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Primera de Corintios, capítulo 7, por favor. Primera de Corintios 7. Y aquí en Primera de Corintios 7, pues ya estamos en Entrando en este versículo, donde inicia a hablar acerca del repudio, del divorcio, como muchos de nosotros lo llamamos hoy en día, y dice la palabra de Dios así. Dice en capítulo 7, en el versículo 10, Pero los que están unidos en matrimonio mando, no yo, sino el Señor, que la mujer no se separe del marido y si se separa quédese sin casar o reconcíliese con su marido y que el marido no abandone su mujer y esta es la palabra del Señor. Vamos a ver siete pasajes por favor, siete pasajes en toda la Biblia que enseña lo que está escrito aquí en primera de Corintios siete. Estos son siete pasajes, ocho si contamos, hay muchos más, pero son siete que vamos a ver en este mañana. Número uno, vamos a ver todos, es importante que lo vean también en su Biblia porque voy a estar poniendo otra versión, si pueden hacer comparaciones, pero dice Lucas dieciséis, dieciocho, todo el que repudia a su mujer y se casa con otra adultera, el que se casa con la repudiada del marido adultera. Entonces lo que podemos ver aquí en resumen es que el hombre no puede repudiar, divorciar, escuchen esto, separarse. Porque el hombre es muy abusivo en su forma de pensar. Dice, es que yo no estoy divorciado. Nada más que dejé de vivir con ella y fui a otro lado. Es que la palabra repudiar es pues ya separarse. Y hay personas que dicen, no soy divorciado, soy separado. No hay diferencia. La palabra es repudiar, es abandonar. es dejar todo el que repudia a su mujer y se casa con otra adultera y el que se casa con la repudiada del marido adultera. No hay excepciones a esto. Yo sé que dentro de poco, pues, algunos van a decir, ¿pero qué tal si? ¿Pero qué hay si? ¿Y si le maltratan? Y hay un montón, pero lo que vemos en las Escrituras, por lo menos en este versículo, no hay ninguna excepción. Entonces, en resumen, el hombre no puede repudiar, divorciarse, separarse, ni tener segundas nupcias. Tampoco no puede casarse con una persona divorciada, aunque sea abandonada. Nosotros, yo creo que una de las razones principales, que nosotros hemos escuchado muchas veces, es que la verdad no fue de su culpa. No fue de su culpa, pues el hombre ese, la verdad, es muy malo. Por tan mal que sea, la palabra de Cristo es firme, que dice que no podemos una persona no puede casarse con una mujer repudiada, divorciada, etcétera, aunque sea abandonada, aunque no fue su culpa y viceversa. Y eso es lo que claramente enseña Lucas 16, 18. También Marcos dice así, dice, levantándose de ahí, en Marcos 10, versículos 11 y 12, levantándose de allí, Vino la región de Judea al otro lado del Jordán y volvió el pueblo a juntarse a él. Y de nuevo les enseñaba cómo solía. Y se acercaron los fariseos y le preguntaron para, fíjense lo que dice aquí, para tentarle si era lícito al marido repudiar a su mujer. Incluso en comparación con Los saduceos eran completamente liberados. Ellos nada más decían creer nada más en el penteoteuco, pero de plano pues eran inconversos y eran los más liberados que había. Pero incluso dentro de los fariseos, la mayoría, si no todos, la mayoría eran incrédulos, con excepción con los que se convirtieron, como Nicodemo y otros. Pero ellos, había gran diferencia de opinión en cuanto al matrimonio. Muchos de los fariseos enseñaban que se podía divorciarse en casos pues muy graves, como lo que era el adulterio. Mientras que otros enseñaban que, son versículos que vamos a ver en unos momentos, que si había algo que no te gustaba en ella, que esa era la razón suficiente para dejarla. ¿Por qué? Porque su enseñanza era basada en sus propios deseos y ellos pues querían pues querían tener pues nueva esposa cada rato, querían estrenar, querían y por esa razón decían que si se le quemaban los frijoles y ya querías dejarla que ya era motivo suficiente pero lo que dice aquí es Él respondiendo les dijo ¿Qué os mandó Moisés? y ellos dijeron Moisés permitió dar carta de divorcio y repudiarla fíjense que eso era su postura Moisés Ellos están hablando de Deuteronomio capítulo 24, pero Moisés no escribió nada más de Deuteronomio capítulo 24. ¿Qué más escribió? Pues escribió Génesis, Éxodo, Levitico, Números de Deuteronomio, y todo era palabra de Dios. Pero en lugar de basarse con lo que enseña Génesis 2, que es el origen, que es la base, que es donde el matrimonio fue instituido, en lugar de ir al pasaje principal, ellos se fueron a un contexto medio difícil de interpretar, de casos muy difíciles, y ahí se dejaron fuera de contexto unas palabras para decir, no, pues él dijo