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Esta mañana vamos a ver un pasaje bien difícil en la Palabra de Dios. Algunos comentaristas dicen que es uno de los pasajes más difíciles en toda la Biblia. Y así que es Hebreos capítulo 6 y vamos a estar el pasaje de estos dos predicas de tanto de hoy como de la próxima semana va a ser para para hablar de este tema, la apostasía terminal. Y en sí, esta mañana, más que todo, vamos a estar en los versículos 4 a 6. Y solo viendo el primer punto del bosquejo, creo, por lo menos, que solo vamos a llegar al primer bosquejo, al primer punto del bosquejo, para terminar la próxima semana. Y bueno, este pasaje habla de lo que, bueno, hay mucha diferencia en cuanto a diferentes interpretaciones y a veces eso también, esas diferencias son por las presuposiciones o también las bases que ya tenemos de la palabra de Dios. Así que el tema es la apostasía terminal, la apostasía terminal. Y vamos a leer todo el capítulo 6 de Hebreos, Hebreos capítulo 6. Y así vamos a ir viendo el pasaje. Dice así, por tanto, dejando las enseñanzas elementales acerca de Cristo, avancemos hacia la madurez, no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas, de la fe en Dios, de la enseñanza sobre lavamientos, de la imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno. Y esto haremos si Dios lo permite. porque en el caso de los que fueron una vez iluminados, que probaron del don celestial, fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, que gustaron la buena palabra de Dios, los poderes del siglo venidero, pero después cayeron, es imposible renovarlos otra vez para arrepentimiento. puesto que de nuevo crucifican para sí mismos al Hijo de Dios y lo exponen a la ignominia pública. Porque la tierra que bebe la lluvia que con frecuencia cae sobre ella y produce vegetación útil a aquellos por los cuales es cultivada, recibe la bendición de Dios. Pero si produce espinos y cardos, no vale nada. Esta próxima es el maldecida y termina por ser quemada. Pero en cuanto a ustedes, amados, aunque hablemos de esta manera, estamos persuadidos de las cosas que son mejores, que pertenecen a la salvación. Porque Dios no es injusto como para olvidarse de la obra de ustedes y del amor que han mostrado hacia su nombre, habiendo servido y sirviendo aún a los santos. Pero deseamos que cada uno de ustedes muestre la misma solicitud hasta el fin, para alcanzar la plena seguridad de la esperanza, a fin de que no sean perezosos, sino imitadores de los que, mediante la fe y paciencia, heredan las promesas. Pues cuando Dios hizo la promesa a Abraham, no pudiendo jurar por uno mayor, juró por el mismo, diciendo, ciertamente te bendeciré, ciertamente te multiplicaré. Y así, habiendo esperado con paciencia, Abraham obtuvo la promesa, porque los hombres juran por uno mayor que ellos mismos. Y para ellos, un juramento dado como confirmación es el fin de toda discusión. Por lo cual Dios, deseando mostrar más plenamente a los herederos de la promesa, la inmutabilidad de su propósito, interpuso un juramento, a fin de que, por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios mienta, los que hemos buscado refugio seamos grandemente animados para hacernos de la esperanza puesta delante de nosotros. Tenemos como ancla del alma una esperanza segura, firme, que penetra hasta detrás del velo, a donde Jesús entró por nosotros como precursor, hecho según el orden de Melquisedec, sumo sacerdote para siempre. Así dice la palabra de Dios. Realmente espero que estén viendo la parte de ánimo en este capítulo. Hay mucho de ánimo. pero nos corresponde primero ver la parte difícil y así que eso es lo que vamos a estar viendo hoy. El pasaje de hoy es, vamos a comenzar a ver los versículos 4 a 9 y estos versículos dicen, porque en el caso de los que fueron una vez iluminados, que probaron del don celestial, fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, que gustaron a la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, pero después cayeron, es imposible renovarlos otra vez para arrepentimiento, puesto que de nuevo crucifican para sí mismos al Hijo de Dios y lo exponen a la ignominia pública. porque la tierra que bebe la lluvia que con frecuencia cae sobre ella y produce vegetación, útil a aquellos por los cuales es cultivada, recibe bendición de Dios. Pero si produce espinos y cardos, no vale nada. Está próxima a ser maldecida y termina por ser quemada. Pero en cuanto a ustedes, amados, aunque hablemos de esta manera, estamos persuadidos de las cosas que son mejores y que pertenecen a la salvación. Esos son los versículos que vamos a estar viendo, tanto esta mañana como el próximo domingo. Y especialmente de los versículos cuatro a seis, pero hay por lo menos cuatro interpretaciones de estos versículos. Hay la interpretación que estas personas, los que fueron iluminados, probaron del don celestial, fueron hechos partícipes, gustaron la buena palabra, después cayeron, son creyentes verdaderos que pierden su salvación. Entonces, una interpretación es