Efesios, Efesios 5, versículo 2. Y andad en amor, así como también Cristo os amó y se dio a sí mismo por nosotros. Ofrenda y sacrificio a Dios como fragante aroma. Amén. El título del mensaje es, En su muerte Cristo nos amó y se entregó. Dios nos llama a ser imitadores del amor, imitadores de la obra de Cristo. Como sus hijos, espera que le tomemos a Él como su ejemplo a copiar, para que nuestra vida no esté plagada de vicios, maldades y pecado, sino más bien llena del fruto del Espíritu, que es según el carácter de Dios. y por esta causa pone delante de nosotros el hombre que debemos ser el amor que tenemos que disfrutar y que tenemos que dar a los demás el sacrificio en el que tenemos que poner nuestra mirada para imitarlo pone delante de nosotros a Cristo porque Él es el príncipe de paz porque Él es la imagen misma de nuestro Dios y Padre. Cristo es el ejemplo máximo. En el fin último es que seamos como Él. A su semejanza. Y amados hermanos, ¿qué hacía Cristo en su sacrificio en la cruz? ¿Qué hacía Cristo en su sacrificio en la cruz? Vemos en el versículo 2. que se nos dice y andate en amor así como también Cristo os amó y este es mi primer punto en su sacrificio en la cruz Él nos amaba quiero que mire esto porque es importante que tú puedas asimilar que la muerte de Jesucristo en la cruz del Calvario es un testimonio de amor, es una evidencia del amor de Dios pero también el amor del Hijo su sacrificio fue una gran manifestación de amor sometiéndose Jesús voluntariamente a la muerte de la cruz se sometió a sus enemigos y en consecuencia se sometió al padre en todas las consecuencias que tenía que ver con ese sacrificio de amor dando un excelente ejemplo de lo que es el verdadero amor. El amor es un sacrificio. El amor es voluntario. El amor es sufrido. El amor no tiene envidia. Es sin jactancia. Es sin rencor. Así lo describe Corintios capítulo 3, el amor. Usted lee Corintios capítulo 3 a partir del versículo 3 y describe cómo es el amor. ¿Qué tipo de amor usted cree que estaba describiendo? El amor de Jesucristo. El verdadero amor de Dios revelado en su Hijo amado. 1 Corintios 3, 1 y 2 nos recuerda que cualquier sacrificio realizado sin amor no tiene valor. Aunque tú entregara tu vida, si no lo haces por amor, no tiene valor. Aunque tú dieras todo tu dinero a los pobres, si no lo haces por amor, no tiene valor. Eres como un símbolo que retiñe, un sonido hueco, sin sentido. Pero, queridos hermanos, aquí también, en Corintios 13, se nos habla del verdadero amor. Verdaderamente, Cristo nos amó. y se describe a sí mismo como la razón de su sacrificio ¿qué hacía él cuando moría en la cruz? nos amaba eso estaba haciendo, lo hacía por amor y nos llama aquí el apóstol Pablo en Efesios 5 2 a imitar ese amor andad en amor miren el mandato allí Andad en amor, caminen, amén. Y si alguien le pregunta, bueno, ¿y cómo lo hago, Pablo? Ah, así como también Cristo os amó. Andad en amor, sírvanse, cuídense, sacrifíquense unos por otros, como Cristo os amó. él nos llama a imitar el amor abnegado y con gran propósito de nuestro Señor Jesucristo él espera que el amor sea nuestra norma de vida andad en amor una norma de vida todo debe de ser hecho por amor todo debe ser hecho para amar Todo debe ser hecho con el fin último de que amamos, de que velamos por los otros. Si alguien te pregunta por qué haces tal cosas, la respuesta de nuestro corazón debe de ser por amor. Por amor lo hago, por amor al Señor, porque Él me dio de su amor, yo te puedo dar de ese amor. el amor abnegado de Cristo es nuestro ejemplo pero también es nuestra fuente de amar porque puedo amar hasta mis enemigos porque primeramente Cristo me amó a mí porque puedo perdonar a mis enemigos porque Cristo me amó y se entregó para que yo también fuera perdonado miren la razón el amor de cristo el amor de cristo lo que caracteriza tu vida debe de ser en tus pensamientos en tus palabras y tus hechos el amor el mayor amor es el amor de cristo así como cristo amó procura un amor el amor más excelente es el amor de cristo procuren ese amor Actúen, vivan, entréguense amando así como Cristo quien nos amó y se entregó. ¿Qué aprendemos de esto? Aprendemos que ser como Cristo en su sacrificio es amar de la forma negada que él amó. Ser como Cristo nos lleva a no esperar nada a cambio de los pecadores, a amar de forma sacrificial, a amar voluntariamente, a amar sin envidia, a amar sin jactancia, a amar sin rencor debemos de actuar como Cristo. Wow pero yo no puedo amar así diría alguien no puedes amar así porque no has conocido el amor de cristo lo primero que tienes que hacer es tú mismo recibir el amor de cristo tú mismo aceptar el amor de cristo en tu corazón tú mismo recibir su perdón tú mismo recibir su amor eso lo primero que tiene que suceder antes de que tú puedas amar como cristo Tú necesitas en tu corazón a Jesucristo. Eso es lo primero. Y Pablo está hablando de una iglesia que ya recibió el amor de Cristo. Por eso le dice, anden como Cristo. Entréguense como Cristo. Este es el secreto del verdadero servicio de amor a Dios. Es aquí el secreto del servicio al prójimo. es aquí el secreto de la obra de sacrificio de un hijo de Dios nosotros nos sacrificamos y amamos