera que iba, lo sanaba a todos. Dice que sanaba todo tipo de enfermedad, todo tipo de dolencia. Pero Mateo escoge 10, 10 milagros en particular. Y Mateo no los escoge al azar, los pone en cierto orden porque él quiere presentar al Señor Jesucristo como el Mesías. ¿sí? Y el primer, la primera persona que sana es un leproso, el segundo es el esclavo de un centurión, el tercero la suegra de Pedro, cuarto calma el mar y el sexto, el quinto a dos endemoniados los libera de los demonios, el sexto a un paralítico y no sólo le sana físicamente pero le perdona sus pecados, Séptimo, la mujer del flujo de sangre, una mujer que estaba muerta en vida por la condición de su enfermedad y lo que la ley dictaba contra ella. Ocho, le da vida a la hija de Jairo, que está muerta. Nueve, sana a dos ciegos, esa es la parte donde entramos hoy. Y el último, en estos dos capítulos de ocho y nueve, es un mudo que está endemoniado y el Señor Jesucristo lo sana. Y en medio de esto también está la narrativa cuando el Señor Jesucristo llama a Mateo, el peor de los pecadores en Israel, y le perdona sus pecados y lo hace uno de sus discípulos. Y también hay otra porción donde muestra dos hombres que quieren ser discípulos del Señor Jesucristo, y Él les dice no, y les muestra por qué no pueden seguir a Jesús. porque ellos quieren seguirlo de acuerdo a su propio estándar. Nadie viene a Jesús con sus propias condiciones, tiene que ser llamado por el Señor y responde a ese llamado en obediencia. Creo que es el testimonio que dieron Minerva y Gaby hoy. Así que Mateo con esta lista demuestra que Jesús es el Mesías prometido. el Rey de Israel, el Hijo de Dios, es una lista donde es imposible decir Él no es, cuando todo muestra que sí es. Y es interesante ver cómo escogió poner a lo último la narración de los ciegos y de la endemoniada. Hay una razón por esto, lo vamos a ir mirando poco a poco. Entonces, volviendo allá al verso 27, dice, pasando Jesús de allí, le siguieron dos ciegos dando voces y diciendo, ten misericordia de nosotros, hijo de David. Jesús viene de levantar a la hija de Jairo de los muertos, la resucita, se la entrega a sus papás y cuando sale de allí dice que dos ciegos vienen. Para entender lo que está sucediendo, no es como que Jesús está solo y los dos ciegos quieren venir a platicar con Él. Hay una multitud detrás del Señor Jesucristo. Si uno presta atención a la narrativa de los evangelios, Jesucristo no tuvo vida privada. Solamente en las madrugadas, cuando se levantaba, que todo el mundo estaba dormido, podía ir a orar solo. De resto, siempre había multitudes alrededor de Él, siguiéndolo donde quiera. Hay una multitud caminando cuando sale de la casa de esta niña que es resucitada. Todo el mundo sabe lo que está sucediendo allí. y los dos ciegos van detrás del Señor Jesucristo y están a gritos, le están diciendo, ten misericordia de nosotros, hijo de David. Yo creo que a todo pulmón están gritando porque ellos no pueden ver a Jesús, pero saben que está cerca. ¿Sí? Y la la el término que ellos usan, ellos no dicen, Jesús, sánanos, ellos no dicen, Jesús, danos la vista, ellos dicen, ten misericordia de nosotros, hijo de David. a lo que recurren es a la misericordia del Señor. Tener misericordia es mostrar compasión en acción. Y el que muestra misericordia está reconociendo la necesidad del que está afligido. Pero no sólo eso, tiene los recursos para suplir esa necesidad. El único que puede suplir toda necesidad para toda persona en toda circunstancia y ser siempre misericordioso es Dios. porque él es el creador, es el dueño del universo. Estos hombres están reconociendo eso en Jesús. Cuando dicen, ten misericordia de nosotros, hijo de David. Mire, quiero mirar algunas escrituras para mirar la misericordia del Señor. La razón por la que me quiero detener un poquito en esa palabra es porque milagro tras milagro, tras milagro, lo que estamos viendo es la misericordia del