La Sangre Expiatoria que Intercede por el Pecador

Purificación: una de las necesidades más grandes del hombre.

1. Cada pecado individual requiere expiación, incluso el que es hecho por negligencia o en ignorancia.

2. El Señor provee por las debilidades de Su pueblo. Los Cristianos todavía pecan...tenemos un Abogado con el Padre...la sangre de Cristo todavía intercede por Sus hijos: Él es la Propiciación por nuestros pecados.

3. La sangre, representando la vida que se perdía, era llevada más cerca al Señor para interceder por el hombre: Cristo es el Abogado de Su pueblo a causa de Su sangre.

4. El pecado nos aparta de Dios. Cristo fue crucificado fuera del pueblo. Fue hecho pecado por nosotros.
   "No debemos olvidarnos del pecado, porque ha sido expiado; y no debemos pensar livianamente del pecado, porque está lavado." (Andrew Bonar)
   "Salgamos pues a él fuera del real, llevando su vituperio." Heb. 13:13
   Miremos constantemente a Cristo.