que sí. Y hoy en día sigue pasando lo mismo. Pero ya no dicen, es que Moisés dice, ahora dice es que mi pastor me dijo. Es que tal maestro, tal libro dice así. Y la verdad es que seguimos, en lugar de ver lo que es, lo que toda la palabra de Dios dice al respecto, en lugar de irnos a la base, el fundamento del matrimonio que es Génesis 2, Estamos yendo a escuchar más bien lo que queremos, la respuesta que queremos escuchar. Cuando hay problemas en el matrimonio y se va con una persona y les da consejos sabios, diciendo que deben orar y permanecer y pelear por su matrimonio, no es así. Muchos de ellos van con uno que les da mal consejo y dicen, ese sí es buen consejo. Entonces, hermanos, lo que quiero decir es que cuando tenemos problemas matrimoniales, siempre tenemos que regresar a Génesis 2. Cuando nosotros sentimos el reto y vemos que hay pruebas y que se pone muy difícil, tenemos que estudiar mucho, aparte con todo lo demás del consejo de Dios, pero en especial Génesis 2 y mira lo que dijo el Señor Jesús. respondiendo a Jesús les dijo por la dureza de vuestro corazón os escribió este mandamiento que si hay un versículo que vamos a estudiar que si tiene que ver con una alusión de un contexto pero la razón porque se escribió no era porque era la voluntad de Dios original sino porque había tanto pecado y el pecado es como una bola de estambre que a veces se hace tan enredado, tan sosnudo, que ya es imposible desenredar. Y dice, por la dureza de vuestro corazón, o se escribió, pero al principio de la creación, ¿qué capítulo, qué libro? Varón y hembra los hizo, ¿capítulo? Dos. Dios instituyó el matrimonio para que seamos unidos y la razón principal por lo cual divorcio, separación, como lo quieres llamar, repudio, la razón porque es pecado es porque no están obedeciendo el principio aquí de unirse a su mujer. Esa es la voluntad de Dios en nuestras matrimonios, en todo. Físicamente, socialmente, en amistad, espiritualmente debemos estar completamente unidos. Dice y los dos eran una sola carne, así que ya no son más dos, sino uno. Por tanto, lo que Dios juntó, y eso es por el matrimonio, no lo separe el hombre. Entonces, en casa volvieron los discípulos a preguntarle de lo mismo. Debemos recordar que los discípulos en ese momento eran nuevos. apenas están siguiendo al Señor Jesús y ya tenían años escuchando los pariseos, diciendo, no, pues por este caso te puedes divorciar, por este y por este y un sinfín de razones. Y cuando sus discípulos escucharon eso, dicen, pues eso no fue lo que me enseñaron allá en la sinagoga. Yo escuché todo y eso sigue pasando cada vez que se da estos temas siempre se comete. Pero allá donde iba yo, yo no escuché eso. Pero lo que vemos aquí es que cuando le preguntan, Jesús les dijo claramente, cualquiera que repudie a su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra ella. Y si la mujer repudie a su marido y se casa con otro, comete adulterio. Y esto es a lo que estaba yo mencionando. que en Lucas nada más dan del lado y de perspectiva del varón porque ese es el caso por lo menos en Israel ellos eran que promovían pues mucho esos tipos de movimientos pero Marcos que fue escrito a los gentiles y donde las mujeres están mucho más por decirlo así que vienen de religiones paganas y pues también ellas son la causa por lo cual que ellas también repudian a sus maridos y ellas también son la causa de que buscan a otros hombres y Cristo dice sea el hombre o sea la mujer es pecado tanto separarse, divorciarse y también es pecado segundas nupcias ahora Lo que yo recomiendo es que mientras que estudiamos todos estos versículos, no estamos haciendo un ataque a todas las personas que, pues, tienen uno o dos o tres matrimonios y decir que ellos son menos como hermanos o algo así. No. Porque muchos, y la verdad es, es que puede ser en nuestro contexto que hasta la mayoría ya vienen de pues uno, dos, tres diferentes matrimonios y segundas, terceras nupcias. Y lo que debemos hacer es decir gracias a Dios, gracias a Dios que también la sangre de Cristo es suficiente para perdonar todos los pecados incluyendo este, número uno. Porque lo que no queremos hacer es empezar a dar pretextos de nuestra vida pasada y decir, no pues, pero la verdad es que cuando Cristo salva personas, como vimos en 1 Corintios 7, lo salva de contextos muy feos, trasfondos de fornicarios, de adúlteros, incluso de homosexuales, y dice que así éramos. Pero ahora ya no. Entonces cuando Cristo salvó a varios de los corintios, pues ya habían pasado a diferentes matrimonios. Pero cuando el Señor los salvó, así les perdonó de todos sus pecados, y así se debe llamar. Les puedo dar un ejemplo muy bueno, cuando