que estas personas son creyentes verdaderos quienes pierden su salvación. Esa es una interpretación. Otra interpretación y voy a, bueno tal vez voy a comentar brevemente sobre cada uno de esos y luego les explico el punto de vista que yo tengo y de las bases de las cuales yo voy a estar enseñando. En primer lugar de esta postura, esta interpretación, Es verdad que estas frases que se usan aquí, se usan también en otras partes de la escritura para hablar de creyentes verdaderos. Estas frases, sin lugar a dudas, hablan de creyentes verdaderos. Pero si son creyentes verdaderos que pierden su salvación, La pregunta, una pregunta, hay varias preguntas. ¿Por qué usa el autor, por ejemplo, la tercera persona, para hablar de estas personas? Por ejemplo, dice, en el caso de los que fueron una vez iluminados. Y luego, en versículo nueve, dice, en cuanto a ustedes. Entonces, el autor está haciendo una distinción entre estas personas y los creyentes, los destinatarios en general. Entonces, eso es una buena pregunta al respecto. Y también el versículo 9 también dice que espera, dice, en cuanto a ustedes, aunque hablemos de esta manera, estamos persuadidos de las cosas que son mejores y que pertenecen a la salvación. Y los versículos 7 y 8 están hablando del fruto de lo que producen estas personas en versículos 4 a 6. Es decir, producen acardos y producen espinos. Y el autor está diciendo, en cuanto a ustedes, los destinatarios, Esperamos un fruto mejor, fruto que pertenece a la salvación. Es decir, hay fruto que corresponde a la salvación verdadera. Entonces, íbamos a estar hablando de eso más adelante. Entonces, yo no creo que eso es la interpretación correcta, de que éste está hablando de creyentes verdaderos que pierden su salvación. Y hay muchas otras razones por las cuales no creo eso, pero eso es, en resumidas cuentas, alguna de las cosas. La segunda interpretación es, son creyentes que pierden recompensas, entonces no pierden su salvación, más bien pierden recompensas. Y podemos decir que igual que la postura anterior a favor de esta interpretación es que estas frases también son usadas para hacer referencia a creyentes verdaderos. Entonces eso es a favor de esta interpretación. Pero en contra de esta interpretación es la advertencia fuerte que es imposible renovar al arrepentimiento. Es decir, volver al arrepentimiento y no una relación reconciliada con Dios. Y la ilustración también de los versículos 7 y 8 dicen que esa tierra que no produce, que solo produce espinos y cardos, termina siendo maldecida y quemada. Entonces, yo no creo que está hablando de creyentes que pierden sus recompensas. Y también el otro asunto es que Versículo 9, otra vez, hace un contraste entre el fruto de estas personas y el fruto de los que han recibido la salvación. Hay un fruto de vida que pertenece a la salvación. Estoy resumiendo y no a lo largo de hoy y el próximo domingo vamos a estar desarrollando estas cosas. La tercera interpretación es una situación hipotética. Es una situación hipotética de lo que pasaría si un creyente rechazara a Cristo y su salvación. Es una situación hipotética en sí, que no puede pasar, pero es una advertencia de lo que podría pasar si un creyente podría rechazar a Cristo, darle la espalda. A mi manera de ver, esta es mejor que las interpretaciones anteriores, Pero en sí, pierde el peso real de esta advertencia. Si solo es una situación hipotética, pierde el peso de esa advertencia. Entonces, tampoco creo que esa es la respuesta correcta. Y la cuarta interpretación es lo que yo voy a estar desarrollando. y es que no son creyentes verdaderos, pero son personas que han pasado mucho tiempo y participación en la iglesia. No está hablando de personas del mundo, está hablando de personas que han pasado mucho tiempo en la iglesia, y no solo en la iglesia en general, en buenas iglesias, podemos decir. Esta interpretación, voy a decir, la mía, no es sin sus dificultades, y vamos a ver algunos de ellos, pero creo que explica muy coherentemente todo el pasaje, también da respuestas satisfactorias a las dificultades. Y voy a comenzar con la base y luego van a estar viendo el desarrollo de eso en esto. Solo quiero que ustedes piensen en los israelitas en el desierto. Los israelitas en el desierto. Recuerden que los capítulos anteriores han estado hablando de los israelitas en el desierto. y su experiencia, y qué es lo que terminó pasando con la mayoría de ellos, fueron muertos en el desierto. Entonces, pensando en los israelitas, sólo tomando un paso atrás, voy a decir, a grandes rasgos, vamos a ir viendo esto más minuciosamente en un momento, pero a grandes rasgos, quiero que pensemos en los israelitas y en estas palabras. Dice, versículo 4, en el caso de los que fueron una vez iluminados, que probaron del don celestial, que fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, que gustaron la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero. Y pensando en los israelitas, no sé si les viene a la mente cómo ellos han participado en todo eso. Pero ya