Señor. Quería mirarla un poquito más de cerca. Efesios 2, 4 dice que pero Dios que es rico en misericordia por su gran amor con quien nos amó y verso 5 aquí está aquí dice Dios que es rico en misericordia por su gran amor con quien nos amó verso 5 aún estando nosotros muertos en pecado nos dio vida juntamente con Cristo eso es misericordia Está hablando de la condición del hombre completamente perdido, sin ninguna esperanza, pero Dios en su amor mostró misericordia y salvó a los que Él ha querido salvar. Tito 3.5 dice que Él ha provisto salvación para todos los hombres. Tito tres cinco, voy a ir un poquito rápido, nos salvó no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, es decir, nadie puede hacer nada para alcanzar al Señor, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, una obra iniciada por Dios, una obra que solo Dios tiene la capacidad y el poder para hacerlo, y una obra que solamente un Dios misericordioso puede hacer, esa es la misericordia manifestada aquí. Jeremías también habla de la misericordia de Dios en Lamentaciones 3, 22 al 23. Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias, nuevas son cada mañana, grande es tu fidelidad. Dios nunca deja de ser misericordioso. Y toda persona que ha conocido de Dios es por la misericordia de Dios, no por la fe de la persona, no por la bondad de la persona, no por la religiosidad de la persona, no porque sea buena gente o lo que haga, no importa, es la misericordia de Dios. Y los ciegos están clamando basados en la misericordia del Señor, no en su capacidad de ser oídos por el Señor, pero en la misericordia del Señor. La misericordia del Señor es inagotable, mire Salmo 136, Salmo 136 dice que la misericordia del Señor nunca se agota, nunca se termina. Alabada Jehová, porque Él es bueno, porque para siempre es su misericordia. Alabada Dios de los dioses, porque para siempre es su misericordia. Alabada al Señor de los señores, porque para siempre es su misericordia. Al único que hace grandes maravillas, porque para siempre es su misericordia. Al que hizo los cielos con entendimiento, porque para siempre es su misericordia. Al que extendió la tierra sobre las aguas, porque para siempre es su misericordia. al que hizo a las grandes lumbreras porque para siempre su misericordia el sol para señorearse en el día porque para siempre su misericordia y sigue y sigue 26 versos 26 veces diciendo porque para siempre es su misericordia la misericordia del señor no se agota no se termina Salmo 142, verso 1 al 2, dice que cuando estoy en tiempo de angustia. Salmo 142, versos 1 al 2. Entonces, clamo a Dios, porque en Él encuentro misericordia. Dice, con mi voz clamaré a Jehová, con mi voz pediré a Jehová misericordia. Delante de Él expondré mi queja, delante de Él manifestaré mi angustia. Es normal sentir angustia, es normal llevar una queja delante de Dios, es normal exponer delante del Señor una necesidad, porque en Él hay misericordia. Por eso es una contradicción, en mi opinión. No que un cristiano se deprima, pero sí que un cristiano viva en depresión. Porque un cristiano que dice que es cristiano y vive en depresión, es una persona que ignora la misericordia del Señor, no se humilla delante del Señor, lleva su propia carga y asume que por sí mismo lo puede solucionar en lugar de descansar en el Señor. La misericordia del Señor no se agota y está disponible para todos aquellos que claman a Él. El que clama a Él puede descansar en Él, confiar en Él. Eso dice Salmo 143, 8. El que confía en Dios, espera en su misericordia. Hazme oír por la mañana tu misericordia, porque en ti he confiado. Hazme saber el camino por donde ande, porque a ti he elevado mi alma. Es lo que hicieron los ciegos. Ellos están elevando su alma al Señor. Ellos están poniendo completamente las manos del Señor. Eso es. Eso es buscar la misericordia del Señor. Buscar la misericordia del Señor no es buscar el favor de Dios para que yo pueda