empiezo a hablar de mi pasado y de mi vida sin Cristo, o doy mi testimonio a algún lado, luego mis hijos dicen, pues yo no sabía eso. O luego tienen otra pregunta, oye papá, tú cuando fuiste también, así como dice la Biblia, así lo hiciste, y les digo, hijo e hija, la verdad, no, no, pues no, no, era yo rebelde, yo no seguía la palabra, ni lo tenía, ni lo leía. Pero eso no te da razón ni pretexto de decir, como mi papá y mi mamá salieron bien, Porque eso es lo que pasa. Lo que pasa es que hay padres que dicen, bueno, no es lo ideal, no es lo ideal. Hay mucho espacio, pásame, por favor. Dicen, no es lo ideal, pero pues... Y lo que pasa es que hasta los hijos ven, y cuántas veces lo he escuchado, es que mis papás me dieron permiso de salir con un crédulo, Porque también cuando mi mamá conoció a mi papá era increíble. Y mira, ahora también hasta están sirviendo al Señor. ¿Sí me explico? Tenemos que llamar pecado lo que es pecado. Y sí, pero gracias a Dios, gracias a Dios, así perdonó ese pecado. Y ahora les vamos a enseñar a ustedes. Lo que hicimos era mal, pero Cristo nos redimió del mal. Y ahora queremos enseñarles que eso no es el camino que debemos seguir. Y eso es lo más apropiado, hermanos. Entonces, por favor, damos gracias a Dios que a muchos de nosotros que hemos venido de una vida pasada de puro pecado, nos ha redimido. Y eso incluye a las personas divorciadas. Entonces, dice así, También podemos ver en Mateo 5.32 y Mateo 19.9. Ahora, estos son los versículos que se llaman las cláusulas de excepción. Así se llaman en los libros teológicos. Y la razón por qué se llama así es porque si estudiamos el Evangelio de Juan, nada más dice que él no puede y no te dan ninguna excepción. En Lucas, como vimos, dice el que, dice, en Lucas dice, todo el que repudia a su mujer y se casa con otra adultera. Cuando vamos a Marcos dice, en el versículo 11, cualquiera que repudia a su mujer y se casa con otra comete adulterio contra ella. No hay excepción. Cuando vamos a Juan dice lo mismo. Pero cuando llegamos al libro de Mateo, tanto en el capítulo 5 como en el capítulo 19, en los dos ejemplos dan excepciones. Dice así, también fue dicho, cualquiera que repudie a su mujer de la carta de divorcio, así enseñaban los del basal, así enseñaban los fariseos. Pero yo digo que el que repudia a su mujer a no ser por causa de fornicación hace que ella adultere. Y el que se casa con la repudiada comete adulterio. Capítulo 19, versículo 9. Y yo digo que cualquiera que repudia a su mujer salgo por causa de fornicación y se casa con otra adultera. el que se casa con la repudiada, adultero. Ahora, en los dos, la palabra salvo aquí, en otras versiones es excepto, por eso. Lo que debemos notar, número uno, es que esas excepciones nada más aparecen en Mateo y hay que preguntarse por qué. Número dos, y esto es muy importante, número dos, estas excepciones, nada más es una excepción en el contexto del divorcio, no en el contexto de volver a casarse. Lo voy a repetir y voy a dar un ejemplo. Cuando dice, a no ser por causa de formicación, cuando dice, salvo por causa de formicación, los que ocupan esto, dicen es que pues mi esposo fue infiel entonces yo puedo casarme con otro porque de por sí mi esposo pues me caía mal y de por sí tenía yo mi ojo puesto en ese que me parece mejor y como me fue infiel ahora voy con él el versículo cuando habla de la excepción la excepción nada más se refiere a a dejar de estar unidos. Pero no dice que en el caso de fosnicación, en el caso de inmoralidad sexual, que en esos contextos ya se puede volver a casar, sino dice todo lo contrario. Dice que el que se casa con la repudiada comete adulterio. En los dos, tanto 532 como 199, en los dos dice el que se casta con la repudiada cometa del ser y entonces ni siquiera en el caso de la excepción no te da permiso de volver a casarte ahora vamos a verlo en pues aquí en corintios en unos momentos y explicarlo un poco más pero la pregunta que hacían los pariseos estaban basándose en Deuteronomio 24. Y en Deuteronomio 24 1 al 4 es donde ellos pues sacaban su versículo donde decían que sí se puede divorciar. Dice Deuteronomio 24 1, cuando alguien toma a una mujer y se casa con ella, si sucede que no le es agradable porque ha encontrado algo reprochable, También otras palabras, Reina Valera 60 dice, algo indecente. Hay otros sinónimos en otras versiones. Hay uno que dice algo que no es de su agrado. Y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la despide de su casa. Y ella sale de su casa y llega a ser mujer de otro hombre Si el segundo marido la aborrece y le escribe certificado de divorcio, le pone su mano y le despide su casa, o