ahorita vamos a estar desarrollando eso. Entonces yo creo que está comenzando con esa base, con la alusión a los israelitas en el desierto, para luego aplicarlo a la situación y a los destinatarios y a los otros que han pasado ese tiempo en la iglesia. Tal como los israelitas participaron en muchas bendiciones de Dios, pero no terminaron entrando en la tierra prometida. De una forma similar, un profesante puede participar en muchas bendiciones de Cristo sin ser creyente real y termina apostatando de Cristo. Eso es lo que voy a estar desarrollando. Y aún si uno no está de acuerdo con mi interpretación, debemos entender que esta es una advertencia real, es una advertencia seria, y de nuestra perspectiva, de cada uno de nosotros, las advertencias que va haciendo el autor aquí es de asegurarnos de nuestra salvación. Recordemos qué tan engañoso es el pecado. Por ejemplo, Hebreos 2 habla de no deslizar, Hebreos 3 de perseverar, 4 de creer, y Hebreos 3, sólo por ejemplo, 12 a 14, Hebreos 3, 12 a 14, tengan cuidado hermanos, Tengan cuidado, hermanos ustedes. No sea que en alguno de ustedes hay un corazón malo de incredulidad. Para apartarse del Dios vivo, antes exhortense los unos a los otros cada día mientras todavía se dice hoy. No sea que alguno de ustedes sea endurecido por el engaño del pecado. Porque somos hechos partícipes de Cristo, si es que retenemos firme hasta el fin, el principio de nuestra seguridad. Y ahí versículo catorce nos dice que el retener firme hasta el final es la señal que uno ha sido hecho partícipe de Cristo. Entonces, por ejemplo, hay muchos que dicen, bueno, si tú has hecho la oración del pecador, ya eres creyente, no te preocupes, ya tienes tu pasaje al cielo. Este autor no estaría de acuerdo con eso. Aún en la palabra, hay varios compañeros de Pablo que terminaron apartándose de la verdad. Por ejemplo, Imeneo Alejandro. Y hay otros. Dios es el único que realmente conoce el corazón de cada persona. Así que fácilmente nos engañamos o engañamos a otras personas. Fácilmente nos engañamos a nosotros mismos. Una manifestación de la salvación verdadera es la perseverancia en Cristo. y el buen fruto. Y eso es lo que vamos a estar viendo, tanto en este pasaje y en las predicas que vienen. Recordemos otra cosa, en los versículos anteriores, el autor reprende a los destinatarios por su inmadurez. Y él les va exhortando para que la realidad de su profesión se manifestara en acciones reales. La verdad principal es la apostasía terminal es el rechazo del Hijo de Dios después de haber participado en todas las bendiciones del pueblo de Dios, sin producir ningún fruto duradero que pertenece a la salvación. Y quiero leer algo de Primera de Corintios, capítulo 6. Primera de Corintios, capítulo 6. Y luego vamos a empezar el primer punto. Primera de Corintios, capítulo 6, versículo 9. O no saben que los injustos no herederán el reino de Dios. No se dejen engañar ni los inmorales, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. Y esto eran algunos de ustedes, pero fueron lavados, fueron santificados, fueron justificados en el nombre del Señor Jesucristo y en el espíritu de nuestro Dios. Y aquí en este pasaje, Pablo está haciendo un contraste entre lo que algunos de estos creyentes eran antes y lo que ya son, ya después de su conversión eran. Pero dice, los injustos no heredarán el reino de Dios, no se dejen engañar. Otra vez una advertencia del engaño. ¿Y qué está pasando en la iglesia evangélica hoy día? ¿En la iglesia cristiana hoy día? Hablando, por ejemplo, de la homosexualidad. Ya hay muchos que están diciendo que los inmorales, los homosexuales, y otros pueden heredar el reino de Dios. También la ideología de género es otro fuerte ataque en este momento. No nos dejemos engañar. Eso es un asunto que pertenece al evangelio y también a la salvación. Dice aquí, ustedes fueron lavados, santificados. Dios hizo una obra en ustedes. ¿Para qué? Dejaron atrás esas cosas. Y hoy en día, en la iglesia cristiana evangélica, hay hasta pastores que están enseñando que esas personas pueden heredar el reino de Dios. y no solo pastores, obviamente, pero las personas mismas. Y la apostasía es estar dentro de la iglesia para luego ir yendo, deslizando primero. No es un giro, por decir, abrupto. Normalmente se va deslizando. Y eso, por ejemplo, no sé si ustedes conocen al pastor Stanley. Creo que ya ha fallecido, pero su hijo, Andy Stanley, también es pastor. Pero su hijo, bueno, pastor en el sentido, no es pastor, voy a decir, cristiano, porque él es uno de los que ya van en este camino. ha estado haciendo dudar de la relevancia del, por ejemplo, del Antiguo Testamento, de varias cosas de la Escritura, y ya está exactamente en este camino. Pero hay muchas otras personas así también dentro de la Iglesia. Y lo que estamos viendo aquí es, para nosotros mismos, para nosotros en esta Iglesia, no nos dejemos engañar. La apostasía es real. Podemos engañarnos a nosotros mismos, podemos engañar a otros, pero jamás vamos a engañarle a Dios. Así que con eso vamos a