seguir haciendo como quiera y no tenga consecuencias en mi vida por mis errores. No es eso. Buscar la misericordia del Señor es dejarse completamente en sus manos. Y los ciegos eso es lo que están clamando allí. Miren Salmos 144, 2. misericordia mía y mi castillo, fortaleza mía y mi libertador, escudo mío en quien he confiado, el que sujeta a mi pueblo debajo de mí. Está hablando el rey ahí. Su sustento, su fortaleza. Es porque Dios tiene misericordia, lo que está afirmando allí. Miren, Salmo ciento cuarenta y cinco ocho, clemente y misericordioso es Jehová, lento para la ira y grande en misericordia. Dios no tiene que salvar a nadie, Dios no tiene que rescatar a nadie, Dios no está obligado con nadie. Pero Él es clemente, Él es misericordioso. Y como dijo Jeremías allí en Lamentaciones, no hemos sido destruidos por causa de la misericordia del Señor. Pero todos merecemos la condenación eterna. Hebreos 4, 16 afirma algo acerca, basado en la misericordia del Señor, donde toda persona puede acercarse a Él, aunque en este caso habla del creyente. El que cree, que confía en Dios, reconoce sus pecados y reconoce que en Cristo solamente hay perdón de pecados. Y dice el verso 16, acerquémonos pues confiadamente al trono de la gracia para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. El que puede socorrer a todas las personas, el que puede salvar a todas las personas, el que puede perdonar a todas las personas es Cristo Jesús. Así que la declaración de estos dos ciegos cuando dicen, ten misericordia, ellos no están diciendo, yo no creo que por la respuesta del Señor Jesús, yo no creo que ellos están usando una palabra como hoy en día todo mundo dice, ¿te gusta el ice cream? Una palabra arrastrada que en mi opinión yo la uso solo para el Señor, no la uso para nada más. No es así. No es así como que los ciegos usan una palabra que todo mundo usa. Los ciegos están hablando de lo que ellos entienden, de quién es el Señor Jesucristo cuando le dicen, ten misericordia de nosotros, hijo de David. Le gritan al Señor. y enseña la confianza y la fe que ellos han puesto en el Señor Jesucristo. No han visto nada de lo que Él ha hecho, pues son ciegos, pero han escuchado acerca de sus milagros y han creído que esta evidencia prueba que Jesucristo es el Mesías. Por eso usan el título, la primera vez que este título se escucha en público, en el libro de Mateo, cuando ellos dicen, Hijo de David. Hijo de David. Ellos saben por qué están usando ese título. Ellos saben por qué están apelando a la misericordia del Señor. Mateo se refiere a Jesucristo como el hijo de David cuando comienza en el capítulo uno, pero esta vez los ciegos lo están declarando públicamente. Tú eres el hijo de David. Isaías treinta y cinco del cinco al seis nos muestra Algo que estos ciegos conocían para que hicieran esta declaración. Mire, es importante decir ahí, la fe se fundamenta exclusivamente en creer exactamente como Dios dice en su palabra. La fe no se trata de que yo declaro algo y espero que suceda. Eso es terquedad o necedad o capricho, como le quiera llamar. La fe es fundamentar sus pensamientos, su corazón y su vida en lo que Dios dice en su palabra solamente. Así que estos hombres, la fe que están mostrando, no es en el grito que echaron, en el grito que dijeron, en que se hayan escuchado con ese grito, sino lo que significa lo que ellos están diciendo. Ten misericordia de nosotros. Hijo de David, mire Isaías 35, versos 5 al 6. lo que dice que va a suceder en el futuro cuando venga el Mesías. ¿Qué va a suceder en Israel o en Sion? Versos cinco al seis dice entonces los ojos de los ciegos serán abiertos. Estos hombres sabían eso, que el hijo de David era el único que podía hacer esto. Los oídos de los sordos se abrirán, entonces el cojo saltará como un ciervo y cantará la lengua del mudo porque aguas serán cavadas en el desierto y torrentes de soledad. Es el reino del Señor Jesucristo. La Biblia