como Jesucristo porque él primeramente nos amó a nosotros y de su plenitud hemos recibido gracia sobre gracia y ahora podemos dar por gracia lo que ya recibimos previamente podemos amar porque Él nos amó primero podemos perdonar porque Él nos perdonó entonces veamos en segundo lugar qué hacía Cristo en su sacrificio en la cruz dijimos en primer lugar amar pero en segundo lugar dice el versículo 2 así como también Cristos amó y se dio a sí mismo por nosotros Cristo se dio a sí mismo por nosotros es un sacrificio en la cruz, es su sacrificio en la cruz, su entrega por nosotros cuando Pablo nos llama a ser imitadores de Dios al mismo tiempo guía nuestra mirada a la cruz, miran guía guía nuestra mirada hacia Cristo su sacrificio fue voluntario siempre fue una entrega de Él Él se entregó Él dejó de ganar para poder darle a otros Él dejó de recibir para poder dar vida a otros fue un amor sacrificial la palabra ofrenda hace referencia a una dádiva un presente que es dado a Dios con propósito definido de una forma voluntaria una ofrenda es algo voluntario que Cristo entregó su vida como ofrenda su vida misma fue una ofrenda de amor como sumo sacerdote él llevó una ofrenda, un presente al padre que consistía en su propio cuerpo, en su propia vida, la entregó ¿por qué? por nosotros, por nuestro pecado, él nos limpió, él nos sanó con su propia vida quitó la muerte nuestra y nos dio vida. Con su propio amor quitó nuestro enojo y nuestro odio y puso su amor. Su ofrenda fue perfecta. Su amor consumió toda la ira de Dios. Su amor consumió todo el juicio que a nosotros nos correspondía. Y estoy hablando en el sentido de aquellos que ha recibido a Cristo como Salvador. Toda persona que tiene a Cristo, la muerte de Cristo absorbió la ira que le pertenecía a Él, el juicio que le pertenecía a Él. Por eso ese sacrificio es tan importante para nosotros. Por eso es tan importante que tú recibas a Cristo, que recibas su amor. Porque si no lo recibes, te espera la ira de Dios, el juicio de Dios. El hombre, la mujer que no ha recibido a Cristo en su corazón como Señor y Salvador, le espera el juicio final. Ira sobre ira, ira sobre ira se va acumulando para el juicio final. Y el pecador sin Cristo, sin defensa, sin el amor, sin el sacrificio del Salvador, está condenado, no tiene esperanza. no tiene esperanza por eso cristo se ofreció en amor por esto cristo se dio en amor y de esa manera entró al lugar santísimo a entregar la vida del cordero su propia vida la cruz era ese lugar en que se haría el sacrificio el madero allí él recibiría toda la maldición y juicio de Dios como dice el apóstol Pablo en Galatas 3.3 maldito todo es que es todo el que es colgado en un madero haciendo referencia a deutronomio una maldición para Cristo maldito Cristo fue hecho maldito por nuestro pecado porque estaba llevando nuestra maldad y al mismo tiempo entregando su amor entregándose completamente dejando toda su vida en la cruz siendo consumido por la ira de Dios padeciendo el completo desamparo de Dios y la misma fue aceptada por Dios ese sacrificio y ese amor el padre lo aceptó perfecto un amor perfecto un aroma agradable un incienso que llena la casa de Dios y Dios se deleita en su muerte pero amado hermano esto es lo que Dios espera que tú y yo entreguemos eso es lo que Dios espera que tú y yo vivamos por eso dice el texto andad practicad el amor de Cristo y cómo fue el amor de Cristo el amor de Cristo fue un amor sacrificial voluntario de entrega total por lo tanto amados hermanos al tomar el pan y el vino considera esto considera que es una evidencia de su amor piensa en su sacrificio en la cruz piensa en su muerte y medita todo esto fue por mí porque me amó me amó a mí ¿y qué él hizo? derramó su sangre Tú nunca te has cortado en la mano, en un pie, y no has visto tu propia sangre roja. La sangre de Cristo roja fue derramada por nosotros porque nos amó. Recibe ese amor. Pídele a Dios, Señor, dame ese amor. Lléname de ese amor, un amor tan fuerte, tan valiente, tan poderoso, que entrega la vida por otros. Dame de ese amor. Quiero ser como tú. Que Dios nos conceda ese amor, ese amor abundante. Y mi querido niño, joven, sin Cristo, recibe ese amor. Recíbelo en oración. si no sabes cómo recibirlo pero deseas hacerlo acércate a mí al final del culto Pato mire yo quiero recibir ese amor yo quiero beber de ese amor comer de ese amor vivir en ese amor hablemos de eso acércate y pregunta yo quiero yo quiero caminar con Cristo y disfrutar de ese sacrificio que me da perdón de pecados y vida eterna dame señor de tu amor vamos hermanos a orar señor y dios gracias por tu palabra Porque en esta meditación podemos pensar en ese amor sacrificial, pensar en ese amor donde tú, Señor, diste más allá, diste más, Señor, más de lo que cualquiera de nosotros pudiera dar. en amor tu hijo se entregó para salvarnos y limpiarnos de toda maldad te alabamos padre te alabamos y bendecimos y rogamos que tú seas con nosotros Ayúdanos, Señora, a amarte. Ayúdanos, Señora, a entregarnos como Cristo mismo se entregó. Ayúdanos, Señora, a ser vivificados y gozosos, meditar en tu amor y disfrutar de ese amor y dar a otros de ese amor. Es en el nombre de Cristo que te lo pedimos. Amén.