ver esos versículos cuatro a seis, más que todo esta mañana, la participación en las bendiciones de Dios. Tal como Veos 3 y 4, este pasaje está aludiendo a los israelitas en el desierto, quienes participaron en todas las bendiciones y los milagros de Dios sin confiar verdaderamente en Él. Y vamos a ir viendo, bueno, en sí los he dividido en tres diferentes aspectos. Los que fueron iluminados, que probaron, eso es uno. Que probaron del don celestial y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, es dos. Y el versículo cinco es el tercero, que he dividido así. Y vamos a ver de cada uno de esos, la alusión primero a los israelitas en el desierto, luego la enseñanza para los creyentes hebreos, y luego la aplicación para nosotros hoy en día. Entonces, la alusión de los israelitas en el desierto, en la primera parte, en el caso de que fueron una vez iluminados, una vez iluminados. En el desierto, los israelitas, si ustedes recuerdan, fueron guiados por Yahweh Dios mismo. ¿Cómo fueron guiados? Éxodo 13, 21 y 22 dice, Yahweh, Éxodo 13, 21 y 22, Yahweh iba delante de ellos de día en una columna de nube para guiarlos por el camino, de noche en una columna de fuego para alumbrarlos. a fin de que anduvieron de día y de noche. No quitó de delante del pueblo la columna de nube durante el día, ni la columna de fuego durante la noche. Y también en Números habla de que cuando ya habían erigido el tabernáculo, esa nube y el fuego estaban encima del tabernáculo. Y cuando se levantaba, el pueblo mismo se levantó para irse. Entonces, eso fue una iluminación, podemos decir, física, por la cual Dios guió al pueblo de Israel. Pero también había la guía espiritual. Yahweh Dios mismo estaba mostrándoles que sólo Él es la luz verdadera. Sólo Él guía en la verdad. Y esta iluminación espiritual fue muy marcada con los israelitas. En muchas maneras, él, Yahweh Dios, se veía distinguido de los dioses falsos de Egipto y los otros dioses falsos de las otras tierras. Pero tristemente, muchos de los israelitas rehusaron creer en él y andar en su luz. Así que debemos entender que los israelitas realmente fueron iluminados tanto físicamente como espiritualmente. ¿Pero qué es lo que pasó con la mayoría de ellos? No creyeron, no obedecieron y terminaron muertos en el desierto. Para los creyentes hebreos, ¿cuál es la aplicación para ellos? Bueno, yo creo que ya deben estar, espero que ya su mente está agarrando, por decir, la pista de adónde vamos. En Juan, capítulo 1, versículo 9, dice Juan 1, 9, Existía la luz verdadera que al venir al mundo alumbra a todo hombre. ¿Y quién es esa luz? Cristo, Jesucristo, el Hijo de Dios. Él es quien que dice alumbra a todo hombre. Su luz da luz a todos. Y por ejemplo, ¿cómo sabemos que todo lo que va pasando en nuestra cultura en cuanto a la sexualización de nuestros niños y de muchas otras cosas, de la corrupción por todos lados, el engaño, las mentiras, ¿por qué sabemos que eso está mal? Es por la luz de Dios y de Jesucristo. Sencillamente. Esa es una luz que alumbra a todos. Luego Juan 8, versículo 12, Juan 8, versículo 12, dice, Jesús les habló otra vez diciendo, yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida. Otra vez, Jesucristo está diciendo, yo soy la luz del mundo. Yo soy. Y después de terminar su ministerio, obviamente los apóstoles proclamaron el Evangelio de Cristo como la luz del mundo. Y los que escucharon el Evangelio, para luego unirse a la comunidad cristiana, participaban en los beneficios de la comunidad cristiana. Y para los hebreos, los destinatarios de esta carta, esta iluminación fue el conocimiento que Jesús es el Mesías prometido, el perfecto sacrificio y el sumo sacerdocio, el sumo sacerdote eterno. ¿Y qué es lo que está advirtiendo el autor de esta carta a los hebreos? Ellos estaban siendo presionados y hasta sufriendo la persecución para volver atrás, volver a los sacrificios anteriores antes de Cristo, para apartarse de Cristo. Y así que, el autor está diciendo, ya tienen la luz, Jesucristo. Ya han sido iluminados por él. Así que, no los que apostataron volviendo a los sacrificios del primer pacto, por ejemplo, estaban crucificando nuevamente a Jesucristo y exponiéndole a la vergüenza pública, lo que vamos a estar viendo en versículos 6. Y así en la Iglesia Primitiva, también una interpretación popular de esta frase, esta iluminación, es que hace referencia al bautismo cristiano. Y eso es posible porque eso fue la introducción a la comunidad de los creyentes. Pero aún Aún después de haber introducido en la comunidad de los creyentes, como hemos mencionado, hay varios que se apostataron. Primero de Timoteo 1, 19, dice primero de Timoteo 1, 19, guardando la fe una buena conciencia, que algunos han rechazado y naufragaron en lo que toca a la fe. Entre ellos están Jimeneo y Alejandro. Y así mencionan dos personas que sí estaban adentro de la comunidad. ¿Y cuál es la aplicación para nosotros de esto? Bueno, esta iluminación es una iluminación de los que están dentro de buenas iglesias tienen. ¿Por qué? Nosotros, por