si muriera ese último marido que la tomó para ser su mujer, al primer marido que la despidió, no le es permitido tomarla nuevamente como mujer, porque ha sido despreciada. Pues esto es abominación ante el Señor. no traerás pecados sobre la tierra que el Señor tu Dios te da por heredad. Entonces, número uno, en Deuteronomio 24, el contexto es que una persona que estuvo casado con una mujer se separa de ella ella se va y se casa con otro y después ellos terminan peleados y este dice, ¿sabes qué? pues ya me animé otra vez porque yo también fui por mi lado y la verdad pues ahora con quien estoy casado ahora peleo más pues ahora estoy pues mi primer matrimonio era el cielo en comparación con esta entonces mejor regreso y tomo la primera Dios dice que no es así No estamos jugando de separarse y después ir con otro y después regresar al primero. No es así. Es abominación delante del Señor. Veamos, por favor, Jeremías 3.1. El que lo encuentra, por favor, si se puede leer. 3.1. 3.1. Dice, Según lo dejare a su mujer pidiéndote y yéndose, estar de él, se juntar a otro hombre, volverá a ella más, no será tan tierra del todo amancillada, tú pues has convictado con muchos amigos, más envuélvete a mí, dice Jehová. Más envuélvete. Mira que hemos hecho esto. El Señor hace una pregunta. Debemos recordar que todo el matrimonio tiene verdades espirituales en Cristo y la Iglesia. Y lo que dice aquí es, es que si Israel, así como nación, se va atrás las idolatras, y va atrás sus dioses falsos, y va atrás Baal, dice Dios, una persona puede estar con otra persona, dejarlo, ir con muchos otros y después regresar a la misma persona, dice Dios, no. Dice, no será esa tierra toda amenciada, así por la abominación, por el pecado, por la infidelidad, ya no. Pero Dios dice, aún así, yo los estoy llamando y les estoy diciendo, regresense. ¿De qué se trata el libro de Osea? Dios le dice a Osea, pues esa mujer Gomer, que es tu esposa, pues ya se fue de prostituta. Ahora yo te mando, ves con ella y cásate con ella. ¿Por qué? Porque Dios quería dar una ilustración de qué tan difícil es estar casado con una persona adultera, y a la vez de dar una ilustración de lo sagrado y lo permanente y eterno es que es el matrimonio. En otras palabras, no podemos tomar del cronomio 24 para enseñar a las personas, sepárense, divorcense, porque eso nunca fue la intención original Cuando se escribió esto, tanto el Espíritu Santo por medio de Moisés, no fue así escrito para animar a personas a que se separen. Ah, ¿no te gusta eso? No, pues ya déjala. Pues ¿para qué vas a seguir sufriendo y padeciendo? No, pues mejor es estar solo que mal acompañado, ¿no? Algo parecido, no. Cuando se escribió Mateo 24, eso no fue la intención. La intención fue para enseñar que es abominable. A Dios le aborrece la idea de que un hombre deja a su mujer, ella se va con otro y después todavía ella regresa a estar con el mismo otra vez. Eso es el motivo, pero ellos nada más vieron esa frase. Vean, por favor, Deuteronomio 24, en Reina Valera, y vean la diferencia que lo que yo tengo en rojo, y este es la Nueva Biblia, la Preamérica de hoy, y compáralo con Reina Valera 60. Lo de sesenta dice, donde está en rojo, dice, y podrá, ya vieron esa frase, y podrá, ¿qué dice ahí? Podrá casarse con otro. Lo que hicieron fue, así, esta versión está diciendo, no está dando permiso, sino está diciendo que pasa en el mundo. Si ella llega a ser esposa de otro, pero la forma en que lo dice, en la sesenta por ejemplo, es que al parecer está dando permiso. Pues ves adelante, déjalo y ves con otro. Y así lo tomaban los fariseos. Y nada más estaban viendo la frasecita. Es que la Biblia dice, cásate con otro. La Biblia dice, cásate con otro. La Biblia dice, cásate con otro. y Jesús dijo no, fíjese que en Génesis 2 no dice cásate con otro, dice únete con tu mujer dice no te separes dice son, ya no son dos son una, eso es lo que es entonces Cristo estaba enseñando lo importante de esto, entonces número uno si Yo no estoy diciendo que la versión 60 es una mala traducción. Si lo pensaron así, perdóname. Pero quería mostrarse la diferencia entre estos dos, porque quería enfatizar eso. Pero número uno, hasta Cristo dijo, Moisés lo permitió. Entonces, esta traducción podrá, en sí, no necesariamente es mal, porque hasta Cristo reconoció que si había un permiso otorgado, número uno. Número dos, es que lo que está diciendo es que en este contexto, y podemos encontrar otros, se recuerdan cuando, pues ahí estudiamos en el final del libro, que ya se habían casado con un montón de, pues de gentiles paganas, y pues, pues la dejaron, Si encontramos casos en la Palabra de Dios donde vemos que