habla del reinado milenial aquí en la tierra donde Jesucristo viene, establece su reino físicamente, Se sienta en el trono de David en Sion, allí en Jerusalén, y gobierna en la tierra por mil años. El libro de Isaías describe que ese reinado milenial aquí en la tierra no habrá enfermedades, no habrá muerte, no habrá maldición, no habrá robos, no habrá pobreza. Es un reinado de prosperidad, de salud, de equidad, de justicia. donde los lugares desiertos en la tierra van a ser manantiales de aguas, donde las montañas van a ser preparadas en el apocalipsis para que se baje la altura de las montañas, la profundidad de los mares va a cambiar completamente, la tierra va a ser como el paraíso restaurado. Estos hombres creen lo que dijo Isaías cuando Isaías profetizó acerca del Mesías, lo que él traía. Y en base a esa fe, ellos están clamando al Señor Jesucristo. ¿Quién sino el Rey? ¿Quién sino el Rey puede establecer la realidad del reino aquí en la tierra? Es el Señor Jesucristo. Y ellos experimentan una muestra, nada más una muestra, porque el Señor no está estableciendo su reino cuando viene primeramente, lo está anunciando. Dice, el reino de los cielos se ha acercado porque el Rey está allí. Arrepiéntanse porque el reino de los cielos está aquí. Así que, Mateo, al mostrar la evidencia de estos milagros, la evidencia de estos prodigios que el Señor está haciendo, está mostrando, está mostrando, estando una muestra del reino venidero, donde no prospera el pecado. Donde una persona que muera de cien años de edad, va a ser como un niño, y alguno que muera será considerado como uno que es maldito, así dice, porque no va a haber eso. aquí en la tierra, es lo que el Señor promete restaurar en el futuro. Si quieres saber más de eso, ahí están los CDs de Apocalipsis, hay 68 enseñanzas en cuanto a eso, ahí está explicado claramente. Que estos dos ciegos están llamando a gritos a Jesús basados en lo que Dios ha prometido a través de los profetas del Antiguo Testamento. Esto es fe. Esto es fe. Ellos seguramente se dieron cuenta que no podían cumplir con la ley de Dios. La ley les mostró su pecado. Pero ellos sabían que Jesucristo cumplió toda la ley. Ellos sabían que Jesucristo no había pecado. Ellos sabían que Jesucristo era el Hijo de Dios por los milagros, por las maravillas, por el mensaje que Él predicaba. Y en base a eso vienen a Él fundamentados en lo que Dios ha declarado de Él. Regresamos ahí en Mateo 9, verso 28. Llegando a la casa, vinieron a Él los ciegos y Jesús les dijo, ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron, sí, señor. Como que Jesús prueba la fe de ellos ahí. Le dice, ¿Ustedes creen que puedo hacer esto? ¿Qué dijeron ellos? Ten misericordia. ¿Jesús qué les dice? ¿Creen que puedo hacer esto? Ellos dicen, que sí. ¿Se acuerdan cuando al Señor Jesús le llevan al paralítico? Aquí es al revés. Lo del paralítico se ve al revés que como esto, pero es el mismo propósito. El paralítico lo traen al Señor. No se puede levantar, no se puede mover. El Señor no le dice, hey, es restaurado tu cuerpo, levántate. Le dice, tus pecados te son perdonados. Primero le perdona sus pecados, porque la necesidad primaria del hombre no es su sanidad física, sino el perdón de sus pecados. Y después, le dice, levántate, toma tu cama, vete a tu casa. Lo sana completamente. Le da músculos, nervios, todo, y ese hombre se para, puede caminar. Aquí le pregunta a ellos, ¿ustedes creen que puedo hacer esto? ¿Ellos por qué han clamado primordialmente en su confesión como son ciegos, leemos el texto rápido y asumimos, oh, están pidiendo que les dé la vista, pero no fue eso lo que ellos clamaron primero, ellos clamaron por misericordia. Y Jesucristo les da sanidad y les muestra su misericordia, les da las dos cosas. Recordemos que en ese tiempo todo mundo asociaba las enfermedades con el pecado. Así que cuando ellos piden misericordia, ellos han admitido. que están en pecado, así