ejemplo, y en muchas otras iglesias que enseñan el Evangelio, que enseñan las verdades de Cristo, ellos van, las personas van profundizando su conocimiento de las verdades de Jesucristo. Han sido bautizados, como creyentes y pueden haber participado obviamente como maestros, líderes y pastores en las iglesias. Y hay varios ejemplos, existen hasta pastores reformados, quienes han dado la espalda al Evangelio Verdadero. Han apostatado, algunos al mundo, algunos al mundo y otras a iglesias falsas como la iglesia católica romana. Así que eso sigue pasando hoy día. Por igual, puede ver personas dentro de esta iglesia, que están aquí esta mañana, que tienen la apariencia de ser cristianos, pero al pasar el tiempo se deslizan y se apartan de Dios. Y otra vez, la señal Como hemos estado viendo y también lo que veremos de un creyente verdadero es que permanece, permanece. No es que no tiene caídas, no es que no lucha con el pecado, pero vuelve, se arrepiente, se levanta nuevamente. Y Jesucristo, debemos entender, vino para exactamente eso. Este pasaje está hablando de los que le dan la espalda, definitivamente, a Cristo. La segunda frase, o dos frases, pero conectado con I. Hebreos 6, 4. Que probaron del don celestial y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo. Probaron del don celestial y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo. Otra vez la alusión a los israelitas en el desierto. La palabra probaron es la misma palabra que se usa para probar comida. Yo creo que aquí está haciendo la referencia específica a cómo Dios mismo los sostuvo en el desierto con el maná y a veces con carne. Y no hay pasajes en Éxodo que especialmente que hablan de cómo Dios sostenía a los israelitas con ese maná y la carne. Y de su parte, obviamente, el Espíritu Santo participaba en dar esa provisión. Y este don fue... ¿Quiénes de los israelitas recibieron ese don, esa provisión de Dios? ¿Sólo los creyentes verdaderos? No, todo el pueblo, todo el pueblo. Así que ellos estaban participando en ese don celestial. También el Espíritu Santo obraba en ese tiempo en formas más específicas. Por ejemplo, en Éxodo 31 dice que Yahweh llenó con su Espíritu varios hombres para realizar obras específicas, obras específicas. Y no habla, por ejemplo, en cuanto a la construcción del Tabernáculo. Y otro ejemplo ahí son los sacerdotes, sobre los cuales se impusieron las manos para apartarlos y santificarlos por su obra especial. Así que Yahweh Dios también obraba por medio de su espíritu de formas especiales con los israelitas, tanto en preservarlos en el desierto como en apartarlos y santificarlos como su pueblo especial. Y así que, yo creo que sí está haciendo alusión a la obra de Dios para con los israelitas. La enseñanza para los creyentes hebreos. Primero, ¿qué es lo que nos debe venir a la mente? ¿Quién es el pan de vida? Otra vez, Jesucristo. Juan 6, versículo 30 en adelante, Juan 6, 30 en adelante, le dijeron entonces que pues haces tú como señal para que veamos y te creamos. ¿Qué obra haces? Nuestros padres comieron el maná en el desierto. Los líderes judíos están hablando aquí. Como está escrito, les dio a comer pan del cielo. Entonces Jesús les dijo, en verdad les digo, que no es Moisés el que les ha dado el pan del cielo, sino que es mi padre el que les da el verdadero pan del cielo. Porque el pan de Dios es el que baja del cielo y da vida al mundo. Señor, danos siempre este pan, le dijeron. Jesús les dijo, yo soy el pan de vida. El que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed. Y muchos teólogos dicen que probar el don celestial hace referencia a la cena del Señor. Y yo creo que sí, puede tener razón en decir eso, porque como acabo de leer, Jesucristo es el pan de vida. Y a todas las personas, no en la iglesia primitiva, qué es lo que pasaba cuando una persona creía en el Señor, fue bautizado y comenzó a participar con los hermanos en la iglesia, recibiendo la cena del Señor. Hablando del Espíritu Santo, recordamos que también había creyentes verdaderos y no creyentes que participaron en obras, en las obras del Espíritu Santo. En Mateo capítulo 10, Mateo 10, Dice, llamando a sus 12 discípulos, Jesús les dio poder sobre los espíritus inmundos para expulsarlos y para sanar toda enfermedad y toda dolencia. Llamando a sus discípulos, Jesús les dio poder sobre los espíritus inmundos para expulsarlos y para sanar toda enfermedad y toda dolencia. Y hay otro pasaje cuando habla del 72, Y ¿quién estaba participando en eso? Judas. Judas también participaba en eso. Así que en su ministerio, Jesús tenía un apóstol que no era creyente verdadero, pero aún así participaba en esa parte. Y Juan 6, si volvemos ahí, bueno, no tiene que volver ahí, pero Juan 6 termina indicando que varios de sus discípulos lo abandonaron. Después de toda la enseñanza, yo soy el pan de vida. Yo soy el que vino desde el cielo para dar vida a muchos de sus discípulos. Dice en versículo sesenta y uno, Jesús, consciente de que sus discípulos murmuraban por esto, les dijo, esto los