abandonaron, pero a la vez no estamos diciendo que Dios los está animando, que Dios los está dando como un ejemplo que seguir, sino que enfatizaba el pecado que había en ese tiempo y las consecuencias del pecado. Entonces, también lo que vemos aquí es, número dos, es que nunca fue la voluntad original de Dios. Porque como se ha enseñado, la voluntad de Dios es, se unirá a su mujer, y ya no son dos, sino uno mismo. Y esto es la última. Y esto es muy interesante, y yo metí esta nota para ser práctico, porque muchos me hacen esta pregunta. Esto también implica que si una pareja si ya están divorciados, ya se volvieron a casarse con otros, que no deben divorciarse otra vez para volver con su pareja, su cónyuge original. A lo que voy es que si predico el Evangelio a Pedro y a y a Lola. Ellos reciben a Cristo y dicen, ¿sabes qué?, pues yo ya me divorcié y ahora pues estoy casado con ellos. Ellos dicen, yo también. Se imagina que yo digo, ¿sabes qué?, pues como están divorciados, porque así lo enseñan muchos, tu matrimonio verdadero, ocupan un término así, ¿Cómo se llama tu primera esposa? ¿Y dónde vive? Ah, pues vive hasta allá. Ah, pues tienes que dejar a ella, a Lola, y ahora tienes que regresarte con la primera. Eso no es bíblico. Muchos lo enseñan así. Y lo que piensan, y lo que están enseñando es, es que ahora divorciate otra vez para volverse con la primera, y lo único que están enseñando es poner más pecado encima de los pecados que ya están tiene nada más unos días que una persona me llamó para preguntar y dijo es que ya se volvieron a casar y ya tienen hijos pero su pastor les dijo que tiene que que ella tiene que porque el otro nunca ha sido casado pero ella si se casó con una mujer pues ya madre soltera con sus hijos, ya divorciada, y dijo, ahora déjalos y vuélvete con tu primer esposo que está en otro lado. Y yo dije, a ver, ¿cómo te dije? Que no, dijo que los dejara. Y los niños, dice, también, que los deja. Y yo dije, no, es que lo que estamos viendo es que tenemos que conocer lo que dice toda la Palabra de Dios y poner un pecado encima de otro, no es bíblico. No es bíblico. Entonces, en eso, por eso estaba yo enseñando desde el principio. No debemos dar pretextos por nuestros pecados pasados. Hay que confesarlo a Dios. Hay que confesarlo incluso delante de nuestros hijos, de nuestros hermanos. ¿Sabes qué? Lo que hice antes estaba mal. Pero cuando Cristo me salvó, ya estaba yo con tal persona y con esta persona debes ser fiel hasta la muerte de ahí en adelante. No deben poner otro pecado encima de otro y hay muchos ejemplos de personas que vienen a Cristo y ahí vienen arrepentidos y dicen, no pues ya fui divorciada ya tres veces y con la persona con quien vivo ahora pues no es mi marido, no es mi así entonces la respuesta bíblica es difícil porque ya hay mucho pecado por donde quiera pero la respuesta es esto cásate bien dejen de estar en fornicación y sean fieles a la muerte o sepárense porque no pueden seguir en fornicación como están y la verdad ya cuantos pecados pero estar buscando quien es el a regresar a la primera persona, no es. Lo que enseña aquí es todo lo contrario. Lo que enseña el Deuteronomio 24 es que no puedes regresar con el primero. No se debe. Es algo que no agrada a Dios. Yo sé que habrá muchas preguntas después y lo pueden hacer después del estudio. Dice Romano 7, por favor, 2 al 3. Ya vimos que en Lucas enseña que no hay excepción, no se debe repudiar, no se debe volver a casarse. También dice lo mismo Marcos, también dice lo mismo en Mateo y Romano 7, que ni siquiera es un contexto de enseñanza del matrimonio, sino de Sanctificación, pero dice así, pues la mujer casada está ligada por la ley a su marido mientras él vive. Pero si su marido muere, queda libre de la ley en cuanto al marido. Así que, mientras vive su marido, será llamada adúltera si ella se une a otro hombre. Pero si su marido muere, está libre de la ley. de modo que no es adúltera aunque se una a otro hombre. Y lo que vemos, esto ya no es los profetas, ya vimos lo que enseñó Cristo, pero ahora vemos Pablo en los Epístolas, en especial a la Iglesia, dice que lo único que disuelve el matrimonio es la muerte del cónyuge. No es Yo no estoy animando a nadie a maltratar a su esposa, por supuesto, pero no es que me maltrate, que no me siento digna como una mujer por su maltrato, es que me pega, me hace eso, me hace aquello. La verdad es, lo he enseñado y lo voy a seguir enseñando, que si en verdad está haciendo algo ya criminal, y si se anima a ellas a reportarlo a las autoridades pero eso no es pretexto de decir ya no quiero estar casado con esa persona porque también cuando estuvo ahí haciendo