lo ven ellos. Así que su petición, aunque seguramente contiene el deseo de recibir la vista, no lo hace separado del deseo de ser perdonados por el Señor. Y a la pregunta del Señor Jesucristo, cuando le dice, ¿creen que puedo hacer esto? Inmediatamente los dos responden, sí, sin titubear, sin dudar, sin dudar. Inmediatamente dice, sí, sí creemos. Entonces, verso 29, Jesús les tocó los ojos diciendo, conforme a vuestra fe os sea hecho. Y aquí es lo que acabo de explicar hace un momento de la fe. Conforme a vuestra fe no es que tanto gritaste, conforme a vuestra fe no es que tanto lo deseaste, no. conforme a vuestra fe es esas declaraciones misericordia e hijo de david conectadas con lo que el antiguo testamento nos dice y porque lo conectamos los judíos la biblia que tenían era el antiguo testamento y nada más No había sido escrito el nuevo. ¿En qué creían ellos? En el Antiguo Testamento, en los profetas y en la ley. Allí está revelado. Estos hombres han creído. Han creído lo que la Palabra les dice desde Génesis 3, 15. Dios le dice a Adán y a Eva cuando pecan. que va a venir un libertador que va a ser de la descendencia de la mujer está hablando de Jesucristo y después habla con Abraham dice en ti serán benditas todas las naciones después con los hijos de Abraham después con Moisés y el Señor afirma y afirma y cada vez usted en el Antiguo Testamento cada vez es más claro que el Señor está hablando de Jesucristo llegó al libro de Isaías, Isaías un libro mesiánico por todas partes Habla de Jesús, Jesús, Jesús, el nacimiento original del Señor Jesús, la obra del Señor Jesucristo, la restauración de Sion a través del Señor Jesucristo. Estos hombres conocían eso. No podían leer, pero seguramente gente les leía a ellos. Su enfermedad no los separaba socialmente de nada. Participaban de la sinagoga y de todo lo que era social dentro de Israel. Y, by the way, era muy común la ceguera en ese entonces. Muy común. Muchos bebés nacían y por causa de enfermedades como la gonorrea, que es una enfermedad sexual, se transmitía esa enfermedad a sus ojos, no había medios médicos para limpiarlos y evitar que quedaran ciegos. Había tormentas de arena y a veces si la arena se mete en grandes cantidades a los ojos puede producir ceguera. Había infecciones que no sabían cómo tratar, mucha gente quedaba ciega, accidentes. No usaban goggles como cuando usted usa para trabajar y seguramente trabajando en la madera o en lo que sea. Era muy común la ceguera en ese entonces. así que no creo que son los únicos ciegos que el Señor sanó y perdonó seguro que hay más pero estos son los ejemplos que Mateo escoge para mostrarnos y conforme a la fe de ellos fue hecho Usted ha estado escuchando al Ministerio Radial de Iglesia del Valle Central con el Pastor y Maestro Enrique Zaria, Pastor de Iglesia del Valle Central Ceres, California. Las enseñanzas del Pastor Enrique están disponibles en nuestra página de Internet, iglesiadelvalle.com. Para más información o para recursos gratis visite nuestro sitio web iglesiadelvalle.com o llame al teléfono 209-872-9792 de martes a viernes de 9 a.m. a 1 p.m. La versión completa de este mensaje fue predicado en Iglesia del Valle Central en Ceres y lo puede encontrar en nuestra página de internet en iglesiadelvalle.com Subtítulos realizados por la comunidad de Amara.org
El Poder y Misericordia de Jesus parte 1
Series Mateo
Sept 5, 12
Jesús sale de levantar a la hija de Jairo de la muerte. Le da vida, se la entrega a sus padres y cuando sale de allí hay dos ciegos que lo siguen y a gritos dicen: ¡Ten misericordia de nosotros, Hijo de David!
Tener misericordia es mostrar compasión. Reconoce la necesidad del afligido, pero también tiene los recursos para suplir esa necesidad.
Sermon ID | 123181742471 |
Duration | 25:06 |
Date | |
Category | Radio Broadcast |
Bible Text | Matthew 9:27-34 |
Language | Spanish |
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