escandaliza. Pues que si verán al hijo de hombre ascender a donde estaba antes. El espíritu es el que da vida. La carne para nada aprovecha. Las palabras que yo les he hablado son espíritu y son vida. Pero hay algunos de ustedes que no creen porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían y quién era el que lo iba a traicionar. Así que eso también pasaba ahí. Y en la iglesia primitiva también, en Hechos 8 por ejemplo, habla de uno que recibió la palabra, pero después es Simón el mago que recibió la palabra, fue bautizado, Pero después, en el transcurso del tiempo, se manifestó que no era creyente verdadero. Así que, eso es lo que ha pasado no solo en el Antiguo Testamento, también en el tiempo de Jesús, y sigue pasando hasta el día de hoy. ¿Qué es la aplicación para nosotros? Jesús sigue siendo el pan verdadero que vino del cielo. Tal como en los días de los israelitas en el desierto, como en los días de Jesús, los días de los apóstoles, los hebreos cuando fue escrita esta carta, sigue habiendo personas que participan con Cristo, pero terminan en la apostesía. Hay personas que profesan ser creyentes, participan, reciben el bautismo, participan en la cena del Señor, pero luego se partan. Pueden participar, por igual, en las obras del Espíritu Santo. Y obviamente, ¿qué es una manera de participar en la obra del Espíritu Santo en el sentido real que cada uno de nosotros? Cuando uno está dentro de la comunidad de los creyentes, Hay muchos que son verdaderamente creyentes y esas personas manifiestan en sus vidas el fruto de salvación, es decir, el cambio, la transformación por el Espíritu Santo. Y estas personas apóstatas están viendo Eso. Están viendo cómo Dios va transformando las vidas de otros creyentes, de los creyentes verdaderos. Y eso es también una forma de participar ahí. Continuamos con Hebreos 6, versículo 5. Hebreo 6.5. Que gustaron la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero. Que gustaron la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero. Otra vez la alusión a los israelitas en el desierto. Dice que gustaron la buena palabra de Dios. Bueno, en sí, había muchos momentos en los cuales los israelitas recibieron la palabra de Dios. Por ejemplo, aún estando en Egipto, Yahweh les dio varias instrucciones para la Pascua y su salida de Egipto. Luego, en sus peregrinaciones, Yahweh siempre les hablaba su palabra. Obviamente el momento más importante fue cuando recibieron los 10 mandamientos y luego las otras instrucciones. Deuteronomio capítulo 4, si pueden pasar ahí, Deuteronomio 4, 1 a 8. Ahora pues, oh Israel, escucha los estatutos y los decretos que yo les enseño para que los cumplan, a fin de que vivan y entren a tomar posesión de la tierra que Yahweh, el Dios de sus padres, les da. Ustedes no añadirán nada a la palabra que yo les mando, ni quitarán nada de ella. para que guarden los mandamientos de Yahweh, su Dios, que yo les mando. Sus ojos han visto lo que Yahweh hizo en el caso de Baal peor. Pues a todo hombre que siguió a Baal peor, Yahweh, su Dios, lo destruyó de en medio de ti. Pero ustedes que permanecieron fieles a Yahweh, su Dios, todos están vivos hoy. Miren, yo les he enseñado estatutos y decretos, tal como Yahweh mi Dios me ordenó, para que así los cumplan en medio de la tierra en que van a entrar para poseerla. Así, guárdenlos, pónganlos por obra, porque ésta será su sabiduría, su inteligencia, ante los ojos de los pueblos que al escuchar todos estos estatutos dirán, Ciertamente, esta gran nación es un pueblo sabio e inteligente. Porque qué nación grande hay que tenga un Dios tan cerca de ella como está Yahweh nuestro Dios siempre que lo invocamos. O qué nación grande hay que tenga estatutos y decretos tan justos como toda esta ley que hoy pongo delante de ustedes. Los israelitas realmente recibieron la buena palabra, gustaron la buena palabra de Dios en mucho sentido. Y luego dice ahí también que participaron también en los poderes del siglo venidero. del siglo venidero. Bueno, podemos hablar de los poderes, los milagros, las señales que ellos experimentaron. Obviamente está hablando de un momento de la historia que habían presenciado mucho de la obra de Dios de una forma extraordinaria. ¿Quiénes eran los israelitas en el desierto? No, en ese momento de la historia participaron en, o fueron los recipientes, tal vez, de todas esas obras maravillosas del Señor. Salmo 106, versículo 2, en adelante dice, ¿Quién puede relatar los poderosos hechos de Yahweh? ¿Quién puede relatar los poderosos hechos de Yahweh, o expresar toda su alabanza? Nuestros padres en Egipto no entendieron tus maravillas, no se acordaron de tu infinito amor, sino que se revelaron junto al mar, en el mar rojo. Y continúa el pasaje hablando de las maravillas de Dios para con los israelitas y como ellos no entendieron. No, hay muchos milagros que ellos experimentaron, las diez plagas, el recibir agua de una roca, el recibir comida, la victoria sobre las ananasitas, el rescate de las serpientes, etcétera, etcétera, etcétera. Había muchos