sus votos también los mismos votos dice hasta la muerte o que el Señor me llame a su presencia esos son los votos que se hacen y cuando usted se comprometió con esa persona pues también fue buenas y malas y muy malas y a lo que voy es que hay personas que hasta se casan con incrédulos y dicen no es que toma mucho y me pega y me hace eso pero también usted tomó la decisión de casarse con esa persona Y por esto constantemente estamos duras y dale que no lo hagan. No lo hagan, es en contra de la voluntad de Dios. Y ahora que no le gusta su trato, ahora se quiere quejar. Y no estoy diciendo que no hay creyentes que también que lo hagan, porque sí, hay creyentes que lo hagan. Pero eso lo trataremos. Vamos a seguir en el contexto en que estamos. Pero el resumen es que el matrimonio es hasta que la muerte nos separe. 1 Corintios 7.39 que es el capítulo que estamos estudiando. La mujer está ligada hacia el matrimonio, ligada a él, mientras el marido vive. Pero si el marido muere, está en libertad de casarse con quien desee. sólo que sea en el Señor. Así el famoso frase de la Reina Valera, con tal que sea en el Señor. Y así es. Pero lo que se enfatiza aquí es que lo único que disuelve el matrimonio es la muerte de uno de los dos. Y de nuevo, suena chusco y chistoso, pero no estamos animando a ninguna persona a pedir al Señor que se lo lleve. ¿Verdad? No es la voluntad de Dios. Y la razón por qué lo digo es porque la carne se atrapa de muchas formas. La carne se atrapa de muchas formas y dice, no, pues ya entendí que hasta la muerte se lo lleve. y todo el tiempo están orando Señor pues ya llévalo Señor ya llévalo y lo que pasa es es que se queda pensando tanto se queda uno pensando tanto tiempo en cómo será mi vida diferente si él no estuviera que empieza el famoso la ilusión y empiezan con su mente a imaginar y vivir. Más si ven las novelas, olvídese. Empiezan a decir, no, pues cómo será, porque estará pues estar... Y cada persona que ven lo empiezan a imaginar en su mente y eso los corrompe y cuando llegan a la casa es peor, porque el maltrato aumenta más. Yo lo estoy diciendo tanto de las mujeres como de los hombres, para con las mujeres, porque la ilusión puede destruir su matrimonio. Y lo que yo quiero proclamar es que la verdad de Dios es que tu cónyuge, por tan mal que sea, tan mal que lo califica, etcétera, no es la mejor persona del mundo. pero si es la mejor persona del mundo para ti porque ya se casaron. Así uno puede decir, no pues él es así, él es así, con todos sus defectos. Es la mejor persona para ti porque se unieron en matrimonio. Y tal vez, yo no quiero desanimar a nadie, pero a muchos nos ha llamado a sufrir el Señor, porque muchos dicen así, que no creo que Dios quiera que sea yo infeliz. ¿Cuántas personas han dicho eso? Y yo digo, sí, sí, puede ser, puede ser. Algunos pasan toda su vida cristiana enfermos. ¿Yo estoy enseñando que Dios desee que todos los creyentes sean enfermos? No, yo no enseño eso. Pero hay casos que es la voluntad de Dios para algunas personas y los ha llamado a sufrir y esperar en Él y pasan muchos años así. ¿Y saben qué? Hay veces que por medio de la locura y carnalidad de su cónyuge, a veces el Señor te santifica así. En especial, no les voy a decir Les voy a contar un testimonio de una persona que yo conocí en la calle de Nueva York. Y dijo, no, sabes qué, yo ya tengo muchos años de estar soltero. Y yo me quedé. Es que es muy simpático, es muy llamativo. Era algo famoso donde yo estaba. y ya estuvo con él a solas. Y yo dije, ¿por qué nunca te casaste? ¿Por qué nunca te hiciste? Dice, uff, si te dijera. Si te dijera. Y yo dije, ¿qué? Dice, mira, te lo voy a platicar en breve. Dice, era yo tan fornicario de incrédulo y cuando el Señor me convirtió así siempre deseaba casarme. y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise, y lo quise para enseñarme qué tan sagrado y qué tan hermoso es el matrimonio. Y casado nunca lo hubiera aprendido. Yo no me estoy diciendo de su caso, de su vida, ¿verdad? Yo no estoy diciendo que sí pasa con todos. Pero hay veces que por medio del matrimonio ayuda mucho a santificarnos. las diferencias que tenemos, incluso los pleitos. Los pleitos y discusiones no son para separarnos más y para que lleguemos a ver. No, es para ver. Así cada vez que dices, es que no lo soporto, no, no, no lo aguanto. Cada vez que lo piensan en sus mentes, nada más piensen en cómo es posible que el Señor nos ha soportado a nosotros. Y si el Señor pudo hacerlo con nosotros, créeme que usted lo puede hacer con esa persona tan mal que sea. Y hay personas que dicen no, y la verdad no todos somos iguales. Hay personas que tienen la dicha y la bendición de tener esposas muy sumisas, esposos muy buenos líderes, muy piadosos, pero no todos. Y algunos padecen eso. para dar gloria a Dios. Como Osea tuvo que soportar a Gómez y dar gloria a Dios, así también a veces nosotros. Entonces no se desanimen cuando su esposo es carnal y rebelde. No se desanimen porque están imitando a su Señor. Así sigue orando por él, no pierde así la confianza. 1 Corintios 7, 15 dice, sin embargo, esto es muy importante porque se saca fuera de contexto, mucho se saca fuera de contexto. Sin embargo, si el que no es creyente se separa, que se separen. En tales casos, el hermano o la hermana no están, Reina Valera dice, sujetos a servidumbre. significa no están obligados, sino que Dios nos ha llamado para estar o vivir en paz. Ahora, muchas personas dicen, estoy casado con un incrédulo, pero es que no se quiere reunir, no le gustan las cosas de Dios, Entonces mejor me divorcio, me separo y busco uno que es creyente que si quiere ir. Y la palabra de Dios dice no, porque el matrimonio no es regla nada más para creyentes, es regla para todo ser humano. ¿Qué dijo Juan al bautista, al rey Herodes cuando clamaba y le decía sus cosas? ¿Qué decía? ¡No seas lícito! ¿A poco era escuela dominical? No. Él lo predicaba a un incrédulo. Hace falta más Juanes. Ya tenemos mucho, pero hace falta más. Hace falta más Juanes. ¿Por qué? Cuando estamos platicando con las personas del mundo, ahí están hablando, no, es que mi mujer, es que no, pues ya me gustó esta. Hay que hablarles y decirles como Juan les dijo, hay que decirles de la convicción del pecado. Muy importante. Y la verdad, esto fue el motivo principal que le llevó a su muerte. Y vamos a perder muchos amigos si así hablamos. Muchas amistades. Pero Juan, pues, perdió su vida. ¿A poco no podemos perder amistades por hablar la verdad? Hablamos con amor, no para juzgarlos, sino para buscar que conozcan a Cristo. Entonces, en resumen lo que podemos ver aquí es, si un creyente tiene un cónyuge inconverso, si quieren seguir juntos, dice el Señor, no los dejan. Están legítimamente así unidos en matrimonio, no los dejan. Así, si ellos quieren permanecer juntos, así puedes dar gloria a Dios siguiendo fiel a esa persona, aunque sea incrédula. Ahora, esta es la parte difícil. Pero si no quieren seguir juntos, no está el creyente obligado a permanecer con tal persona, sino estar en paz. Entonces, algunas personas, si no hubiera esta cláusula aquí, Ellos saben que toda la Palabra de Dios enseña que el Señor odia el repudio y el divorcio. Entonces, si una persona es incrédula y ya se quiere ir y divorciarse de Dios, ya no te aguanto. No te puedes ir. Tienes que quedar conmigo. ¿Por qué? Es que la Palabra de Dios enseña que Dios no puede estar divorciado. No dice Dios. No estamos aquí para que se maten entre ellos. Si Él se quiere ir, que se vayan. Pero hermanos, escuchen esto. Es lo mismo que enseña Mateo 5 y Mateo 19. Eso no nos da la razón ni el lujo de decir, pues mejor vete y vete más rápido para que busque a otro, porque no dice, no dice que cuando Él ya se fue, ya no están casados. Dice que tal persona tiene que quedar sola o reconciliarse con tal persona. Así no es que el incrédulo puede irse para que ya se pueda casar con un creyente. Eso no es lo que Dios enseña. hay que estar fiel a esa persona y si él, por la dureza de su corazón, no quiere permanecer en la casa y dice, no, es que yo no puedo estar escuchando aleluya en la música todo el día, yo ya me voy y se va, eso quiere decir que hay que seguir orando por esa persona, pidiendo a Dios por esa persona, llamándolo de vez en cuando, decir cómo está, he estado orando por ti y etcétera, etcétera. Pero hay algunos que tienen la idea... No, yo no firmo. Porque yo soy cristiana y Dios dice que yo no me puedo divorciar. Yo no firmo. Si tú quieres, quiero. Pues haz lo que quieras. No, dice Dios, no hay que estar peleando. Firma, es un papel. Fírmelo. Pero hay que dejar la amistad abierta para seguir testificando y seguir hablando. Otra historia hermosísima que yo y Jenny conocimos cuando apenas veníamos a la obra misionera. La verdad es que no quisimos enredarnos en los negocios de este mundo. Ya sabíamos que queríamos servir al Señor a los extranjeros y eso de conseguir casas y comprar carros y todas esas cosas, pues no. Vivimos en un garaje de una persona que nos prestó. Un garaje y cuando una persona nos vio ahí, dice, ¿qué hacen ahí? Y dice, no pues, que estamos orando para que el Señor nos envíe y no queremos gastar nada. Dice, pues yo tengo, yo tengo lugar donde puede quedar. Y ahí estamos sentados y cuando fuimos, es una hermana que no tenía muchos años, pero era