milagros y obviamente Dios mismo los sostenía físicamente no sólo su comida, agua, su ropa también, con todo lo que necesitaban. Sin lugar a dudas, los israelitas experimentaron de primera mano los poderes del siglo venidero. La enseñanza para los creyentes. ¿Qué tal los que vivían en los tiempos de Jesús y de los apóstoles? ¿Quién es la Palabra de Dios? Otra vez, es Jesús, el Hijo de Dios. Es el Verbo, es la Palabra de Dios. Juan 1.1, en el principio ya existía el Verbo, es decir, la Palabra, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Juan 1 14, el verbo se hizo carne y habitó entre nosotros y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y verdad. Hebreos 1, 1 y 2, Dios habiendo hablado hace mucho tiempo en muchas ocasiones y de muchas maneras a los padres por los profetas. En estos últimos días nos ha hablado por su Hijo, a quien constituyó heredero de todas las cosas, por medio de quien hizo también el universo. Jesús es, la palabra de Dios, la revelación perfecta y final de Dios. Sin lugar a dudas, los creyentes en la iglesia primitiva, incluyendo los destinatarios de esta carta, eran los que recibieron la buena palabra de Dios de una forma extraordinaria. Y los poderes del siglo venidero, bueno, si pensamos en lo que pasaba en cuanto a los milagros físicos que se hacían, Había muchos, ¿no? Entre en el tiempo de Jesús, Juan 20, al final del capítulo dice, muchas otras señales hizo también Jesús, que no están escritas. Pero estas han sido escritas para que ustedes crean que Jesús es el Cristo. obviamente ellos participaron en esas, bueno en presenciar todos esos milagros y también ser los recipientes. Pero otra vez el milagro más increíble, que es el milagro más increíble que nosotros experimentamos es de ser sacado del reino de las tinieblas y trasladado al reino de la luz. Lázaro fue resucitado de los muertos físicamente. ¿Qué es lo que le pasó después? Tuvo que morir dos veces físicamente. Pero el milagro más asombroso es cuando Dios agarra a una persona del reino de las tinieblas y lo traslada al reino de su hijo. Y eso es recibir la reconciliación, el perdón de pecados y ser hechos partícipes de la vida eterna. Y hay varios pasajes que hablan de eso. En 1 Pedro dice que no hemos nacido, no de una simiente corruptible, sino de uno que es incorruptible mediante la palabra de Dios. Y los destinatarios de esta carta habrían presenciado, y obviamente muchos de ellos, Habían experimentado este milagro de ver vidas transformadas porque habían participado en la iglesia. Pero si después de esta participación en la iglesia llegaron a apartarse del Dios rechazando al Mesías Jesucristo, ¿qué es lo que les quedó? Nada más que recibir el justo castigo. Así que el autor está diciendo que si alguien rechaza a Jesucristo, la palabra de Dios y su perfecto sacrificio, que también se resucitó de entre los muertos, ya no queda remedio, sólo la condenación segura para nosotros. Obviamente es muy semejante. Existe los que asisten buenas iglesias. Ya no estamos hablando de las iglesias que tuercen toda la palabra de Dios. Estamos hablando más que todo de iglesias, buenas iglesias, en las cuales reciben la buena palabra de Dios semana tras semana. Podrían otra vez haber recibido el bautismo cristiano, participado en la cena del Señor, Podrían haber sido líderes y pastores. Y si tales personas no tienen una relación real de corazón con el Hijo de Dios, quien es la Palabra, y terminan apartándose de Jesús, no hay duda de lo que les espera. Es la condenación segura. ¿Qué dice Hebreo 6, versículo 6, de estas personas, Hebreo 6, 6? Pero después cayeron, entonces todos los que estaban, sí, dentro de la comunidad, el pueblo de Dios, pero después cayeron, es imposible renovarlos otra vez para arrepentimiento, puesto que de nuevo crucifican para sí al Hijo de Dios y lo exponen, perdón, a la ignominia pública, es decir, la condenación segura. Y eso es algo que vamos a estar viendo en el tercer punto, más que todo vamos a estar viendo más ese versículo, no vamos a profundizar este versículo. Pero voy a terminar este primer punto leyendo algo de primera Corintios, capítulo 10 primera corintios capítulo 10 versículo 1 en adelante primera corintios 10 1 en adelante porque no quiero que ignoren hermanos que todos nuestros padres estuvieron bajo la nube y todos pasaron por el mar. En Moisés, todos fueron bautizados en la nube y en el mar. Todos comieron el mismo alimento espiritual. Bebieron la misma bebida espiritual, porque bebían de una roca espiritual que los seguía, y la roca era Cristo. Sin embargo, Dios no se agradó de la mayor parte de ellos, y por eso quedaron tendidos en el desierto. Estas cosas sucedieron como ejemplo para nosotros, a fin de que no codiciemos lo malo, como ellos lo codiciaron. No sean, pues, idólatras. Como fueron algunos de ellos, según está escrito, el pueblo se sentó a comer y a beber, se levantó a jugar. Ni forniquemos, como algunos de ellos fornicaron. En un día cayeron veintitrés mil. Ni provoquemos al Señor, como algunos de ellos