muy fervorosa. Y dice, no, pues te presento a mi esposo. Y yo esperaba, pues un hombre, un gran hombre de Dios, algo así. Te presento a mi esposo. Ah, pues yo soy incrédulo. Y quedamos fríos, diciéndonos. Qué raro, ¿no? Y después dice, fíjate, fíjate, y ella delante de él, dice, déjeme decirte mi testimonio. Como incrédulo, peleando, lucha, nos queríamos matar, ahí estaba. Y ya nos divorciamos, nos terminamos aborreciéndonos, y pues yo me dediqué a trabajar, usted también y ahí daba vuelta y ya que muchos años después que hubo un evento ahí de los trabajos y los dos estaban ahí y hasta hubo nervios porque se terminaron la saludos, no la saludos, qué le digo y ya de por sí cuando se vio hubo contacto de ojos y se saludó y ya que se acerca, ella ya creyente Oye, ¿cómo están? Bien, bien, bien. Ahí están. Cuando platican, nunca se volvieron a buscar a otra persona. Nunca se volvieron a casar, ni siquiera se dieron, y pasaron años. Y ella dice, ¿sabes qué? Pues yo me entregué al Señor. Ah, ¿de veras? Ya no soy esa mujer que conocí, gracias a Dios. Ah, pues, me gustaría conocerla nueva. Y se quedó. Pues, ¿qué tal si salimos el viernes, no? Y que se vuelven a unir y casarse. Y ahí están todavía siguiendo. Y él nunca se convirtió en verdad. Pero ahí estábamos en la casa y lo hablamos y él respetaba. Todos dicen, la verdad, excelente por ustedes, pero a mí, no, no. Nada más, déjame escuchar nomás y yo feliz. Y la verdad es que su matrimonio era una bendición de Dios y algo muy hermoso. Pero muchos enseñan aquí que Dios dice que si el incrédulo que se vaya, eso sí está en la Biblia. Lo que no está en la Biblia es el otro paso que muchos añaden. Y lo que añaden es que si lo vas a dejar ir, pues también tienes que quedar soltero como yo, dice Pablo. O reconcídese. Esos son los únicos dos. Entonces, tomar Mateo 24 para decir que yo puedo casarme con otra, yo puedo casarme, no, ya no me gusta, ahora voy a... Es que no va con todos los demás versículos de toda la Biblia. Y los fariseos nada más aplicaban esta. Entonces, Leo dice, pero no atorga al creyente el permiso de casarse de nuevo. Esto concuerda con Mateo 5.32 y Mateo 19.9 La cláusula de excepción se aplica para divorciarse, pero no para segundas nupcias. Así, y esto lo digo con todo mi corazón, si ya no aguanta, si ya no aguanta los adulterios de su esposo, de su esposa, así Dios no te anima, Dios no te anima a separarte ni divorciarte. Si lo llegas a hacer, dice Dios, quédate soltera, siguiendo orando por Él, siguiendo pidiendo de Dios por Él, quedar sola o reconciliarse con tal persona. Pero nunca dice, y aquí muchos le añaden y dice no, pues la vida dice que si se quiere ir, que se va y luego lo aplican a esta persona ya creyente que es peor todavía entonces pues el segundo tema vamos a tardar en ver todo pero aquí en su día seguiremos con el tema pero lo más importante es este hermano es aplicar el evangelio a nuestras matrimonios aplicar el evangelio ¿qué es el evangelio? Dios dijo, yo no tengo por qué soportar tus fornicaciones. Ustedes se han amantillado, se han ido con cada Dios pagano, y dice, pero aún así, vuélvete a mí. Y gloria a Dios por los hermanos y las hermanas, que han soportado infidelidades muy fuertes. Y aún así, en obediencia al Señor, se han permanecido fieles. Y dice, bueno, gloria a Dios por esas personas. Yo sé que todos tienen, pueden escribir libros grandísimos de todas las veces que quisieron rendirse y decir, no pues, me imagino que, que por lo menos en sus mentes, pues la ilusión, como mencioné antes, prefirieron ya haberlos ya muertos. La verdad. Pero gloria a Dios porque el Señor está obrando tanto en la otra persona como en uno mismo. Y hermanos, si el Señor nos anima a ser fieles en tales casos, ¿qué será de los pleitos? ¿Qué será de las cosas que no son de nuestro agrado? Tenemos que aplicar el Evangelio a nuestros matrimonios. Es decir, si Cristo soporta a Antonio, y Él con amor, viendo que estamos mal, todavía nos guía al arrepentimiento y nos ayuda para que seamos mejores, para que no seamos así. También esa es la meta que tenemos. La meta de guiar a los que pues viven en maldad a conocer las verdades del Evangelio y vivirlo en nuestros matrimonios. Que Dios sea glorificado en todos nuestros matrimonios y esto lo pedimos en el nombre del Señor Jesús. Amén. Nuestro Dios queremos
Matrimonio, Divorcio y Segundas Nupcias
El Matrimonio es hasta que la muerte nos separe. 7 pasajes que apoye esta postura.
Sermon ID | 11172157309 |
Duration | 1:00:55 |
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Category | Special Meeting |
Language | Spanish |
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