lo provocaron, y fueron destruidos por las serpientes. Ni murmuren, como algunos de ellos murmuraron, y fueron destruidos por el Destructor. Estas cosas les sucedieron como ejemplo. Fueron escritas como enseñanza para nosotros, para quienes ha llegado el fin de los siglos. Por tanto, el que cree que está firme, tenga cuidado. No sea que caiga. Los creyentes verdaderos, los que somos creyentes verdaderos, tomamos esta advertencia con seriedad. Yo creo que una señal, una manifestación de un creyente verdadero es que toma esta advertencia seriamente. No está hablando en chiste. La apostasía es real. Y la fe en Cristo no es algo que hice en el pasado o tenía o tuve en el pasado. La fe en Cristo es algo que tengo hoy. Sigo creyendo hoy. Sigo arrepintiéndome hoy, volviendo de lo que no es correcto hoy. Y una razón por la cual participamos en la Cena del Señor cada domingo es específicamente para recordar esta gran obra de Cristo por nosotros, para no darle la espalda a Cristo. Recuerden que yo creo que está hablando de los que no son creyentes verdaderos. Dios es el único que conoce el corazón de cada uno. Los creyentes verdaderos y como esta carta, el autor estaba hablando a los inmaduros, pero no estaba diciendo no son creyentes. Estaba diciendo, ustedes no son maduros, esfuércense para madurar. Y luego, después de esos versículos, realmente los versículos a continuación son de gran ánimo, porque el autor dice, bueno, hay frutos en ustedes que acompañan la salvación. Y así que no quiero desanimarnos, más bien quiero que realmente tomemos en serio eso. Y luego, al final del capítulo, ¿qué está hablando? Está hablando otra vez de Cristo. Y una y otra vez, el enfoque del autor de aquí es, vuelve sus ojos a Cristo, profundiza tu conocimiento de quién es, de lo que Él ha hecho, Y eso es el camino hacia la madurez. Pero cuando quedamos con los ojos en nosotros mismos, quedamos mal. Es cada vez más volver a la gran obra de Cristo. Y eso es la forma de seguir madurando. Para terminar otra vez los versículos que hemos visto, algunos más, porque en el caso de los que fueron una vez iluminados, que probaron del don celestial, fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, que gustaron la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, pero después cayeron, es imposible renovarlos otra vez para arrepentimiento, puesto que de nuevo crucifican para sí mismos al Hijo de Dios. Y lo exponen a la ignominia pública, porque la tierra que bebe la lluvia, que con frecuencia cae sobre ella y produce vegetación útil, aquellos por los cuales es cultivada, recibe bendición de Dios. Pero si produce espinos y cardos, no vale nada. Está próxima a ser maldecida. Termina por ser quemada. Pero en cuanto a ustedes, amados, aunque hablemos de esta manera, estamos persuadidos de las cosas que son mejores y que pertenecen a la salvación, porque Dios no es injusto como para olvidarse de la obra de ustedes y del amor que han mostrado hacia su nombre, habiendo servido y sirviendo aún a los santos. Pero deseamos que cada uno de ustedes muestre la misma solicitud hasta el fin para alcanzar la plena seguridad de la esperanza, a fin de que no sean perezosos, sino imitadores de los que, mediante la fe y la paciencia, heredan las promesas. Oremos, hermanos. Gracias, señor, por este pasaje. Y, señores, es difícil entender todos los asuntos relacionados y exactamente cada detalle. Pero ayúdenos, señora, a veces nos perdemos en algunos detalles que no entendemos. Pero ayúdenos a tener el panorama general a grandes rasgos de lo que tú estás enseñando. del ejemplo de los israelitas en el desierto, y como todos ellos participaron en todas sus bondades, pero aún así, la mayor parte de ellos quedaron tendidos en el desierto. Y ayúdenos dentro de la iglesia, los que recibimos la buena palabra. Ayúdenos, Señor, a seguir esforzándonos hasta el final, Señor, entendiendo que la perseverancia es una de las señales de la fe verdadera y de haber recibido la salvación eterna, Señor. Y ayúdanos a no perder de vista, Señor, que esto es tu obra en nosotros. No es que nosotros mismos estamos haciendo esta obra en nosotros, más bien dependemos de ti dependemos de tu espíritu, meditamos en quien eres tú, tus grandes, bueno, todo lo que tú has hecho y por medio de eso tú vas madurándonos. Gracias señor por eso, gracias por nuestro gran salvador, gracias que podemos confiar plenamente en ti, en tu nombre, amén.
La apostasía terminal #1
Series Hebreos
Verdad principal: La apostasía terminal es el rechazo del Hijo de Dios después de haber participado en todas las bendiciones del pueblo de Dios sin producir ningún fruto duradero que pertenece a la salvación.
Escrituras tomadas de la Nueva Biblia de las Américas Copyright 2005 por The Lockman Foundation; usadas con permiso; todos los derechos reservados. www.NuevaBiblia.com
Sermon ID | 101231741594731 |
Duration | 1:08:52 |
Date | |
Category | Sunday Service |
Bible Text | Hebrews 6:4-9 |
Language | Spanish |
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